La reanudación de los diálogos comerciales con Estados Unidos es un reflejo de la economía más liberal de Taiwan y sus lazos más profundos con los socios comerciales del mundo.
En marzo de este año, la relación bilateral entre la República de China (RDCh) y Estados Unidos tuvieron un repunte con la reanudación de las negociaciones comerciales bajo el Acuerdo Marco de Comercio e Inversiones (TIFA, siglas en inglés) entre ambos países tras un hiato de más de cinco años. Cho Shih-chao, viceministro de Economía, encabezó la delegación de Taiwan en los diálogos, que fueron realizados en Taipei. El lado estadounidense fue dirigido por Demetrios Marantis, vice representante comercial de Estados Unidos. Cho dijo que las discusiones fueron “fructíferas” y sentaron una base sólida para el desarrollo continuo de las relaciones económicas y comerciales entre ambos lados, mientras que Marantis describió los diálogos como un “gran éxito”.
El encuentro de marzo marcó la séptima ronda de negociaciones bajo TIFA desde que se firmó el acuerdo en 1994 en Washington, D. C. La primera reunión de TIFA fue realizada en marzo de 1995 en la capital estadounidense. En los años siguientes, TIFA ha sido el mecanismo nuclear a través del que ambos países han profundizado sus relaciones económicas. “TIFA brinda una plataforma para que los funcionarios de alto nivel de ambos lados dialoguen de manera regular sobre las principales políticas económicas y comerciales”, señala Dale Jieh, jefe negociador adjunto de la Oficina de Negociaciones Comerciales, subordinada al Ministerio de Economía. La próxima reunión de TIFA está previsto a realizarse en 2014 en Washington, D. C.
Taiwan y Estados Unidos han disfrutado de fuertes lazos económicos durante décadas. En 2012, el volumen comercial total entre ambos países alcanzó aproximadamente los US$56.600 millones, convirtiendo a Estados Unidos en el tercer mayor socio comercial de Taiwan, sólo después de China continental y Japón. “Los intercambios económicos y comerciales entre ambos países son generalmente un indicador de su relación bilateral en general. A pesar de los cambios en las condiciones económicas mundiales, Estados Unidos continúa siendo un inversionista significativo en Taiwan y una fuente de conocimientos sobre tecnología de alta calidad”, dice Jieh, agregando que Estados Unidos es también un importante destino para los estudiantes taiwaneses que optan por seguir estudios avanzados en el exterior.
El viceministro de Economía de la RDCh, Cho Shih-chao, tercero desde la izquierda, dirigió la delegación de Taiwan en los diálogos de TIFA realizados este año.
No obstante, después de la sexta ronda de los diálogos de TIFA que se realizaron en Washington, D. C. en 2007, las reuniones se suspendieron en gran medida debido a que las reglamentaciones sobre seguridad alimentaria de Taiwan prohibieron las importaciones de productos de carne vacuna de Estados Unidos que contienen ractopamina, un aditivo para piensos que aumentan la masa muscular del ganado vacuno. En julio del año pasado, el Yuan Legislativo aprobó las revisiones a la Ley de Sanidad Alimentaria, por lo tanto autorizando al Gobierno a establecer “la tolerancia permisible” de ese tipo de aditivos en productos de carne. El Departamento de Salud implementó subsecuentemente una norma que permite una mínima cantidad de residuos de ractopamina en la carne vacuna importada. La nueva norma abrió las puertas a más importaciones de carne vacuna estadounidense y eliminó el mayor obstáculo para los futuros diálogos de TIFA. “Nuestro gobierno ha hecho su postura clara y mostró na fuerte determinación para reanudar las conversaciones, que son esenciales para el desarrollo integral de las relaciones Taiwan-Estados Unidos”, dice Jieh.
Los principales temas en las reuniones de TIFA de este año incluyeron la agricultura, la economía digital, los derechos de propiedad intelectual, los fármacos y aparatos médicos, así como la cooperación económica regional y multilateral. “Aunque ambos lados tienen su propia postura respecto a los temas, las reuniones de TIFA les permiten intercambiar opiniones, estrechar las brechas y mejorar el entendimiento mutuo”, explica Jieh.
