Un consejo para los fabricantes de maletas o diseñadores de bolsos que desean tener éxito en el mercado de Taiwan: incluir por lo menos un bolsillo para colocar teléfonos celulares. El índice de penetración de los teléfonos celulares en Taiwan se elevó a más de un tercio para alcanzar el 96,6 por ciento —el más alto en Asia y posiblemente en el mundo— en los últimos tres años desde 1999 hasta finales de 2001, según la Dirección General de Telecomunicaciones (DGT, siglas en inglés) de Taiwan, una agencia subordinada del Ministerio de Transporte y Comunicaciones. Otras fuentes han señalado que el índice supera el 130 por ciento de la población entre dieciséis y sesenta años, ya que mucha gente recibe teléfonos adicionales como obsequios o premios, o prefieren tener una segunda línea por diferentes motivos.
En consecuencia, las atareadísimas ondas de radio están contribuyendo a la creación de un nuevo estilo de vida. Los jóvenes exhiben los nuevos y más modernos teléfonos, llevándolos colgados en el cuello como un accesorio de moda. En las oficinas, los diálogos durante los recesos giran con frecuencia alrededor de las funciones y estilos de los últimos teléfonos celulares, y en el sistema de tránsito rápido de Taipei, operar teléfonos celulares está prohibido en el primer y último vagón a fin de ofrecer un refugio a aquéllos que deseen escapar del bullicio de los otros pasajeros. Durante el pasado Año Nuevo Chino en febrero, el envío por correo de tarjetas de felicitación bajó dramáticamente porque mucha gente prefirió enviar mensajes de texto corto vía teléfonos celulares, ocasionando un récord de servicio que alcanzó los cuatro millones de mensajes al día.
Además de la rápida aceptación de la nueva tecnología por parte de la gente en Taiwan, otro factor que ha conducido al alto uso de teléfonos celulares es la relativamente pequeña extensión geográfica de la isla. Debido al compacto tamaño, para las compañías de teléfonos celulares es más barato y fácil construir suficientes estaciones base para telefonía celular con el fin de lograr mayor cobertura en comparación con países que poseen una extensión territorial mayor.
Hace apenas algunos años, los teléfonos móviles eran todavía un lujo que la mayoría de la gente en Taiwan no podía darse. Se introdujeron por primera vez en 1989 mediante la DGT —que era anteriormente el monopolio nacional de telecomunicaciones y la autoridad competente para regular la industria— los teléfonos celulares se vendían inicialmente como equipos opcionales para automóviles lujosos. Un análogo portátil de gran tamaño o teléfono de automovil que se vendía en esa época por más de NT$100.000 (US$3.788), una pequeña fortuna en comparación con los precios actuales. Pero aún con los precios altos, la demanda por el instrumento de comunicación inalámbrica siguió ascendiendo de manera continua, y la DGT se vio obligada a seguir expandiendo su capacidad de sistema móvil. Aún, la inconveniencia del sistema análogo disponible entonces y el alto costo de las mejoras a los equipos sirvieron para limitar la escala de la expansión de mercado.
En 1996, la promulgación de la Ley de Telecomunicaciones puso fin al doble papel de la DGT como jugador y árbitro. El estatuto otorgó a la DGT sólo el papel de regulador y transfirió sus operaciones comerciales a la recién establecida Chunghwa Telecom Co. La compañía operaba como una empresa estatal independiente (el proceso de conversión en una corporación privada está aún en marcha), dotada con las ventajas de la familiaridad de mercado y una enorme base de clientes. Pero el privilegio de mantener todo el mercado de telecomunicaciones para sí misma no le duró mucho tiempo. En diciembre de 1997, por primera vez, los operadores privados locales y a nivel nacional fueron autorizados para competir por la clientela de los teléfonos celulares.
“Para Chunghwa Telecom fue difícil tomar medidas frente a la competencia, porque todavía estaba unida a la burocracia gubernamental”, dice Yue Chin-yi, presidente del Grupo Comercial de Larga Distancia y Telefonía Móvil de Chunghwa. “Hasta hoy, por ejemplo, Chunghwa todavía tiene que cumplir las rigurosas estipulaciones consagradas en la ley de aprovisionamiento del Gobierno, que aminora nuestra flexibilidad administrativa y obstaculiza nuestras acciones. Hemos tenido que pasar por muchos ajustes internos para tratar de adaptarnos al nuevo orden de mercado”. Sin embargo, el esfuerzo valió la pena porque la liberalización del mercado ocurrió en un momento de rápidos avances en la tecnología inalámbrica que contribuyó a la prosperidad de las oportunidades comerciales. “La introducción de los operadores privados en el mercado provocó una demanda de mercado explosiva que había estado latente durante algunos años”, dice Roger Tseng, gerente de Mobihome Co., una compañía de comercio electrónico que se concentra en productos inalámbricos y digitales.
