Durante muchos años, las principales librerías univer sitarias de Taipeise encontraban todas ubicadas en la primera sección de la Avenida Chungking Sur. Tanto los profesores como los alumnos que vivían en otras partes de la isla sabían que si no podían encontrar el libro que querían en una librería local, podrían encargarlo en alguno de los establecimientos de esta calle, que se dirige hacia el sur desde la Estación Ferroviaria de Taipei. Hoy, el área sigue disfrutando de fama inigualable entre los amantes de los libros en Taiwan. Sin embargo, Taipei tiene ahora otro importante centro para los bibliófilos, aproximadamente a un milla de distancia del primero; más y más libreros están abriendo sucursales a lolargo de las avenidas Hsinsheng Sur y Roosevelt, que atraviesan el centro académico de la ciudad.
Esta zona goza de reputación desde hace mucho tiempo por sus universidades y otros centros culturales. La Universidad Nacional de Taiwan(UNT) y la Universidad Nacional Normal de Taiwan (UNNT) ocupan grandes extenciones de terreno en esa área, y la Escuela Nacional de Magisterio de Taipei y el Instituto Nacional de Tecnología de Taiwan no quedan muy lejos. El alza de los alquileres obliga a muchos estudiantes a viviren los suburbios, y todos los días el transporte urbano lleva amiles de usuarios a esta reducida área. Además, muchos profesores universitarios viven en esta zona, en hospedajes subsidiados, así como ellos y sus predecesores lo han hecho durante más de treinta años, por lo que no es de extrañar que muchos de los vecinos del área muestren una pronunciada inclinación intelectual,convirtiéndola en una zona prolífica para el comercio de libros.
Entre los libreros que aprovechan el «atractivo» de la zonase encuentran sucursales de cadenas famosas como Eslite, Kwang Toong,y Kingstone’s. En otras calles colindantes, también es posible encontrar distribuidores de libros de texto universitarios como Lai-laiy Yeh-yeh, así como los departamentos de ventas de las casas editoras asociadas a periódicos, tales como Linking, que está afiliada al United Daily News, y unas cuantas librerías especializadasque han sido establecidas recientemente.
Bookman Books ocupa actualmente dos pisos de un edificio de siete plantas frente al verde césped de la UNT, después de haber extendido su pequeño local anterior en un estrecho callejón en la transitada Avenida Roosevelt. Esta compañía es una de las principales abastecedoras de libros de texto para los estudiantes de inglés de las universidades locales, y también es el único agente para Taiwan y Corea del Sur de la famosa casa editora W.W. Norton &Co.
Al entrar en el departamento de ventas de la compañía, ubicado en el segundo piso, se podría pensar que se entra en una sucursal de Barnes & Noble o de Dillons, porque todos los libros expuestos, los CD-ROM, los vídeos y casetes para el aprendizaje del idioma son en inglés. Retratros de eminentes escritores ingleses o norteamericanos como Virginia Woolf y T.S. Eliot adornan las paredes y los estantes. Como los clientes principales de esta librería son estudiantes y profesores de inglés, casi todos los libros expuestos se relacionan de alguna manera a los campos de la literatura inglesa o el aprendizaje de dicho idioma.
La Librería de Taiwan se centra en la cultura de la isla, vende libros sobre la religión indígena, el folklore, la política y muchos otros temas.
Una amable vendedora se aproxima para ofrecer ayuda: «En nuestra tienda puede encontrar libros sobre las últimas teorías literarias y todos los clásicos de la literatura inglesa o norteamericana», dice. Bookman Books ha prosperado: antes era una librería que ocupaba aproximadamente 18 metros cuadrados, y ahora tiene alrededor de cuarenta empleados y tres sucursales en Taipei, Taichung y Kaohsiung, respectivamente. ¿Cuál ha sido el secreto de su éxito?¿Sabían que ellos desde el comienzo que el concepto de vender libros especializados a cierto grupo de clientes tendría éxito?