Un importante resultado de la reunión de este año fue la emisión de una declaración conjunta sobre los principios relacionados al comercio para los servicios de tecnología informática y de comunicaciones (ICT, siglas en inglés). La declaración fue similar a aquélla que Estados Unidos ha publicado en cooperación con la Unión Europea y Japón. Como Taiwan y Estados Unidos son ambos importantes jugadores en el mercado de ICT en el mundo, el establecimiento y la consolidación de los principios tales como los que regulan las redes abiertas y el uso de espectro ayudarán posiblemente a fomentar la competitividad de ambos países. Taiwan y Estados Unidos también acordaron formar nuevos grupos de trabajo de TIFA para tratar los asuntos relacionados con las inversiones y las barreras técnicas para realizar comercio. Comentando sobre los nuevos grupos de trabajo, Chang Pen-tsao, presidente de la Cámara General de Comercio de la RDCh, dice que son un gran paso hacia adelante para las negociaciones comerciales extranjeras de Taiwan.
Sin embargo, continúan habiendo algunas áreas de desacuerdo y se necesitarán más negociaciones. Por ejemplo, en el área de exportación de carnes de Estados Unidos, los negociadores de ese país expresaron la esperanza de que las normas de seguridad alimentaria de Taiwan estuviesen en línea con los estándares internacionales, mientras que Taiwan insistía en asuntos tales como los residuos de aditivos para piensos encontrados en los productos de otras carnes aparte de la de vacuno.
La puesta en marcha de una reglamentación en 2012 en cuanto a los residuos de aditivos para piensos en los productos de carne vacuna importada, eliminó el mayor obstáculo para los subsiguientes diálogos de TIFA.
Marantis dijo que la reanudación de los diálogos de TIFA entre Taiwan y Estados Unidos fue significativa porque representa una nueva etapa en la relación económica bilateral, al tiempo que el resultado positivo de la reunión fue un testamento de la liberalización de la economía de Taiwan y sus lazos más profundos con los socios mundiales. Jieh dice que la dirección de la política exterior bajo la administración del presidente de la RDCh, Ma Ying-jeou, ha desempeñado una función crucial en el fomento de lazos más sólidos entre Taiwan y Estados Unidos. “La política diplomática flexible y pragmática de nuestro Gobierno ha cambiado nuestro rol de ser percibido por otros países como una causa potencial de conflictos internacionales al de un promotor activo del orden internacional”, dice Jieh.
Cho señala que como el 11º mayor socio comercial de Estados Unidos, Taiwan puede hacer mucho para promover la integración bilateral y multilateral. Jieh también tiene altas expectativas. “La reanudación de los diálogos de TIFA podría considerarse un paso importante hacia un posible acuerdo de libre comercio entre Taiwan y Estados Unidos”, señala. “Además, como ambos lados son miembros de la Cooperación Económica del Asia y el Pacífico y de la Organización Mundial de Comercio (OMC), pueden cooperar y apoyarse entre sí en esos marcos internacionales”.
Crucial para el desarrollo
Taiwan considera la membresía en esas organizaciones comerciales regionales e internacionales, como crucial para el desarrollo económico continuo. En una reunión con Marantis y la delegación estadounidense en el Palacio Presidencial en Taipei, Ma dijo que el Gobierno está trabajando hacia la meta de unirse al Acuerdo Estratégico Trans-Pacífico de Asociación Económica (TPP, siglas en inglés), y la Asociación Económica Regional Abarcadora (RCEP, siglas en inglés), dos bloques propuestos de libre comercio que incluirían a muchas de las economías más grandes del mundo.
Jieh indica que la economía de Taiwan experimentó una considerable reestructuración y liberalización del mercado cuando el país accedió a la OMC en 2002. “Eso significa que nuestro punto de inicio para la mayor liberalización no es demasiado desfavorable”, dice, aludiendo al continuo esfuerzo de Taiwan para participar en los marcos económicos tales como la RCEP y el TPP. “Si trabajamos apropiada y adecuadamente, podremos estar más cerca de la meta que es lograr la participación.