Los nuevos operadores privados crearon una política de subscripción que conjuga la compra de un teléfono con un contrato de servicio. “Este fue un paso importante que redujo el precio en gran medida, haciendo que los teléfonos celulares se volvieran más accesibles para el público”, señala Yue Chin-yi. El sistema usado más ampliamente, entonces —y todavía— es llamado Sistema General para Comunicaciones Móviles (GSM, siglas en inglés), que lleva el tráfico de voz en las frecuencias de 900 MHz y 1800 MHz. El número de estaciones base de celular se multiplicó muy rápido tanto en las áreas metropolitanas como en el interior del país, y los operadores de teléfonos móviles iniciaron intensas campañas publicitarias en la TV, ofreciendo servicios de comunicación confiables y de alta calidad. Dentro del año siguiente a la apertura del mercado, el número de usuarios de teléfonos celulares se elevó de 1,4 a 4,7 millones de personas.
Sin embargo, en proporción al total de la población de 23 millones, ese volumen sólo representa el 21,6 por ciento. Una razón del bajo índice de penetración en el mercado podría ser las tarifas bastante altas, típicamente una cuota mínima mensual de NT$600 (US$22,64). Igualmente, noticias sobre la supuesta radiación que emanaba de algunos teléfonos celulares desanimó a algunos usuarios potenciales. Por lo general, la mayoría de ellos solían utilizarlos por razones de trabajo —en ocupaciones que requieren un gran nivel de movilidad. Pero en ese punto el mercado comenzó a cambiar más rápidamente de lo que se esperaba. La competencia comenzó a ofrecer precios más bajos e introdujo planes de tarifas más flexibles, mientras que los avances tecnológicos incrementaron la popularidad de la comunicación inalámbrica tanto en Taiwan como en el resto del mundo. En 1999, el número de subscriptores en Taiwan fue el doble del año anterior y la industria de teléfonos celulares generó ingresos de NT$106.000 millones (US$3.300 millones), un 40 por ciento del mercado de telecomunicaciones doméstico en conjunto.
Según las últimas estadísticas de la DGT, el número de subscriptores de teléfonos celulares excedió los 22 millones a finales de 2001. Ahora, la mayoría de la gente en Taiwan parece ver los teléfonos celulares como una necesidad absoluta —algo que debe acompañarlos a donde quiera que van. Este mercado vibrante está dominado por cuatro operadores de teléfonos celulares a nivel nacional: Chunghwa Telecom, Taiwan Cellular Corp., Far EasTone Telecommunications, y KG Telecommunications, con las tres primeras controlando alrededor del 80 por ciento del total de ingresos. Debido a las restricciones legales actuales —que se espera sean liberalizadas en un futuro cercano— la inversión extranjera directa en una compañía de telecomunicaciones es limitada al 20 por ciento de su capital. Entre los principales inversionistas extranjeros están GTE PCS International y AT&T Wireless (ambos estadounidenses) en Taiwan Cellular y Far EasTone, respectivamente, y Bell Canada en KG Telecom.
“Cuatro operadores en un mercado de 23 millones de personas pueden mantener una competencia razonablemente intensa, apropiada para la supervivencia de las empresas de teléfonos celulares”, dice William Newton, vicepresidente de Taiwan Cellular, que compite con Chunghwa Telecom por el liderazgo en el mercado. “Observar el mercado ahora en términos de índice de penetración es una perspectiva pasada de moda. Hemos tenido éxito colocando un teléfono en la mano de casi cada individuo. Ahora estamos comenzando algo nuevo —encontrar modos creativos de asegurar que cada persona use su teléfono celular al máximo”.
Ese próximo paso se divide en dos aspectos. Uno es promover aún más el uso de teléfonos móviles para comunicaciones de voz, reemplazando gradualmente las líneas fijas como el canal principal para conversar por teléfono. Hacia ese objetivo, los operadores han estado tratando de crear ofertas de precio más atractivas, incluyendo varios tipos de descuento. El segundo método es pasar al próximo ciclo de producto, o sea el de “servicios de información por demanda”. Estos abarcan lo que la industria llama servicios de valor agregado (VAS, siglas en inglés), tales como nuevas tecnologías, por ejemplo, 3G (sistemas de tercera generación) y Servicios de Radio de Paquete General (GPRS, siglas en inglés). VAS incluye un número de plataformas que ya están en uso: Servicio de mensajes cortos (SMS, siglas en inglés), Respuesta de Voz Interactiva (IVR, siglas en inglés), Sistema de Mensaje de Voz (VMS, siglas en inglés), tecnología de acceso a Internet, tales como Protocolo de Aplicación Inalámbrica (WAP, siglas en inglés), y servidores, específicamente dirigidos a ofrecer acceso a correo electrónico.
