Taiwán Hoy
TESOROS NACIONALES
01/07/1986
La "porcelana china", como su nombre lo indica, tuvo su origen en la antigua China y la calidad de esta "porcelana dura" ha impresionado fuertemente al mundo exterior. Sin embargo, los logros de los ceramistas chinos en la cerámica "suave" han sido también considerables.
Los archivos de la cerámica vidriada "de tres colores" de China, un tipo de porcelana suave, remontan el origen de esta técnica especial a la dinastía Han (206 a.C.-220 d.C.) Las piezas de tres colores de la dinastía Tang (618-907 d.C.) fueron especialmente admiradas, habiéndosele dado su propio nombre: Tang San Tsai (los tres colores de Tang).
Aunque los colores verde, amarillo y café constituyen los tres principales vidriados para la cerámica de baja temperatura, realmente están implicados en ella más de tres colores; idiomáticamente en chino, "tres" indica generalmente "muchos".
La producción posterior de cerámica de tres colores (Sung San Tsai, Liao San Tsai, etc.) surgió en línea continua en las dinastías Ming y Ching, cuando la cerámica Chiao Chih Tao obtuvo especial fama en la provincia de Kuangtung (Chiao Chih es un pequeño pueblo de dicha provincia).
Muchos hábiles constructores de templos y diestros artesanos en cerámica se concentraron en Chiao Chih y debido a que Taiwan se encuentra precisamente al otro lado del Estrecho, de las áreas de Fukien y Kuangtung, los artesanos de la isla se vieron influenciados profundamente por los artesanos del continente y como Taiwan no contaba con maestros en la construcción de templos durante sus primeros días, tuvieron que contratar artesanos del continente.
Muy probablemente la cerámica resultante Chiao Chih Tao de Taiwan nunca hubiese llegado a ser tan altamente apreciada, a no ser por Yeh Wang (o Yeh Lin-chih), ceramista que nació a principios del siglo XIX, en Chiayi, al occidente de Taiwan.
Durante el reinado del emperador Tao Kuang (1821-1850) de la dinastía Ching, se contrató a tres hábiles maestros constructores de la provincia de Kuantung, para construir templos en Taiwan. El mayor de ellos -identificado por algunos como Liu Kou-shih- cuando se dirigía a construir el edificio de la Asociación de Kuangtung-Kuanghsi en Tainan, se encontró con el nino Yeh Lin-chih, que se encontraba pastoreando en el campo.
El niño se encontraba moldeando figuras de barro y modelando con paja, personajes de la ópera china. Según cuentan, Liu le habló y le pareció ser muy animado y simpático. Posteriormente el maestro obtuvo permiso de sus padres, para llevarse con él al muchacho de regreso a Kuangtung, como aprendiz, luego de terminar la construcción del templo en Tainan.
Durante su aprendizaje en Kuangtung, Yeh aprendió todas las habilidades de Liu en cuanto a construcción y decoración de templos, llegando incluso a su perarlo. Al regresar a Taiwan, Yeh se convirtió en el mejor constructor de templos en toda Taiwan. (Al sur de Chiayi, la mayoría de decoraciones de los templos, como paisajes, estatuas, flores y pájaros, fueron hechas por él).
Debido a que sus hornos eran sencillos y pequeños -no mayores de medio metro- Yeh tenía que quemar las piezas más grandes por partes y puesto que sus hornos eran de carbón, la temperatura no llegaban más allá de los 800oC, por lo que la "dureza" de su cerámica era relativamente suave.
Yeh no usaba moldes para fabricar cerámica Chiao Chih Tao, todas sus piezas eran hechas a mano, con la ayuda de un sencillo peine de bambú, teniendo la característica de ser muy vivas.
Dentro de las leyendas relativas a sus grandes habilidades artísticas, se cuenta lo siguiente:
Cuando Yeh Wang fue invitado para hacer la estatua de un caballo/Dios para el templo de Chenghuang (el Templo del Dios de la ciudad), en Chiayi, en frente del templo estaba trotando un cabal1o, el que Yeh usó como modelo para su caballo/Dios.
