presidente Chen Shui-bian insistió el 22 de los corrientes que el referéndum es un derecho inalienable del pueblo. El Mandatario hizo tal declaración en la sureña ciudad de Kaohsiung frente a reportajes de prensa que indican que Estados Unidos se opone a que este tipo de actividad se realice en Taiwan.
Dirigiéndose a un grupo de exalumnos de la Universidad Nacional Sun Yat-sen, Chen manifestó que el referéndum es una importante forma mediante la cual el pueblo puede determinar su propio destino y el futuro del país. Por ende, como Presidente de la República, es responsabilidad suya defender este derecho, agregó.
La declaración de Chen surgió como respuesta a un reportaje de la prensa local donde se indica que el director del Instituto Americano en Taiwan (AIT, siglas en inglés), Douglas Paal, manifestó la preocupación de la Administración Bush acerca de la postura de Taiwan para realizar un referéndum.
El Gobierno en Taiwan ha estado estudiando la posibilidad de realizar un referéndum acerca del destino de la Cuarta Planta de Energía Nuclear y de si se debe permitir que la isla ingrese en la Organización Mundial de la Salud.
Según el reportaje, Paal presentó la preocupación de la Administración estadounidense en una reunión y en una fiesta de despedida al subdirector saliente del AIT. El AIT es la oficina encargada de representar los intereses de Estados Unidos en vista de la ausencia de relaciones diplomáticas entre ese país y la República de China.
El ministro de Relaciones Exteriores, Eugene Y. H. Chien, confirmó el 21 del presente que Paal le manifestó en dos ocasiones a inicios del presente mes que Washington está "fuertemente preocupado" acerca de la postura de Taiwan.
Según Paal, el Gobierno de EE UU está preocupado de que la situación podría quedar fuera de control si Taiwan pide un referéndum sin precedentes, lo cual ocasionaría posiblemente un impacto adverso en las relaciones a través del Estrecho de Taiwan, reveló el Canciller.
Chien dijo que le explicó la posición del Gobierno con respecto a la celebración de un referéndum de consulta a Paal durante una reunión que realizó el 16 de junio, y posteriormente informó al presidente Chen acerca de sus conversaciones con el director del AIT.
Pekín ha criticado públicamente el deseo de Chen de realizar un referéndum y reclama que el asunto ha sido influenciado por los grupos pro independencia en Taiwan. Se cree que China continental también ha presentado al Gobierno de EE UU su postura de oposición a un referéndum por parte del pueblo de Taiwan.
Por otro lado, el ministro sin cartera Hsu Chih-hsiung señaló que no existen problemas legales con respecto a que Taiwan realice un referéndum de consulta sobre las políticas públicas o los asuntos que tengan que ver con el pueblo. Cualquier problema técnico puede ser resuelto fácilmente, agregó.
Hsu, profesor de Derecho de la Universidad Nacional de Taiwan, ha sido comisionado por el primer ministro Yu Shyi-kun para que dirija un estudio de factibilidad acerca de la realización de un referéndum sobre algunos asuntos. Se espera que el estudio financiado por el Gobierno será completado muy pronto.
Lo ideal sería que el referéndum se realice después que se haya aprobado una legislación relacionada, señaló Hsu. Aunque no exista una tal legislación, la realización de un referéndum acerca de ciertas políticas o asuntos públicos es algo factible, ya que la Constitución de la República de China no prohibe este tipo de actividades.
El secretario general de la Presidencia, Chiou I-jen, aclaró que el referéndum propuesto es consistente con las declaraciones del presidente Chen en su discurso de toma de posesión en 2000, ya que el mismo no cambiará el estatus quo de la nación.
Durante su discurso de investidura, Chen prometió los "cinco noes", incluyendo no realizar referéndum sobre el asunto de la reunificación con China continental o la independencia de Taiwan.