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Preguntó entonces a Ninfa del Mar: "¿De quién eres hija? ¿En dónde vives? ¿Por qué vienes todos los días a cantar aquí? A lo que ella respondió: "Mi nombre es Ninfa del Mar. Vivo en el pueblo de Po-lo al pie de la montañl.a de la oreja del caballo. Ando en búsqueda de la llave de oro que me permita abrir la puerta al agua del lago del ganso salvaje para ayudarle a la gente que sufre por la sequía". La tercera hija del dragón le dijo compasiva: "La llave de oro está en la tesorería del rey, mi padre y la está guardando una gran águila. El águila matará a cualquiera, excepto al mismo rey, que se atreva a entrar en la tesorería. Sólo cuando el rey abandona el palacio -dijo- existe alguna posibilidad de entrar en la tesorería" . Por fin un día, cuando el rey dragón había salido, la tercera hija condujo a Ninfa del Mar dentro del palacio. Turnándose, empezaron a cantar canciones delante de la tesorería. Al principio, la vieja águila estaba dormida y no prestó atención a los cantares. Pero pronto despertó e impresionada por la música, abrió sus alas y fue a ver quién estaba cantando. En aquel momento Ninfa del Mar penetró rápidamente en la tesorería y se dispuso a buscar la llave dorada. En la tesorería sus ojos quedaron deslumbrados. La habitación estaba llena de oro, plata y piedras preciosas. Sólo con que hubiese tomado una de las joyas, hubiera sido rica para toda la vida. Pero sólo pensaba en la llave y no se preocupó del oro, la plata y las riquezas. Buscó rápidamente por todas partes, sin encontrar la llave. Entonces, en su premura, tropezó con una gran caja de madera. Cuando la caja cayó al suelo, se abrió con un golpe y de ella salió una resplandeciente llave de oro. La muchacha tomó la llave y abandonó a toda prisa la tesorería. Cuando Ninfa del Mar salió. la hija del rey dragón dejó de cantar y las dos salieron al lago del ganso salvaje. Cuando las bellas canciones cesaron, la vieja águila regresó a su sitio acostumbrado y se quedó de nuevo dormida. Ninfa del Mar cogió la llave de oro y golpeó tres veces en la puerta. Esta se abrió, saliendo el agua. En cosa de minutos todos los canales del pueblo de Po-lo quedaron inundados de agua. Cuando la hija del rey dragón vio que la avalancha de agua iba a destruir toda la cosecha, dijo rápidamente:"Ninfa del Mar, Ninfa del Mar, la cosecha va a ser arrasada por el agua". Ninfa del Mar miró hacia atrás y se asustó. Entonces detuvo el agua con unas cortinas de paja. ¿Quién iba a pensar que unas cortinas de paja serían tan fuertes como para que el agua sólo goteara a través de las rendijas, después de haber desapa recido la puerta de piedra? Las cortinas todavía están allí ,pero con el tiempo se han convertido en cortinas de piedra. Cuando regresó el rey dragón, se dio cuenta que la llave había desaparecido y supo que su tercera hija había permitido que la robaran. Desterró a su hija del palacio y ésta se fue a vivir a la tierra de los mortales con Ninfa del Mar y pasaban todo el día cantando juntas. Más tarde, en su honor, las mujeres de todos los pueblos de alrededor empezaron a reunirse todos los años para cantar bellas canciones en el vigésimo segundo día de la séptima luna: día de la tercera hija del rey dragón. (c) Miraguano Ediciones Hermosila 104. 28009 Madrid