Taiwán Hoy
Ambiciones propias
01/01/1996
Foto de Ku Chin-tang
Aventajar a la gente de casa: El centro da prioridad a las exhibiciones de los artistas de Ilan. También fomenta el acceso a la comunidad a través de su revista y sus programas de voluntarios.
Cuando el Centro Cultural del Distrito de Ilan fue inaugurado en 1984, disponía simplemente de una biblioteca y un edificio de tres pisos con salas que podían reservarse para exhibiciones, espectáculos, o reuniones. Al igual que otros centros, no era más que un edificio grande y vacío. Pero, durante los once años siguientes, el centro ha experimentado una gran transformación y actualmente es una fuente de información, muy respetada y ampliamente consultada, sobre la historia y la cultura local.
El Museo Histórico del Centro del Distrito de Ilan contiene una extensa colección de documentos y artefactos, provenientes de los archivos del gobierno local y las donaciones públicas, además del material obtenido de la propia investigación. The Ilan Journal of History, una publicación bimestral del centro y distribuída a unos dos mil lectores , detalla los proyectos de investigación sobre historia local que se llevan a cabo en el museo y en la Academia Sínica, el principal instituto de investigaciones de Taiwan. El año antepasado, la revista ganó el Premio Trípode Dorado que el gobierno le otorgó por la excelencia de sus publicaciones.
La biblioteca atrajo a más de 350 prestamistas de libros por semana en 1994, incluyendo a muchos estudiantes locales de secundaria básica y bachillerato. Muchos chicos participaron en las clases de arte y los campamentos de verano organizados por la biblioteca, así como en las dos obras de teatro que se presentan cada año en el pequeño escenario adjunto. Las sesiones de narrar cuentos que se realizan tres veces a la semana en la biblioteca también atraen cerca de cuarenta niños semanalmente.
Otro de los objetivos principales del centro es revivir las artes tradicionales. La sala de exhibiciones muestra caligrafías y pinturas de artistas locales, de igual modo, el centro es sede de media docena de grupos teatrales incluyendo una compañía de música tradicional, un elenco teatral de niños y un coro infantil, así como un grupo de teatro moderno. Sin embargo, el centro quizás sea mejor conocido por fomentar la ópera taiwanesa, una de las formas indígenas de arte más antiguas de la isla. El Museo Teatral de Taiwan, ubicado también en el centro, ofrece exhibiciones permanentes sobre esta forma dramática y, otros tipos de artes dramáticas locales, asímismo, el centro es la sede del Grupo de Opera Taiwanesa Lanyang.
Una de las razones del éxito del centro en el desarrollo de sus recursos y en la atracción de la participación del público es la existencia de un fuerte orgullo local entre los 464.000 residentes del Distrito de Ilan. Este distrito es uno de los más aislados de Taiwan, limita con las montañas por el norte, el oeste y el sur, y con el Océano Pacífico por el este. Aunque la sede del distrito, la Ciudad de Ilan, está solamente a 120 kilómetros al sureste de Taipei, llegar allí toma un mínimo de dos horas y media porque gran parte del camino está a lo largo de una parte peligrosa de la Cordillera Central. Por generaciones, la región ha desarrollado una cultura distinta que incluye una larga tradición de logros literarios y artísticos. Ilan también se conoce bastante por su activismo político. En 1987, sus residentes obtuvieron fama por el lanzamiento de una intensa protesta que duró cuatro años en contra de la construcción de un importante complejo petroquímico en dicho distrito y finalmente detuvieron su construcción.
El Centro Cultural de Ilan ha volcado este espíritu de orgullo local en el entusiasmo por sus actividades. En el museo de historia del distrito, por ejemplo, los veinte miembros de personal que reciben salarios han expandido sus archivos y exhibiciones permanentes para crear el museo de historia regional más grande de la isla. A partir de 1992, un año antes de que el museo fuese inaugurado oficialmente, el personal recolectó 100.000 documentos del gobierno local y 80.000 páginas de manuscritos y recortes de periódicos sobre la historia del distrito desde la época de la ocupación japonesa (1895-1945) hasta hoy. El museo colecciona documentos del gobierno de distrito, trabajos investigativos y tesis universitarias, información de archivos y artefactos del público. El museo también ha contratado a tres estudiantes universitarios para que ayuden a recolectar datos publicados en japonés, y ha comisionado a algunos representantes para que compren libros sobre la historia de Taiwan en Japón.
El personal del museo realiza también su propia investigación. Uno de los proyectos más grandes ha sido recolectar historias orales. Desde 1993, los empleados y voluntarios han visitado los pueblos del Distrito de Ilan para invitar a los ancianos a reuniones para discutir sus vivencias, historias familiares, costumbres locales y leyendas, el servicio militar, y el sistema educativo local. El centro cultural publica las transcripciones en el The Ilan Journal of History y las cintas originales se guardan en los archivos.