En vista del rápido aumento en el índice de penetración de los teléfonos móviles, Taiwan se encuentra a la vanguardia de la industria a nivel mundial. “Los principales asuntos que enfrenta Taiwan son los de la industria global porque Taiwan se ha desarrollado al punto de encontrarse en el tope del liderazgo”, dice Newton. “Cualquier desarrollo nuevo que ocurra en Taiwan va a ser reproducido en otros lugares”. Los grupos de chat móvil, que funcionan como servicio para conocer amigos, y al mismo tiempo, servicio de Internet móvil en idioma chino, son ejemplos de innovaciones introducidas en Taiwan que están atrayendo la atención en otros lugares, especialmente en China.
Yue Chin-yi, de Chunghwa Telecom, agrega que los nuevos servicios tienen un gran potencial. Mientras que VAS constituye actualmente menos del 2 por ciento de los ingresos de la compañía, él considera su futuro desarrollo como muy importante debido a la continua integración de los teléfonos celulares con otros aspectos de la tecnología inalámbrica —por ejemplo Internet, PDAs, e incluso las cámaras digitales. Se espera que WAP también crezca rápidamente porque ahora puede construirse sobre la plataforma de GPRS, permitiendo que la información sea transmitida en piezas a través de circuitos compartidos para aumentar la velocidad y el volumen del tráfico.
Asimismo, los operadores domésticos de teléfonos celulares están trabajando con las compañías y organizaciones pertinentes, tales como suministradores de contenido, suministradores de servicios de Internet, y el semigubernamental Instituto para la Industria de la Información, para crear una plataforma VAS que sería compartida por todos en el mercado para mayor eficacia en la transmisión de datos. Un ejemplo de cómo esta medida podría vitalizar el comercio se observa en la conversión de las plataformas de mensajes cortos individuales de los operadores en un servicio integrado en noviembre de 2000. En el año y medio siguientes, según Yue Chin-yi, el uso de SMS ha experimentado un incremento de diez veces. Además, la DGT proyecta emitir cinco licencias 3G para mantener Taiwan en línea con las tendencias futuras. Incrementando la velocidad de la transmisión de datos en dos megabytes por segundo, 3G tiene como objetivo convertir los teléfonos celulares y las computadoras portátiles en artículos de alta velocidad para acceder a la red. En una subasta realizada por DGT en febrero, seis compañías compitieron por cinco licencias, y cuatro de las ofertas excedían los NT$10.000 millones (US$286 millones). Como todavía no es seguro qué tan pronto entrará en operaciones la tecnología 3G, tres compañías han comenzado a ofrecer servicios interinos en el sistema GPRS —apodado 2,5G porque sirve como un medio de transición entre GSM, que se define como la segunda generación, y 3G.
Aunque a los consumidores de Taiwan les llama la atención las posibilidades de la “vida móvil”, los distribuidores de teléfonos celulares están sintiendo cada vez más pesimismo. El declive del comercio actual es quizás algo inevitable después de la prosperidad explosiva de los años anteriores. La sobreproducción mundial de teléfonos celulares en 2000 condujo a un inventario global de más de 100 millones de unidades, causando que muchos distribuidores recurrieran a drásticas reducciones de precios. Pero aún en esas épocas difíciles, los comerciantes en Taiwan pudieron superar a sus contrapartes en otros países debido a la vitalidad del mercado doméstico. Los distribuidores están ahora resignándose a la noción de que sus mejores días han quedado atrás, y que la mayor porción de sus ventas en el futuro tendrán que venir del mercado de reemplazo. Por lo menos la mitad de los usuarios de teléfonos celulares de Taiwan tiende a reemplazar sus teléfonos en un promedio de cada seis meses, lo que contribuyó en gran medida a las ventas domésticas aproximadas de 4,5 millones de teléfonos celulares el año pasado.
Según Mobihome, el 40 por ciento de los consumidores que compran un teléfono nuevo para reemplazar el anterior, lo hacen para aprovechar las ventajas de un paquete de tarifas más conveniente por el servicio de teléfono, mientras que el 23 por ciento es atraído por los estilos y funciones de los nuevos modelos. Los consumidores “vanguardistas” que con gran entusiasmo adquieren todas las últimas innovaciones, van a encontrarse pronto un poco confundidos. Las pantallas a color ya están en el mercado diseñadas para pavimentar el camino de la próxima tendencia de servicio de información mejorado. Algunos servicios relacionados con 3G, tales como Servicio de Mensaje de Multimedios, podrían también ser introducidos antes del propio sistema 3G. Y los operadores de teléfonos móviles están aún tratando agresivamente de hallar maneras adicionales para añadir aspectos atractivos a su servicio. Pero es seguro que la gente de Taiwan dependerá cada vez más de esos pequeños aparatos de comunicación, en más y más aspectos de su vida diaria.