El presidente Ma Ying-jeou elogió las cada vez más entrañables relaciones diplomáticas entre la Santa Sede y la República de China. El Mandatario hizo tales declaraciones al recibir en audiencia el 7 de abril al encargado de Negocios saliente de la Nunciatura Apostólica en la República de China, monseñor Paul Fitzpatrick Russell.
Russell ha sido el jefe de la sede diplomática del Vaticano en Taiwan, llegando a Taiwan poco después que Ma asumiera el cargo durante su primer mandato. Por coincidencia, al momento que Ma se prepara para entregar el cargo presidencial a su sucesora, se ha comunicado la reasignación de Russell a Turquía.
Ma destacó que durante sus ocho años en la Presidencia, la Santa Sede ha enviado más miembros del clero a Taiwan que a otros países. También señaló que el Vaticano y la República de China firmaron su primer tratado en 2011, lo cual constituyó un evento importante en las relaciones entre ambas naciones.
“La amistad entre la República de China y la Santa Sede se remonta a hace 74 años. Las relaciones bilaterales han ido renovándose con el paso de los años y disfrutamos de una estrecha interacción”, afirmó Ma durante la audiencia.
El Mandatario también manifestó que el llamado de la Santa Sede por la paz y la compasión le alentó durante sus ocho años en el cargo, convirtiendo a Taiwan en un promotor de la paz y proveedor de ayuda humanitaria en el mundo.
El Ministerio de Relaciones Exteriores confirió la Orden de la Estrella Brillante en Grado de Gran Cordón a Russell durante una cena de despedida realizada el 7 de abril, en reconocimiento a sus esfuerzos por promover la cooperación y los intercambios entre la República de China y la Santa Sede.