«Creo que las principales razones de nuestro éxito han sido tener una mente abierta para aprender los trucos del comercio, y nuestro compromiso», dice Jerome Su, el fundador de la tienda, quien aprendió a través de un proceso de prueba y error: «Cuando comenzamos en 1977, ni siquiera sabía contabilidad básica». El bautizo de fuego para Su se inició dos años después de graduarse en el Departamento de Literatura y Lenguas Extranjeras de la UNT. «Dos colegas y yo, tras fin alizar nuestro servicio militar obligatorio», recuerda, «pensábamos qué podíamos hacer. En ese momento, el mercado de libros de texto universitarios estaba acaparado por unos cuantos distribuidores que tenían el control total: establecían los precios y decidían qué libros publicar».
Por este motivo, a los estudiantes como Su y sus amigos les era difícil hallar los libros que les interesaban. «Recuerdo que cuando cursaba el segundo y el cuarto año, durante las clases, nuestros profesores mencionaban con frecuencia el libro Anatomía del criticismo de Northrop Frye», dice, «pero no podíamos encontrar el libro en ninguna de las librerías locales; fue entonces cuando dedicimos establecer nuestra propia compañía editora para imprimir los libros que considerábamos importantes».
Los dos primeros años fueron duros para la nueva empresa, que por llegar tarde a la competencia, tenía pocas posibilidades de contender con los distribuidores ya consolidados, particularmente porque muchos de ellos no eran melindrosos en cuanto a los derechos de autor y tenían pocos escrúpulos al piratear cualquier cosa que se les antojaba. Los socios de Su abandonaron el negocio, y él se vio obligado a buscar la ayuda de su familia e incluso de sus amigos. En ese entonces, él admite francamente que tuvo dudas. «Pero no podíadarme por vencido», dice, «sentí que era difícil predecir la supervivencia de la empresa basándose solamente en dos años en el negocio».
Su opina que el riesgo y la oportunidad son las dos caras de una misma moneda, y las crisis deben convertirse en el punto decisivo. Para su firma, en 1985, la promulgación de una ley de derechos de autor, nueva y severa; y la firma de un convenio bilateral sobre los derechos de autor entre Taiwan y EE.UU., fueron dos de esas crisis. «Las autoridades nos exigieron desechar todos los libros que teníamos almacenados que no cumplían con la nueva normativa», recuerda, «nos dieron un año de gracia. Muchos otros editores se deshicieron de sus libros almacenados y abandonaron el negocio, pero nosotros nos propusimos adaptarnos a la nueva reglamentación. Tuvimos que destruir miles de volúmenes que no pudimos vender antes del vencimiento del plazo, pero logramos convertir ese período de gracia de doce meses en nuestra mejor época de ventas. Los clientes se apresuraban a comprar las ediciones más viejas y más baratas, y así hicimos una fortuna».
Bookman Books invirtió el dinero en la adquisición de los derechos para publicar ediciones conforme a la nueva ley. Resultó que ésta nos confirió un beneficio a largo plazo que nadie había anticipado: la competencia se había vuelto menos dura.Como todos teníamos que jugar con las mismas reglas, los editores piratas, que anteriormente le quitaban gran parte de los clientes a los editores legítimos, desparecieron casi por completo. «Si decides enfrentarte a las dificultades, por lo menos tienes la oportunidad de sobre ponerte»,dice Su, «pero si te das por vencido, terminarás siendo un perdedor».
Ganar dinero no es el primer objetivo de la Librería de Taiwan, lo importante es ofrecer una extensa gama de artículos dedicados a aspectos culturales específicos.
Cerca de Bookman Books está la librería temática que lleva el extraño nombre Naturaleza y vida salvaje interesante. En Europa y EE.UU., las librerías dedicadas a servir las necesidades de los amantes de la naturaleza son populares desde hace algunos años, pero esta librería, establecida en 1991, fue la primera de su tipo en Taiwan.
