26/12/2024

Taiwan Today

Taiwán Hoy

Crecientes tensiones en la salud mental

01/07/1990
Hasta alrededor de 1984, cuando el Departamento de Sanidad estableció una Sección de Salud Mental en su Buró de Asuntos Médicos, las condiciones de los servicios psiquiátricos en Taiwan aún se encontraban en una fase de subdesarrollo. Había muchas razones por el atraso. Entre las principales sobresalen el fuerte estigma social que existe junto a los problemas psiquiátricos, un bajo nivel de los conocimientos del público acerca de la psiquiatría, la administración de la salud pública en general, y la esca­sez de personal y recursos para el bienes­tar social de los enfermos mentales.

La Sección de Salud Mental ha esta­blecido, por lo tanto, siete centros ma­trices de servicios psiquiátricos como parte de una red nacional. Cada centro es responsable del diseño del sistema de suministro de los servicios psiquiátricos y del programa de entrenamiento del personal de salud mental en el área geo­gráfica bajo su responsabilidad. Además, se dieron dos importantes pasos para me­jorar la calidad de los servicios psiquiá­tricos: la acreditación bianual de todos los hospitales psiquiátricos, y la aproba­ción de una ley de salud mental, una piedra angular para el futuro desarrollo. Estas medidas son esenciales para el de­sarrollo de los servicios psiquiátricos en los años noventa. Los profesionales en salud pública esperan que para el siglo XXI, la psiquiatría sea un igual a las otras ramas de la medicina en Taiwan.

Durante los últimos 40 años, la psi­quiatría ha sido desarrollada como un campo académico bajo el liderazgo del Departamento de Psiquiatría de la Facul­tad de Medicina de la Universidad Nacio­nal de Taiwan. Otros centros psiquiá­tricos también han sido establecidos, y tienen agendas de investigaciones y ser­vicios bastante ocupadas. Entre ellos se encuentran los departamentos de psi­quiatría establecidos en las siguientes ins­tituciones: el Hospital de la Universidad Nacional de Taiwan, el Hospital General de las Fuerzas Armadas, el Hospital Con­memorativo Chung Ha, afiliado al Cole­gio de Medicina de Kaohsiung, y el Hos­pital General de Veteranos de Taipei. Además, hay hospitales mentales pú­blicos alrededor de la isla.

La Sociedad de Psiquíatras se ha mantenido activa en los asuntos académicos y en la creación de cursos de entre­namiento para sus integrantes. La Socie­dad también lleva toda la responsabilidad de dar los exámenes de idoneidad para el personal psiquiátrico. Actualmente exis­ten cerca de 200 psiquíatras certificados por la junta, una cantidad excesivamente inadecuada para la población de 20 mi­llones de Taiwan. Cada año, 25 médicos se agregan al número de los psiquíatras certificados. Existe un total de 58 hospi­tales psiquiátricos que ponen 11.066 camas psiquiátricas al servicio de los pa­cientes internados, un promedio de seis camas por cada 10.000 personas. En con­traste, en las naciones occidentales el promedio de las camas psiquiátricas es de aproximadamente 25 camas por cada 10.000 habitantes.

Varios puntos merecen atención es­pecial al analizar la información sobre la frecuencia de las enfermedades psiquiá­tricas. Primero, hay varias enfermedades que ocurren frecuentemente en la comu­nidad. Todos estos casos están identificados con un significativo nivel de trastornos mentales que exigen atención psiquiátrica. Al­gunos de ellos, tales como trastornos psicofisiológicos y depresivos, pueden causar múltiples malestares físicos que llevan estos casos a doctores en medicina general, quienes por lo general no están totalmente capacitados para administrar estos casos psiquiátricos y con frecuencia dan demasiado énfasis a la prescripción de medicinas en la mezcla terapéutica.

