El Yuan Legislativo aprobó en tercera lectura la enmienda a la ley relacionada con las medidas de castigo en las Fuerzas Armadas, en un esfuerzo por proteger mejor los derechos humanos en el campo militar de la República de China.
La enmendada Ley de Castigos de las Fuerzas Armadas ha eliminado la sanción mediante “entrenamiento de reforma”, así como la reeducación y confinamiento. También reduce el número máximo de días que pueden recibir los oficiales y tropas como penitencia, de 30 días a 15 días.
También especifica que la “reducción de rango” y la “degradación” son los tipos de castigos que pueden ser impuestos a oficiales; mientras que el “dar de baja”, la “reducción de rango” y las “medidas disciplinarias” pueden ser aplicadas a los suboficiales; a la vez que la “reducción de salario” es la pena a imponer a los soldados.
La recién añadida sanción de “reducción de rango” evitará el delito y la negligencia en el cumplimiento del deber ya que si le bajan el rango a un oficial, su pensión también se verá reducida, señaló el Ministerio de Defensa Nacional.
Las revisiones a la citada Ley fueron presentadas tras la muerte del soldado conscripto Hung Chung-chiu, de 24 años de edad, ocurrida el 4 de julio de 2013, cuando sufrió un ataque cardíaco tras ser forzado a realizar agotadores ejercicios en un sitio de confinamiento, donde en primer lugar no debió estar.
La muerte de Hung hizo cuestionar las violaciones de los derechos humanos en el campo militar y causó protestas masivas en Taiwan. Varios oficiales de las Fuerzas Armadas fueron acusados y trajo como consecuencia importantes reformas legales, incluyendo la abolición de las cortes militares.