El visitante que cruza las puertas de vidrio del establecimiento, se encuentra enseguida con una serie de anuncios, hojas informativas y panfletos emitidos por organizaciones tales como la Sociedad de Aves Silvestres deTaipei, la Sociedad de la Vida Silvestre, el Partido Verde de Taiwan, y la Sociedad para la Conservación de las Mariposas, todos acomodados en forma ordenada sobre pilas de ladrillos ahuecados. En este local pequeño, pero cómodo y agradable, los libros ocupan solamente la mitad del espacio; pero sin duda, los verdaderos amantes de la naturaleza a la búsqueda de un buen libro no se sienten desilusionados. Caminando alrededor de los estantes se pueden encontrar libros sobre aves, corales, peces, insectos,mamíferos, plantas y crustáceos. También hay varios libros importados en inglés con ilustraciones, y además la tienda vende una variedad de artículos adicio nales: discos compactos de «música ambiental», vídeos, calendarios con fotografías de animales y plantas, afiches de aves enmarcados, adornos para paredes y escritorios, y móviles de campanillas con diseños de aves, animales o insectos.
De hecho, esta librería parece más una tienda de regalos que una librería especializada. Otros objetos que tiene a la venta incluyen tazas con dibujos de animales, llaveros con forma de animales,tubos de cristal llenos de arena coloreada, y silbatos de reclamo. En una esquina se encuentran llamativos artículos de equipo para los aficionados a las aventuras al aire libre: morrales, abrigos acolchados y sacos dedormir.
Con un fondo musical de olas que van y vienen, Wu Tsun-hsien, el propietario de Naturaleza y vida salvaje interesante, conversa sobre su ambición de transformar su librería en un puente entre los residentes de la ciudad y la naturaleza. «Quiero que funcionemos como una estación repetidora para la educación ambiental y la conservación, para así ayudar a más personas a conocer las bellezas de la naturaleza y profundizar en su conocimiento», dice él.Wu es miembro de la Sociedad de Aves Silvestres de Taipei desde hace dieciséis años, y se siente dichoso de poder combinar el trabajo con sus intereses.
Como para Bookman Books, su período inicial también fue difícil. «Le dí tres meses», recuerda Wu, «si no hubiese logrado llegar al final de los dos primeros meses, habría cerrado la tienda». Con suerte, Naturaleza y vida salvaje interesante sobrevivió. Durante los últimos seis años la librería se ha mudado tres veces, pero nunca había salido de la zona hasta que se estableció en su dirección actual. Wu dice que esto se debió a que sus clientes principales eran todos miembros de sociedades de la naturaleza, o profesores y estudiantes de biología o ecología. «Pero desde que la tienda semudó a su ubicación actual, el tipo de clientes se ha expandido gradualmente», dice él; «ahora, incluso los estudiantes de primaria entran para comprar calcomanías o móviles de campanillas. Después, están los estudiantes de bachillerato en busca de libros sobre la naturaleza para la lectura recreativa, y las amas de casa que vienen a comprar libros para sus hijos, y de allí comienza a derivar su interés en la conservación».
Wu era miembro de la Sociedad de Aves Silvestres desde que estudiaba mecánica en la universidad. Durante su servicio militar, se ofreció como voluntario para que lo transfirieran a otra isla cercana, lo que no era muy popular entre los conscriptos, porque él quería observar especies de aves que eran raramente vistas en Taiwan. Después de terminar el servicio militar, su entusiasmo por la observación de aves continuó creciendo. Trabajó durante dos años en una fábrica procesadora de alimentos, pero después decidió «vivir su sueño» y abrió su librería. Con el pasar de los años, ha hecho amistad con muchas personas que comparten sus intereses, y ha ayudado a sus clientes a cultivar el interés en la vida al aire libre. «Una experiencia extraordinaria fue vera uno de mis clientes que era gerente en una compañía de computadoras, convertirse en un ejecutivo de la Sociedad de Aves Silvestres»,dice.