Chou Chia-an, Director del museo y profesor de historia en el Instituto de Bachillerato Fuhsing en la Ciudad de Ilan desde los años setenta, dice que el centro hace énfasis en la historia local porque hay muy poca infomación sobre este tema. "Me interesé en buscar materiales sobre Ilan porque sé un poco sobre la historia de Taiwan, pero era totalmente ignorante sobre la historia de Ilan, mi hogar durante treinta años".
Chou considera el actual trabajo del museo como un segundo intento de preservar la historia del Distrito de Ilan. El primero se hizo durante los años cincuenta, cuando el gobierno estableció una serie de comisiones para investigar la historia alrededor de la isla. Pero a comienzos de los años setenta, el gobierno abandonó sus esfuerzos por promover la investigación histórica, las comisiones se disolvieron o fueron despojadas de responsabilidad. "Miles de artefactos y documentos se perdieron porque los empleados públicos responsables no eran historiadores" ,dice Chou. "Esto fue una tragedia. Nunca podremos recuperar estas pérdidas". Por ejemplo, él señala la falta de información sobre la ciudad original de Ilan, que fue construida en 1812. En 1910, el gobierno japonés demolió la ciudad para reconstruirla. "No tenemos fotografías ni dibujos, y no hemos encontrado a nadie que haya visto directamente la ciudad original", dice Chou. "Todo lo que sabemos, según los archivos del gobierno, es que existió".
En sus dos años de operaciones, el museo ha ganado el respeto de los historiadores. Uno de ellos es Wu Yung-hua, que usó información proveniente del museo para escribir el libro Una investigación de la histórica Vía Suhua, esta obra se concentra en la construcción y uso de la principal vía de comunicación que unió a la Ciudad de Ilan a la ciudad porteña de Hualien desde 1894 hasta 1925. Wu dice que no había progresado mucho en su investigación debido a la falta de datos históricos hasta que el personal del centro le ayudó a encontrar materiales y a contactar ancianos que pudieron facilitarle directamente información sobre esa ruta. Wu pudo terminar su investigación y publicar el libro el año antepasado.
El valor del museo también ha sido reconocido por el gobierno provincial de Taiwan. En agosto pasado, el Departamento de Asuntos Civiles decidió que los veinte centros culturales de la isla tienen que establecer museos históricos regionales similares. Chou Chia-an está muy complacido con la decisión. "Nuestros esfuerzos durante los últimos tres años han valido la pena", dice él.
Otro de los éxitos del centro ha sido su trabajo por revivir las artes locales, especialmente la ópera taiwanesa. "Ilan es la cuna de la ópera taiwanesa", explica Chen Wen-han, Director administrativo y Director musical del Grupo de Opera Taiwanesa Lanyang que tiene su sede en el centro cultural. A mediados del Siglo XV, chin ko, un estilo de canto caracterizado por sus melodías simples y pegajosas, cantadas en el dialecto fukienés, fue introducido a Taiwan por los inmigrantes continentales de la provincia de Fukien. Finalmente, los residentes de Ilan comenzaron a adaptar las baladas locales al estilo chin ko, y con el pasar del tiempo, los cantantes empezaron a reforzar estas baladas a través de la escenificación dramática que incorporaba elementos de la ópera de Pekín. A principios de este siglo, un estilo de actuación distinto había evolucionado, y la ópera taiwanesa había nacido.
Estas óperas reinaron como el entretenimiento en vivo más popular de Taiwan entre los años veinte y cincuenta, con quinientos grupos actuando regularmente a finales de los años cuarenta. Pero durante los años sesenta y setenta, la ópera taiwanesa perdió mucho público en forma continua. El primer motivo fue la introducción de las películas en el dialecto taiwanés a mediados de los años cincuenta. El segundo fue la novedad de la televisión. Irónicamente, los programas televisados de ópera taiwanesa causaron un impacto devastador en esta forma dramática; porque las audiencias podían ahora disfrutar a los mejores grupos de ópera desde sus hogares, de modo que se perdió el interés por los espectáculos en vivo. En 1967, sólo treinta grupos de ópera taiwanesa seguían actuando con regularidad.
Durante los años ochenta, un problema diferente afectó la ópera taiwanesa. Algunos de los grupos que habían sobrevivido comenzaron a presentar cantantes populares o estriptistas durante o después de los espectáculos con el fin de atraer más público. Como resultado, la ópera taiwanesa empezó a adquirir la reputación de ser una forma vulgar de entretenimiento. Un refrán popular ilustra la baja estima general que tenía entre el público: La frase, "Ud. canta ópera taiwanesa", significa "Ud. no dice más que tonterías".
