Taiwan Today

Indudablemente el problema socio-económico más antiguo de la humanidad es relacionado con el reparto de las tierras. Surgió en la China antigua, en Egipto, la India y el Oriente Medio. El desequilibrio entre la población y los recursos agrícolas ha sido fuente de malestar social. Aún al restablecerse el contrapeso, existía una pugna de intereses entre arrendatarios y terratenientes. Los que cultivaban la tierra consideraban que ésta debía ser de su propiedad, pasando por alto el momento histórico que atravesaba la estructura social. El problema sigue sin resolverse en grandes zonas del mundo, sobre todo en el Asia e Iberoamérica. También habrá demandas de reforma en otras partes a medida que la población aumente y desaparezcan las fronteras. La reforma agraria en Taiwan fue un proceso pacífico y ordenado que, por un lado, protegió los derechos de todas las personas afectadas y por el otro, tomó en cuenta los objetivos del principio de "la tierra para el que la cultiva". La República de China empezó con la rebaja de la renta pagada por los campesinos arrendatarios; luego se adjudicaron tierras públicas a los campesinos y finalmente, la mayor parte de las propiedades fueron compradas a los terratenientes y vendidas a los que anteriormente explotaban el agro, en condición de arrendatarios. Se deshechó la expropiación y el Gobierno procuró que el propietario recibiera un precio justo y fuera protegido en contra de los peligros de una inflación. La feliz conclusión de esta empresa en Taiwan ofrece lecciones de interés para aquellos que tienen necesidad de abordar el problema de la reforma agraria o que deberán afrontarlo en un futuro próximo. Ninguna de estas medidas reformistas es exclusivamente china. Pueden ser adaptadas a cualquier sociedad libre. Como ha sucedido en Taiwan, tales medidas tendrán el efecto de estimular la formación de capitales para la industrialización y al mismo tiempo facilitarán el arreglo y la solución de los diferentes conflictos sociales. La falta de una reforma agraria ha afligido al continente chino con períodos alternativos de guerra y paz en el curso de su historia. La mayor de todas las pruebas, habrá de venir al ser liberado y el Gobierno de la República de China en Taiwan, basado en los Tres Principios del Pueblo del Dr. Sun Yat-sen, nuestro padre fundador, tenga la oportunidad de resolver el problema planteado desde hace tanto tiempo en el territorio continental.