A poca distancia de Naturaleza y vida salvaje interesante, en la Avenida Hsinsheng Sur, está la Librería de Taiwan, que se centra en la cultura taiwanesa. Todo en esta librería tiene que ver con un aspecto cultural específico. Los visitantes pueden encontrar libros sobre las religiones indígenas de Taiwan, el folklore, las culturas fukienesa, hakka y aborígenes, la política local, y mucho más. También vende otra gama de artículos como marionetas, postales de artistas nativos, casetes de ópera taiwanesa, discos compactos de música indígena, vídeos de ritos de las tribus nativas, y mapas antiguos.
«Mi idea era imitar una `tienda de comestibles’ con el fin de satisfacer los diferentes gustos», dice Wu Cheng-san, propietario de la tienda; «aparte de la sección principal de libros, también quería un área para camisetas, una sección para discos compactos y vídeos, un anexo de artesanías, y por supuesto una cafetería. Asimismo, deseaba alejarme del concepto utilizado por la mayoría de las cadenas de librerías y crear una atmósfera totalmente humanitaria donde las ganancias no fueran lo más importante». Refieriéndose a una serie de publicaciones del Instituto de Etnología de la Academia Sínica y de la Comisión para la Investigación Histórica de la Provincia de Taiwan, dice: «Si el objetivo de nuestra tienda fuera solamente ganar dinero, no tendría sentido exhibir ese tipo de libros, ya que pueden fácilmente quedarse en los estantes durante tres o seis meses sin que nadie los compre».
Wu Cheng-san cursó estudios en la Universidad Columbia, tiene un doctorado en ciencias de la computación y ha enseñado en la Universidad Nacional Cheng Kung y en la UNNT. Abrió su librería hace cuatro años y medio y, en ese entonces, tomó la decisión de seguir adelante con su negocio, siempre y cuando no tuviera pérdidas,aunque no obtuviera ganancias. ¿Por qué hizo este dramático cambio a estas alturas de su vida? «Ver mi librería empezar de cero y transformarse en un negocio exitoso, me ha proporcionado mayor satisfacción que mi trabajo como profesor», dice Wu. Admite que cuando era estudiante en Columbia, en la década de los setenta, la variedad y la importancia de las manifestaciones estudiantiles tuvieron un gran impacto en él. De vuelta a Taiwan, quería importar algo de ese espíritu idealista y hacerlo parte de su propia vida, tratando de comprender qué era lo correcto y qué era lo que hacía falta. «Como mi librería era un lugar sin precedentes en Taiwan, preveíamos que podríamos sobrevivir», diceWu. Estaba en lo cierto: apenas un año después de la inauguración de la librería, pudo pagar el dinero que había tomado prestado de sus amigos y parientes.
«Al principio, nuestros clientes principales eran maestros de primaria, posgraduados, intelectuales, y en particular un grupo de amigos -que podríamos llamar disidentes- que apoyaban la democratización de Taiwan», recuerda, «después de que el Ministerio de Educación decidió experimentar con la enseñanza del fukienés, el hakka y otros dialectos aborígenes en ciertas escuelas primarias en 1995, nuestro estuche para el aprendizaje de dialectos se volvió un artículo de gran éxito». No obstante, el fin de la librería no es ganar dinero y como Wu siempre se ha encargado personalmente de todo, ahora se siente cansado: «estoy buscando a alguien que me reemplace», dice, «después de que me retire, quizás vaya a las comunidades tribales para trabajar como voluntario».
Su Chien-lingtiene una experiencia académica parecida a la de Wu Cheng-san, y aún enseña en una universidad. Ella es la propietaria de Fembooks, librería y casa editora. Durante los años setenta, mientras cursaban estudios en el extranjero, un grupo de amigas y ella frecuentaron librerías feministas en EE.UU., Canadá y Europ a. De regreso a Taiwan, en su tiempo libre, trataron de divulgar las ideas feministas. Hace tres años y medio, decidieron que Taiwan ya estaba listo para su primera librería feminista, y con la ayuda de un préstamo establecieron Fembooks. Recibieron gran influencia de la Fundación Despertar, establecida en 1993 como una organización no gubernamental, dedicada a la educación de las mujeres y que respalda el movimiento feminista. «Fembooks es básicamente una extensión de la Fundación Despertar, en términos de personal y principios», dice Su.