El primer objetivo del centro cultural fue restaurar la imagen de la ópera taiwanesa. El Museo Teatral de Taiwan, se inauguró en 1990, y ha dedicado su área principal de exposiciones a las exhibiciones murales, videos, y grabaciones de esta forma de arte. Incluso el centro cultural ha hecho que los visitantes puedan disfrutar de la ópera taiwanesa en vivo. En 1993, Yu Shyi-kun, Alcalde del Distrito de Ilan, invitó a Yu Yuan-keng, director de teatro experimental que trabajaba en Taipei, a trasladarse a la ciudad de Ilan para que ayudara a revitalizar las artes de la actuación a nivel local. Yu Yuan-keng estuvo de acuerdo en ir, siempre y cuando recibiera el respaldo necesario para fundar un grupo de ópera taiwanesa. Para su sorpresa, el Alcalde le otorgó lo pedido, y así nació el Grupo de Opera Taiwanesa Lanyang.
El grupo fue llamado así por la Llanura Lanyang del Distrito de Ilan. La compañía presenta casi cincuenta espectáculos por año, tanto en el centro como en otros lugares alrededor de la isla, y atrae aproximadamente a mil quinientos espectadores en cada presentación. El Día de la Madre pasado, asistieron ocho mil personas a la presentación de La Comedia Matrimonial, una nueva ópera escrita por uno de los miembros del grupo, que se exhibió en el Parque Atlético de la ciudad de Ilan. En el mes de octubre, la compañía hizo una gira por Singapur, su primera presentación en el extranjero, y el próximo verano planea actuar en Canadá y los Estados Unidos.
Yu Yuan-keng acredita el éxito de esta compañía de teatro a su alto nivel. "Nos presentamos bien", dice él. "la calidad de nuestra actuación es alta, y nuestros actores y actrices tienen una buena imagen pública". Pero él añade que esta reputación no ha sido fácil de reconstruir dado el decaimiento general de la ópera taiwanesa en las últimas décadas. "El prejuicio del público en contra de la ópera taiwanesa fue el mayor obstáculo en nuestros esfuerzos para reclutar talentos", dice él. Inicialmente, sólo diez músicos y actores se unieron a la compañía. Pero hoy, el grupo tiene más de treinta miembros. Yu dice que tanto los actores como los espectadores han aprendido a respetar esta compañía. El Director administrativo, Chen Wen-han explica, "Nosotros le mostramos a la gente lo que es en realidad la ópera taiwanesa, lo hermosa que es".
Para atraer más público, el grupo ha alterado los estilos de actuación tradicional para ir a la par con los gustos modernos. "Por ejemplo, el frecuente tono agudo de la música de la ópera taiwanesa tradicional puede cansar los oídos de los espectadores modernos", dice YU. "Por este motivo, hemos modificado la música para reducir el número de tonos agudos". Además, Yu ha cambiado algunos elementos de actuación que se han vuelto comunes y que los espectadores modernos tienden a considerar predecibles y fastidiosos. Por ejemplo, muchas óperas incluyen virtualmente el mismo acompañamiento musical durante los giros imprevistos de la trama, y muchos siguen el mismo patrón de que los nuevos personajes se introduzcan a sí mismos con una larga narración explicativa después de su primera aparición en el escenario.
La compañía también ha modificado las tramas y argumentos de sus óperas, o ha creado nuevas obras basadas en temas modernos. "Cuando se piensa en la manera de modernizar el teatro tradicional, la mayoría de la gente presta atención solamente a los elementos físicos tales como incorporar diseños del estilo occidental e iluminación de alta tecnología a los escenarios", dice Yu. "Pero, lo más importante para mí es que la producción narre una historia con la que la gente moderna se identifique. Para mí no tiene ningún sentido dirigir producciones tradicionales que no reflejan los problemas que preocupan a las audiencias modernas". Ahora, Lanyang está planeando presentar una ópera adoptando elementos de la obra de Bertolt Brecht, La buena mujer de Setzuan, de 1943.
La compañía está también trabajando en la manera de cómo atraer audiencias más jóvenes. Al igual que otros grupos de ópera taiwanesa, Lanyang atrae principalmente multitudes de ciudadanos de la tercera edad que ya están retirados. Sin embargo, el grupo tiene varias estrategias en mente. Una es producir videos con la música y las letras de las canciones de las óperas taiwanesas, que la gente pueda alquilar para cantar karaoke. Otra es establecer grupos de ópera de aficionados para niños y adultos.
Los esfuerzos del Grupo de Opera Taiwanesa Lanyang para lograr que la ópera sea relevante y atractiva para el público moderno va a la par con la misión general del Centro Cultural del Distrito de Ilan. El Director del centro, Lin Te-fu, enfatiza que el propósito de esta institución no es solamente preservar el pasado, sino también enriquecer la cultura contemporánea de Ilan. "Todas las civilizaciones crecen o declinan", dice él. "Cualquier civilización que se niega a la modernización está destinada a desaparecer, pero también es verdad que la desaparición de una civilización es una pérdida para la raza humana. Cuando tratamos de preservar los elementos de la cultura local, la ópera taiwanesa es un ejemplo, en realidad lo que intentamos hacer es integrarlos a la vida moderna" . ■