El 14 de febrero es el primer día del Año Nuevo Lunar, que según el zodíaco chino es el Año del Tigre de Metal.
El Año Nuevo Chino o Año Nuevo Lunar es la fiesta más importante del año, así como la más esperada por todos en Taiwan. La festividad que conmemora la culminación de un año y el comienzo de otro, toma matices coloridos y el entorno se colma de alegría y optimismo. Este año, el Año Nuevo Lunar se celebra el 14 de febrero con la llegada del Año del Tigre de Metal. Las festividades duran varios días consecutivos culminando el 28 de febrero con el Festival de los Faroles.
Es una época de mucho color y alborozo para las comunidades chinas alrededor del mundo, y por supuesto en Taiwan, donde la celebración se realiza en todo su esplendor y con el mayor entusiasmo.
Calle Ti Hua
La calle más concurrida en las vísperas de Año Nuevo de Taipei, la capital, es la Calle Ti Hua, que se encuentra en una zona céntrica. La calle bordeada de edificios antiguos, vestigios de la época colonial japonesa, aloja muchas tiendas de alimentos tradicionales durante todo el año, pero cuando se acerca el Año Nuevo Lunar, el lugar se torna en un gran bazar, parte de la calle se cierra para dar espacio a una gran cantidad de vendedores de golosinas, y otros productos tradicionales, que se consumen durante los días de fiesta del Año Nuevo Lunar.
“Los días antes de la llegada del Año Nuevo, la calle recibe multitudes de personas que vienen de todos los rincones de la isla a comprar los alimentos y enseres que consumirán durante el asueto de Año Nuevo. Es casi como una fiesta”, dice el dueño de un almacén mientras ordena sus escaparates.
Los dulces tradicionales, los frutos secos, exquisiteces locales e importadas como vieiras secas, hongos secos, huevas de lisa, etc, son particularmente buscadas por los clientes en los días de Año Nuevo. Las pilas de caramelos y confites son realmente espectaculares, y se ofrecen variedades diferentes de todos los sabores. En una breve caminata por la calle Ti Hua, se puede palpar el fervor y la exaltación de la gente, que se prepara para celebrar en grande el festival más esperado del año.
Costumbres inalterables
Hacer compras y abastecerse con alimentos y delicias para preparar la gran cena de la víspera de año nuevo es sólo una parte de las festividades. La celebración del Año Nuevo Lunar abarca muchas tradiciones que van acompañadas de algunas supersticiones.
El Año Nuevo Lunar se celebra con esplendor cada año. El 14 de febrero, las comunidades chinas de todo el mundo dieron la bienvenida al Año del Tigre.
Los días previos al Año Nuevo es de rigor hacer una limpieza general, donde se tira todo lo inservible tanto en la casa como el negocio, y con ello, se elimina también todo lo negativo, para recibir el año nuevo con nuevas energías y suerte. Por el contrario, en los primeros días del Año no se puede tirar la basura, con la creencia de que así se mantiene la buena fortuna que ha traído el nuevo año dentro de la vivienda. Se decoran las viviendas con figuras alegóricas, como por el ejemplo, el pez, que es una palabra homófona de “abundancia”, entre una serie de objetos; además a los lados de las puertas, se cuelgan afiches de color rojo con coplas de primavera que auguran prosperidad, abundancia y buena suerte.
En esta época el color rojo y el dorado predominan por doquier, coloreando los escaparates de las tiendas, las decoraciones de las puertas de negocios y casas. Las tiendas que se dedican a vender artículos de papelería o decoraciones para fiestas, y una gran cantidad de vendedores ambulantes en las aceras y los mercadillos nocturnos, sacan a la venta toda una gama de colorida mercancía con el tema del año nuevo. Es realmente una gran atracción, ver las decoraciones especiales, que cada año presentan innovaciones y toques de modernidad, manteniendo su esencia tradicional.
Los templos también se visten de gala y colocan adornos de color rojo para recibir a los fieles que acostumbran visitarlos para hacer sus ofrendas a los dioses el primer día del año
El punto culminante de las fiestas es la gran cena de la víspera de Año Nuevo Lunar, que es preparada con mucha dedicación y antelación por los miembros de la familia. Se trata de un gran banquete compuesto de exquisitos platillos tradicionales. Algunos platillos tienen significados que hacen alusión a la buena suerte y la prosperidad. Entre ellos cabe destacar el nien gao, o pastel de año hecho con arroz glutinoso, que puede comerse dulce o salado. Después de la suculenta cena, algunos familiares conversan mientras degustan confites y frutos secos y toman té, mientras que otros se dedican a jugar juegos tradicionales como el mahjong o los naipes.
Para los niños, la ocasión es muy especial porque después de la cena y antes de que culmine la noche, reciben los tan esperados hong bao, que son “sobre rojos” con dinero, que simbolizan los deseos de buena suerte y prosperidad. Estos también se suelen entregar a los padres y personas mayores como gesto de respeto y piedad filial.
El Año del Tigre
Conforme a la tradición milenaria, cada año corresponde a un animal del zodíaco chino que, según sus características pretende pronosticar la fortuna, y el futuro de las personas y su entorno. Los doce animales del horóscopo son: rata, buey, tigre, conejo, dragón, serpiente, caballo, cabra, mono, gallo, perro y cerdo. Este año es el Año del Tigre de Metal. Según la astrología china, el tigre es símbolo de poder, autoridad, generosidad y riqueza ganada con el esfuerzo del trabajo.
Se dice que será un año lleno de drama, intensidad y cambio. Un año de mucho movimiento y actividad, donde cada persona puede buscar oportunidades y sacar provecho de los talentos personales para alcanzar las metas que se proponga. Para los que van en busca de aventura, este año puede ser un año emocionante y gratificante. En general, el Año del Tigre augura prosperidad económica y muchas transformaciones positivas.