Fembooks publica dos revistas independientes: fembooks(con «f» minúscula) y la serie herstory. «Tratamos de presentar un punto de vista moderno de la mujer», dice Su, «por ejemplo, cuestionamos constantemente por qué la sociedad no divide la responsabilidad de criar a los niños entre el hombre y la mujer». Con esta librería, ella busca la manera de estimular a las mujeres a desarrollar su curiosidad intelectual a través de la lectura. «Esperamos que nuestros clientes tomen mayor conciencia y saquen fuerzas para crear su propio futuro», dice.
Fembooks tiene un grupo de clientes bastante bien definido. La mayoría de la gente que viene a nuestra librería está simplemente interesada en temas sobre los géneros o asuntos feministas, aunque algunos son profesores o estudiantes universitarios que investigan aspectos relacionados con las relaciones humanas; otros son miembros de asociaciones de madres. El 70 u 80 por ciento de nuestros clientes son mujeres, según Su: «Los clientes del sexo masculino tiendena ser estudiantes universitarios, posgraduados, y miembros de los círculos intelectuales y literarios que desean satisfacer su curiosidad».
El nombre de la librería ya es un indicio bastante claro para saber qué tipo de libros hay allí, pero en caso de que un posible cliente no esté bien seguro, los títulos de los volúmenes exhibidos en la entrada disiparán cualquier duda: Teoríasy escuelas del feminismo, Círculo de lesbianas de Taiwan, Abandonandoel hogar: discursos sobre el homosexualismo, y El rol de la nacióny de la mujer en la asistencia. A pocos pasos de allí se encuentra la serie herstory, que incluye títulos como Las opiniones de una mujer, la versión china de El despertar de Kate Chopin, y Una madre que rehusó seguir el modelo de la misma Su, que tiene como subtítulo, Reflexiones de una mujer como esposa y madre, seguido de una intrigante línea que reza: «Ella ama a sus hijos, pero el mundo exterior es tan atrayente...»
Fembooks también vende una amplia gama de libros que están conectados sólo indirectamente al feminismo de línea dura. Por ejemplo, Manu al de cirugía plástica segura puede encontrarse en la sección de salud mental y física, y Mujeres excursionistas felices en la sección de turismo. Los estantes de libros para niños contienen biografías de Madame Curiey Florence Nightingale, mientras que las secciones de derecho y política, religión y mujeres, tienen libros menos convencionales, entre éstos: Guía completa para la mujer sobre cómo escapar del hogar, que está dividida en tres partes: Separación de bienes de los cónyuges, Guía para el divorcio, y Cómo sobrevivir la violencia marital; y la colección Conceptos de la mujer en el budismo compuesta de cuatro volúmenes sobre la polémicare volucionaria contra el fatalismo de la mujer de Shih Chi-ching y ChenYeh.
También hay muchas traducciones de obras en inglés, tales como El informe Hite, El nuevo informe sobre sexo del Instituto Kinsey, Reviviendo a Ofelia de Mary Pipher y Se necesita una villa de Hillary Rodham Clinton. Los libros sobre el parto y la maternidad ocupansolamente una parte de un estante. Al lado de la caja registradora se halla una mezcla de camisetas, tazas con logos interesantes, tarjetas de felicitaciones que exhiben obras de Georgia O'Keeffe, discos compactos con canciones de estrellas femeninas, y casetes de conferencias dictadas por mujeres famosas. Ubicada convenientemente cerca de la sección de libros está una sala de conferencias que da cabida a unas veinte personas; ésta se arrienda a pequeños grupos o asociaciones de lectores.
En resumen, una divina selección de librerías: sin importar si el visitante simpatiza o no con los ideales de los geniales individuos que las crearon.