El presidente Ma Ying-jeou declaró el 30 de noviembre que la República de China está dispuesta a seguir los reglamentos internacionales para reducir las emisiones de carbono, a pesar de no ser una de las partes signatarias de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC, siglas en inglés).
El Mandatario hizo dichas declaraciones durante una reunión con un grupo de participantes en el Simposio Sino-Japonés de Ingeniería y Tecnología Modernas, realizado en Taipei.
Haciendo estas declaraciones coincidiendo con el inicio de la conferencia sobre el cambio climático, la 21ª sesión de la Conferencia de las Partes (COP 21, siglas en inglés) de la UNFCCC y la undécima sesión de la Conferencia de la Partes en calidad de reunión de las Partes al Protocolo de Kyoto; que se realizan hasta el 11 de diciembre en París, Francia, Ma señaló que la semana pasada encabezó una delegación de funcionarios gubernamentales en una visita a la parte central de Taiwan, a fin de conocer más a fondo acerca de los esfuerzos que se realizan allí para reducir las emisiones de carbono.
Asimismo, Ma describió la Ley sobre la reducción de gases de efecto invernadero de la República de China, que comenzó a ser implementada en julio, como un paso importante en los esfuerzos desplegados por Taiwan para reducir las emisiones de carbono.
Esta nueva ley estipula que Taiwan debe reducir sus emisiones de carbono a la mitad del nivel de 2005 antes del año 2050.
Explicando acerca de los esfuerzos del Gobierno por reducir las emisiones de carbono, Ma indicó que su Administración ha completado proyectos para promover Nuevo Taipei, Taichung, Tainan e Yilan como ciudades de bajo carbono; al igual que Quemoy (Kinmen) y las islas Pescadores (Penghu) como islas de bajo carbono.
El Mandatario aseveró que tanto Taiwan y Japón dependen en sobremanera de la importación de energía, ya que el 98 por ciento de la misma proviene de otras naciones.
Ambas naciones se encuentran en la mayor zona sísmica asiática, por lo que Ma advirtió que la República de China ha estado siguiendo cuidadosamente los cambios en las políticas sobre energía nuclear de Japón, tras el accidente en la Planta de Energía Nuclear Daiichi en Fukushima, después de ser abatida por el terremoto y maremoto del 11 de marzo de 2011.
Ma reveló que recibió informes de que Japón estableció plantas de energía solar en los embalses, como parte de sus esfuerzos por desarrollar la energía renovable, y añadió que desea saber más acerca de los resultados de las nuevas medidas.
En una noticia relacionada, el presidente de Francia, François Gérard Georges Hollande, hizo un llamado el 30 de noviembre por un acuerdo “universal y comprometedor” en la cumbre de las Naciones Unidas sobre el cambio climático.
“El futuro de la humanidad descansa sobre sus hombros”, advirtió Hollande a los 150 líderes mundiales asistentes y otros participantes en la COP 21.
Delegados de 195 países signatarios están tratando de llegar a un acuerdo histórico que reduzca de forma efectiva las emisiones de carbono y alivie el calentamiento global.