Taiwan Today

"... Levantando las cejas y dando taconazos, el pequeño jinete galopa dando un grito, un latigazo o sosteniendo fuertemente otra arma en la mano, desfila para su compañera de juego, a quien admira y de quien recibe también admiración." Ching mei chu ma (ciruelos verdes y caballo de palo), cuatro caracteres usados con mucha frecuencia en el idioma chino, representan una manera muy especial de describir el cariño inocente entre un niño y una niña. En ellos, podemos ver reflejada nuestra propia infancia. Un niño, se cree un valiente soldado, al cabalgar sobre un caballo de palo -si tiene suerte, tendrá una cabeza en un extremo y en el otro, una rueda. Levantando las cejas y dando taconazos, el pequeño jinete galopa dando un grito, un latigazo o sosteniendo fuertemente otra arma en la mano, desfila para su compañera de juego, a quien admira y de quien recibe también admiración. Sin embargo, Aldous Lin, gerente de ventas de la Compañía de Porcelana Ching Hwa y fundador de la Compañía de Porcelana Lin. tuvo algo más que esto en mente cuando produjo "Montando un caballo de palo," dentro de los últimos artículos exhibidos en el salón de Porcelanas Lin de figuras chinas en porcelana. El énfasis está puesto más en el comercio que en el afecto; no obstante, con un toque de este último. Lin está intentando ampliar los mercados y la apreciación por la industria de porcelana de Taiwan. Durante los últimos 15 años, con mucha frecuencia, los compradores extranjeros han catalogado a los fabricantes de escultura en porcelana de Taiwan como puros imitadores "procesadores fantasmas." Las severas limitaciones en la innovación del diseño y las capacidades de promoción, añadidas a otras dificultades, han impedido el intento de acumular una participación activa en el mercado mundial. La manufactura de porcelana pareció estar reducida a la reproducción de modelos ya viejos. Sin embargo, Lin, logró obtener tanto fama como fortuna en dicha industria. Es un hombre enérgico, con gran sentido común; nunca consideró sus trabajos como objetos de elogio; todos son producidos para ser pedidos y exportados por firmas extranjeras. Cada vez que recibe un pedido de un cliente extranjero, se pregunta: "¿Seguiré produciendo para satisfacer los gustos de los demás por el resto de mi vida?" Después de un largo e inseguro período, Lin encontró gradualmente su propia respuesta: una combinación inspirada por una exhibición de antiguas figuras de barro del Museo Provincial de Taiwan... y las abundantes fantasías de los pasatiempos infantiles tradicionalmente chinos. Ahora, después de dos años de hacer experimentos y exploraciones, los esfuerzos de Lin están proyectados en la porcelana -una serie de adorables niños orientales involucrados en el encanto de las actividades descritas en el tradicional floklore y la leyenda china, la mayoría de las cuales aún están de moda. La primera de ellas, "Los seis juegos infantiles", representa a seis niños concentrados en su juego, de aproximadamente 5½ pulgadas de alto: Los Cohetes Luminosos, está relacionado con Nien, un monstruo devastador del antiguo folklore chino. Para alejar a Nien, cada Año Nuevo, el pueblo chino quema muchos cohetes. En tiempos más recientes, lo tradicional es recibir simplemente el Año Nuevo sin tanto ruido. Los Trompos, se dice que originalmente, fueron un pasatiempo de las cortesanas de la Dinastía Sun. Llamado chien chien en chino, el juego empezó haciendo uso de discos de metal con clavos de hierro. A finales de la Dinastía Ming, el juego se volvió enormemente popular entre los niños. El Juego de Cincos, fue uno de los favoritos en la China antigua. Los niños, al principio, usaban piedras de colores brillantes, finamente pulidas hasta formar "pequeñas" bolas. Para entonces, los cincos de vidrio eran muy caros. El Juego de la Espada, involucra las imitaciones infantiles del guerrero legendario Kuan Yu y su espada mágica, Kuan Tao (Espada Verde de Dragón). La espada era famosa por su tamaño y gran poder en cualquiera de las 36 formas que tenía de blandirse. Jalando la Carreta, es un juego relacionado con el viaje de los Emperadores y sus escoltas cuando iban a inspeccionar la antigua China. Los niños gozan jugando a hacer el papel de escolta. El Caballo de Palo, popular entre los niños chinos y de todo el mundo, también persiste en los tiempos modernos. Una nueva serie de "Kung Fu", presenta a tres niños y tres niñas, representados en pedestales de bellas formas, presentando gestos de las artes marciales. Parado en un pie (el llamado king chi tu li) fue la producción más difícil, debido a que involucra las técnicas de horneado más delicadas y complicadas. "No le temo a la imitación que otras personas