Para el desvelamiento de la nueva estatua, al concluir los ritos, repentinamente, ante el asombro de todos, el caballo embistió hacia el templo, golpeándose contra las paredes, hasta morir. Se dice que el alma del caballo se unió a la estatua, apareciéndose a veces.
Después de la guerra Sino-Japonesa de 1894, Taiwan se convirtió en una colonia japonesa durante medio siglo. Durante dicho período, las autoridades gubernamentales japonesas enviaron las obras de Yeh para su exhibición póstuma en la Feria Mundial de París, Francia. La cerámica Chiao Chih Tao de Yeh tuvo un gran impacto, siendo elogiada como una muestra "de la consumada habilidad artística de Taiwan".
En el libro Chiao Chih Tao de Chiayi escrito por Chang Li Te-he, que está agotado, Yeh Wang es descrito como una persona de "disposición arrogante y de naturaleza taciturna y excéntrico. Moldeaba sus figuras de acuerdo a su estado de ánimo. No creaba sus obras al azar, ni sometía su habilidad artística ante la autoridad o ante la riqueza. La menor crítica, podría hacerle desdeñar un empleo".
Yeh fue pobre toda su vida y nunca tuvo un aprendiz normal. Esa es la razón por la que se presumía que los gloriosos logros de la cerámica Chiao Chih Tao de Taiwan, se habían perdido aquí durante más de un siglo.
Por otra parte, Liu Ming-wu, es también otro ceramista de gran renombre.
A la edad de 14 años, al terminar la escuela elemental, era aprendiz de Lin Wen-hsien, el mejor constructor de templos de Taiwan de ese entonces y aprendió escultura de Teng-chuang, hijo de Lin.
Los siguientes 19 años de su vida los pasó construyendo templos, llegando a ser experto en las ocho destrezas principales: diseño de templos, ejecución de ingeniería, chien nien (un proceso decorativo con vidrio de colores), escultura en madera, pintura al óleo, escultura en piedra y composición de nichos para templos budistas.
En 1976 Liu participó en una competencia de diseño de templos de todas las provincias, siendo considerado en el primer lugar. Desde entonces, se le ha tenido como uno de los principales maestros constructores de templos en Taiwan.
Incluso desde su infancia, Liu se interesó por la pintura y la cerámica. Durante su carrera de construcción de templos, se especializó en pulir sus habilidades en las esculturas de barro. Sin embargo, con mucha frecuencia se desesperaba porque no podía lograr los espléndidos vidriados de la cerámica Chiao Chih Tao de Yeh Wang.
Por casualidad, se enteró por algunos comerciantes de antigüedades, que las prescripciones de la cerámica Chiao Chih Tao no estaban realmente perdidas, como solía creerse, por lo que recibió esta noticia con intensa emoción.
Los materiales del vidriado de la cerámica Chiao Chih Tao son muy variados; el procedimiento de mezcla es bastante complicado y el único que lo conocía era Lin, que se había convertido al cristianismo y había dejado de construir templos y esculpir figuras religiosas. Durante los siguientes 40 años, efectuó investigaciones acerca de las fórmulas del vidriado, desarrollándolas en tres "juegos" y medio, o sea que los ocho colores básicos originales se expandieron a más de 70; pudiendo mezclarse casi cualquier grado de color.
Cuando Liu Ming-wu le pidió a Lin que le enseñara las fórmulas del vidriado de la cerámica Chiao Chih Tao, Lin rehusó cortesmente su petición. Cuatro años más tarde, cuando Liu se convirtió también al cristianismo y abandonó su carrera de constructor de templos, Lin consintió en enseñarle las fórmulas de la mezcla del vidriado.
Desde entonces, Liu se ha dedicado a la producción de cerámica. Sus obras principales consisten en héroes tradicionales, legendarias figuras y diferentes dioses y diosas (en su mayoría, para decoración de interiores).
