Al abrir sus puertas, más de 700 aficionados a la marca estaban listos para apoderarse de las ropas más actuales. Algunos de ellos, como Huang Yu-ting, quien tenía el día libre, arribaron a medianoche para asegurarse los primeros lugares en la fila. Mostrando su tarjeta con el número uno impreso, Huang reveló que su meta era apoderarse de una chaqueta rellena con plumas de ganso, y que su presupuesto para ese día era unos 170 dólares estadounidenses.
La inauguración del principal establecimiento de Uniqlo en Taiwan coincidió con la reapertura de la Tienda por Departamentos Mingyao, que había estado siendo renovada por siete meses. Con paredes recubiertas con brillante iluminación de diodos emisores de luz y ventanas francesas en el segundo y tercer piso, la renovación de este icónico centro comercial brinda aún mayor esplendor al área de compras en el este de la ciudad.
“Hay una gran diferencia entre el antes y después”, señala Oreo Lin, tercero en la fila para entrar al renovado edificio, añadiendo que la nueva tienda tiene una “imagen más juvenil y de moda”.
Destacando la importancia de la inauguración de esta tienda en Taiwan, Tadashi Yanai y Kousaka Takeshi, fundador y gerente ejecutivo de Uniqlo, respectivamente, asistieron a la ceremonia de inauguración. En ella, agradecieron al público por su asistencia, manifestando su beneplácito por el éxito de la apertura, y prometiendo que brindarán servicio de alta categoría a sus clientes en agradecimiento por su apoyo.
La respuesta del consumidor taiwanés fue más que positiva. Más de siete mil consumidores ingresaron a la tienda el primer día. La ropa casual Uniqlo, reconocida por su alta calidad y precios bajos, es muy popular entre los jóvenes consumidores taiwaneses.
Por ello, no deben sorprender los ambiciosos planes de expansión revelados por Tadashi y Kousaka, que incluyen la apertura de unas 30 sucursales, aumentando a unas cien tiendas en toda la isla.
En realidad, la compañía estaba algo dudosa de ingresar al mercado de la isla. Fue tras el éxito de su primer sucursal en Taipei, dentro de la Tienda por Departamentos Hankyu, en el distrito de Xinyi, que se dieron cuenta del sorprendente poder adquisitivo del pueblo taiwanés.
No obstante, Uniqlo no es la única empresa que desea aprovechar esta ventaja. La corporación H&M se ubica en lo que era antiguamente el Centro Comercial New York New York, en el distrito de Xinyi. A pocos pasos de ahí, se encuentra la Tienda por Departamentos Uni Hankyu, apoyada por la magna corporación local Uni President. Estas hipertiendas de una sóla marca expanden las opciones de consumo para los taiwaneses.
El mayor rival extranjero que se perfila en el horizonte de Uniqlo es Zara, la famosa marca española. Zara, junto con Gap, de Estados Unidos; H&M de Dinamarca; y Uniqlo, conforman los cuatro vendedores de ropa a precios módicos más grandes en el mundo. Tres de ellos —a excepción de Gap— han hecho grandes inversiones recientemente en Taiwan, con grandes tiendas y un empuje publicitario, a fin de afianzar su posición en este mercado.
La característica más destacada de Zara es que su moda viene inspirada directamente de lo más reciente en las pasarelas y envía nuevos modelos a sus tiendas dos veces por semana. Su dueño, Amancio Ortega, es uno de los hombres más ricos de España. Ortega anunció recientemente que tiene planes para expandir su negocio abriendo unas cien tiendas solamente en China continental. En cuanto a Taiwan, dos tiendas ya han abierto en Taipei; una de ellas, de 1.487 metros cuadrados, en el icónico rascacielos Taipei 101, y la otra en la popular calle Zhongxiao Este, para empezar, con otras próximas a abrirse al público.
Ambas empresas, Zara y Uniqlo, han anunciado que seguirán sus planes de expansión con una fuerte presencia en las cercanías de la Estación Central de Taipei. Este centro vital de transporte es también considerado meca de las compras y un verdadero baluarte en esta competencia por el favor de los consumidores taiwaneses.
La apertura de estas cadenas internacionales en la isla con tal fuerte presencia denota un cambio en las ventas al detal. Conforme Taiwan fue expandiendo su desarrollo en las décadas posteriores a la Segunda Guerra Mundial, las ventas al detal se configuraron en una mezcla de mercados tradicionales y unas pocas tiendas por departamentos.
Con la expansión económica en los años ochenta, se vino la explosión de tiendas de conveniencia, supermercados e hipermercados. Los centros comerciales y tiendas de una sola marca no habían tenido tanto apogeo como en otros países, siendo la apertura de tiendas tan grandes como las que han montado Zara y Uniqlo síntoma de una revolución en comportamientos de consumo y estrategias de mercadeo, lo cual augura un buen horizonte económico con sus múltiples oportunidades, especialmente viendo la apertura a los vendedores al detal internacionales como un voto de confianza en el futuro.
Sin embargo, estas grandes tiendas también enfrentan el gran reto de la competencia por Internet, al igual que sus homólogas establecidas por más tiempo en el Occidente. No obstante, esta opción es mucho más favorecida por el consumidor taiwanés. Una encuesta reciente llevada a cabo por el Buró de Empleo y Entrenamiento Vocacional reveló que más del 50 por ciento de los trabajadores de cuello blanco en Taiwan prefiere hacer sus compras por Internet. De dichas adquisiciones, la ropa, los libros y los aparatos de alta tecnología siguen siendo los más populares.
La conveniencia de no tener que dejar su hogar para ir de compras y poder recibir sus compras por envíos a la casa son las principales razones por las cuales los trabajadores —de hecho, un 13,17 por ciento de los que respondieron a la encuesta— prefieren este método de compras.
Otras razones citadas incluyen la libertad para comprar a cualquier hora —11,39 por ciento— y la opción de realizar compras en grupo en la oficina —11,39 por ciento—, según la encuesta.
El Buró señala que los oficinistas ocupados ahorran tiempo y energía cuando compran en Internet porque pueden analizar los productos a su gusto antes de hacer sus pedidos y no están limitados en cuanto a un sólo sitio de compras. Asimismo, se descubrió que los trabajadores de cuello blanco gastan un promedio de 34 dólares estadounidenses en sus adquisiciones por Internet.
Queda por ver, pues, si los consumidores seguirán prefiriendo comprar artículos de moda casual en tiendas exclusivas a pesar de las largas colas, y si las magnas tiendas continuarán cautivando al público con sus estilizadas y elegantes decoraciones, servicio personalizado y la satisfacción del disfrute de la adquisición de ropa internacional al instante.
Texto recopilado por Silvia Villalobos