puedan hacer," dijo Lin sonriendo. "Las delicadas exigencias técnicas que esto implica, frustrarán automáticamente a los que lo intenten." La serie "Festivales" -aún por completarse- está basada en las innumerables actividades infantiles de los tradicionales feriados chinos. La tradicional Pepita de Oro (presentando el sobre rojo de regalo) y El Juego de los Dardos, en la víspera del Año Nuevo, son los temas principales de esta serie. Luego están la presentación de las linternas (Festival de las Linternas), comiendo pasteles de luna (Festival de Medio Otoño) y muchos otros. Una serie de "Las Cuatro Campanas de las Cuatro Estaciones", representa a cuatro niños sentados encima de pedestales bellamente decorados con flores, con otros símbolos apropiados de las estaciones en sus manos. Lin considera su serie de curiosidades como "platos chino-americanos" con sabor occidental; son comidas chinas modificadas, diseñadas especialmente para deleitar el gusto del extranjero. La Compañía de Porcelana Lin ha asignado agentes en Estados Unidos, Alemania Occidental y Canadá para promover las nuevas líneas, realizando esfuerzos para obtener una participación en el mercado mundial para sus propias marcas. Los "recuerdos" de alta calidad están dirigidos al mercado en masa más que a coleccionistas, lo cual reconoce Lin que es un experimento arriesgado. Sin embargo, considera que va por buen camino. Hace treinta años, un fabricante local de floreros de barro, Ching Hwa, se incorporó a los proveedores internacionales de figuras de porcelana de alta calidad. Está bajo discusión una posible cooperación conjunta con un importante proveedor internacional en Alemania Occidental. Situado en Kung Kuan, municipio de Miaoli, uno de los tres centros industriales de cerámica de la isla, Ching Hwa cuenta con una instalación de 6.611 metros cuadrados. Un zoológico en miniatura atrae inmediatamente la atención de los compradores. Las boas salvajes, monos, osos, mangostas, linces, aves y faisanes dorados se encuentran sentados, en cuclillas, encaramados o rondando ociosamente dentro de las jaulas, quizás en silenciosa protesta por su encarcelamiento, mientras una fuente cercana rodeada por arboledas verdes canta una canción de la naturaleza. "Las figuras de animales que presentamos hace algunos años, nos estimularon para crear este zoológico," dijo Lin. Dentro de la fábrica, pueden en­ contrarse por todas partes canastas plásticas en colores azul y amarillo, las cuales transportan y almacenan los productos de las distintas líneas de producción. El proceso total involucra siete etapas: desarrollo del prototipo, hechura del molde plástico, fundición combinada, vidriado, horneado, pintura y empaque. Más de 250 trabajadores, mujeres en su mayoría, trabajan en dicho lugar. Lou Feng-chu, de diez y nueve años estudiante de una escuela nocturna, quien trabaja en la sección de vidriado, concentra su atención en el detalle de corrección de los miembros de una figura, el cual es un paso necesario antes de unirlo al resto del cuerpo. "He estado trabajando aquí por dos años. Es un trabajo fácil y lo puedo hacer con rapidez," expresó. Pintar figuras de porcelana es el reto más grande; es un trabajo manual que debe hacerse con mucha destreza y no apresuradamente. "Este proceso contradice la tendencia actual de automatización; cada color debe aplicarse por separado. Es una línea de producción que exige una extrema y concentrada labor; un gran porcentaje es hecho a mano, por lo que nuestra calidad está garantizada," enfatiza Lin. Al mismo tiempo, muestra una figura de 3 pulgadas, diciendo que sus pintores más experimentados se encargan de los delicados detalles faciales mientras los otros hacen el trabajo de las otras partes: ropa, pelo, zapatos, etc. Wang Shu-hen, una trabajadora que ha estado trabajando allí por lo menos desde hace un año, dice que la pintura requiere una vista muy acuciosa, siendo ese precisamente su trabajo. A esto sigue el cuidadoso proceso de parte del estricto control de calidad Ching Hwa. Todos los productos terminados que no pasan el examen final, son destrozados en fragmentos para proteger no sólo los derechos del comprador, sino para mantener la buena reputación y prestigio de la fábrica. Lin Pei-ling, presidente de Ching Hwa agregó: "Enfrentando la gran competencia de mano de obra más barata de otros países asiáticos, la mejora en cuanto a técnicas y la calidad es la clave del éxito en la desleal competencia que implica este tipo de negocio." Mirando hacia el futuro, Aldous Lin dedica mucho tiempo al desarrollo de una serie de grotescas estatuillas clásicas de animales, inspiradas en las antigüedades exhibidas en el Museo Nacional de Palacio de Taipei. □