"Las figuras tradicionales 'son realmente lo más difícil', trascendiendo al campo de la escultura -expresó Liu puesto que uno debe conocer los antecedentes de cada pieza antes de comenzar a trabajar en ella. Aunque no recibí más que educación elemental, estoy muy familiarizado con casi todas las importantes novelas chinas, a lo que puede atribuirse la inspiración de los 19 años que he pasado construyendo templos. Un verdadero y competente diseñador de templos debe aprender la cultura china además de aprender las diferentes habilidades".
En su casa, en la ciudad de Hualien, se refirió a su vida como "un medio aislado" y luego procedió a mostrar sus habilidades para moldear barro. En 40 minutos, le dio forma a una mujer general de los tiempos antiguos, de 30 cms. de altura, con todas las piezas separadas: botas, pies, escudo, cincho, pañuelo, casco, etc. El torso y los cuatro miembros fueron vaciados por dentro. Posteriormente unió las piezas separadas con el mismo barro licuificado, usando una aguja hecha de bambú para los detalles decorativos, como las cejas. La vívida expresión y delicadeza de la obra fueron realmente impresionantes.
El secamiento de sus figuras moldeadas lo hacía al aire libre, bajo la sombra, aproximadamente dos semanas antes de la primera horneada; después de aplicar los vidriados, los introduce nuevamente al horno para la segunda horneada... y sus piezas de la cerámica Chiao Chih Tao vívidas y llenas de color están terminadas.
Liu rehusa el término "imitaciones de antigüedades" en relación a sus obras. Antes que todo, nunca ha visto ni conocido exactamente cómo se hacía la cerámica Chiao Chih Tao -dijo- agregando: "Por naturaleza, no me gusta la imitación. Aún en cuanto a mis propias obras, nunca existen dos exactamente iguales. Cuando mucho, a algunas podría describírseles como 'de acabado antiguo' o sea de estilo antiguo; sin embargo, aún los vidriados acabados son hechos mediante mis propias fórmulas".
Liu ha expandido las "áreas de temas" de la cerámica Chiao Chih Tao. En septiembre del año pasado, el Museo Provincial de Taiwan patrocinó su quinta exposición, presentando su nueva serie: "La escuela del dragón".
"He pensado mucho acerca del rumbo contemporáneo de la creación artística china. En mi opinión, muchas de nuestros artes modernas están demasiado occidentalizadas. En la actualidad quizás sólo la pintura y la caligrafía china podrían considerárseles realmente como artes modernas chinas, aunque muy pocos artistas modernos puedan superar los logros de sus antepasados en dichas áreas. ¿Cómo pueden los artistas modernos crear formas artísticas tanto 'chinas' como 'contemporáneas'? La presentación de 'La escuela del dragón' es un experimento, siendo resultado de largos años de meditación." Liu escogió el término descriptivo de "dragón", puesto que es un símbolo de China y está considerado por los chinos como el animal más propicio.
Oda a Chao-chun es la obra típica de la nueva Escuela de Dragón Wang Chao-chun, una dama de la corte real del emperador Yuan de la dinastía Han, fue presentada al jefe de la tribu bárbara Hun, en un acto tradicional de "diplomacia matrimonial".
Oda a Chao-chun es una mezcla de figuras/realistas con el simbolismo. Un caballo alado con la cabeza y el torso de Chao-chun, mientras ella se voltea a ver por última vez a Changan, capital de la dinastía Han; sus manos sostienen la pipa (un instrumento de cuerda). Dos colinas, separadas por la Gran Muralla (debajo de las patas del caballo), simbolizan los dos países. Las pezuñas del caballo están divididas, un mal presagio (porque Chao-chun murió finalmente en el exilo).
Liu declaró que todo esto constituye solamente el punto de partida. Muchos están observando muy de cerca hacia dónde habrá de dirigirse. □