El mismo énfasis equivocado en las medicinas ocurre en las diversas pólizas de seguros médicos públicos tales como el seguro médico que se da a los funcio­narios públicos, y los seguros destinados a los obreros y campesinos. Todos igno­ran el uso de la terapia psicológica e incu­rren en altos costos sin los beneficios te­rapéuticos correspondientes. Los trastornos depresivos son la causa de parte de los suicidios que ocurren en la comu­nidad. Las enfermedades relacionadas con el alcoholismo resultan en elevados costos médicos dado a la seriedad de los efectos del alcohol en el organismo y los severos problemas sociales que acompa­ñan a dichas desórdenes. Por ejemplo, con la alta densidad del tráfico en las ciu­dades de Taiwan, los motoristas bajo la influencia del alcohol causan accidentes que incrementan los costos de las pólizas de seguros dado al elevado índice de los accidentes automovilísticos. Los pro­blemas familiares y la violencia física también son complicaciones comunes que surgen a causa del alcoholismo.

Los estudios de muestras de sondeo de la comunidad y los descubrimientos en casos clínicos indican que la incidencia del alcoholismo ha aumentado en Taiwan durante los últimos 40 años. Es­tudios de los chinos Han realizados hace cuarenta años mostraron que los casos severos de alcoholismo eran raros, y el índice era de un 0,01%. En estudios llevados a cabo entre los aborígenes de Taiwan en los años cincuenta, el índice de alcoholismo era de casi el 0,1%. Pero en la actualidad, la frecuencia de la de­pendencia en el alcohol entre los aborígenes (no incluyendo el abuso del alco­hol) es del 10 por ciento.

Clínicamente, en la década de los cincuenta el alcoholismo era raro entre los pacientes internos y los no hospitali­zados. En la actualidad, los casos de alco­holismo con problemas médicos o psi­quiátricos asociados son comunes. El Hospital Provincial Mental de Taoyuan tiene 72 camas para casos psiquiátricos agudos, y cada semana hay una afluencia constante de pacientes internados por problemas del alcoholismo en dicho hos­pital. Claramente, la creciente incidencia del alcoholismo merece la seria atención de las autoridades de sanidad así como del público, si cuando menos sólo fuese por los costos sociales incurridos en el sistema médico y en el contexto familiar. Taiwan tiene una seria necesidad de un programa para lanzar una efectiva cam­paña preventiva con el fin de combatir el creciente alcoholismo.

El índice de esquizofrenia es de apro­ximadamente el 0,3% y de alrededor de un 0,2% en los problemas afectivos bipo­lares (maniaco-depresivos). Estas cifras se encuentran al mismo nivel que el re­gistrado hace 40 años, posiblemente porque tales problemas están asociados con una fuerte etiología biológica y no son determinados por factores sociales. Los pacientes esquizofrénicos y los afec­tados por manía depresiva (especial­mente los primeros) por lo general cons­tituyen casos crónicos que requieren tratamiento clínico, y están caracterizados por una capacidad severamente reducida. Por lo general, los pacientes de esquizo­frenia son incapaces de desenvolverse in­dependientemente en la comunidad, y sus familias deben dedicar una conside­rable cantidad de tiempo y recursos eco­nómicos para apoyarlos.

Los pacientes de esquizofrenia y manía depresiva exigen continuos medi­camentos para evitar una reaparición de una crisis psicopática aguda. Los efectos profilácticos de los medicamentos anti­-psicopáticos para los esquizofrénicos y los estabilizadores del humor para los maniaco-depresivos son raramente com­prendidos por el público en general y las autoridades de sanidad. Estos casos exigen el fuerte apoyo de la comunidad y programas de rehabilitación bien dise­ñados, incluyendo alojamiento y semina­rios de trabajo, hogares de readaptación, programas de entrenamiento de capacita­ción social e internados para los pacientes cuyas familias no poseen los medios para ofrecerles el apoyo y los cuidados intensivos que necesitan. Un efectivo sistema de servicio psiquiátrico municipal para brindar tales atenciones y apoyo es suma­mente necesario en Taiwan.

El personal psiquiátrico requerido para administrar satisfactoriamente los casos de los pacientes no hospitalizados debería incluir tres disciplinas básicas: psiquiatra, doctor en medicina general (médico familiar) y varias categorías de personal consejero. Este último incluye personas con estudios en servicios psi­quiátricos tales como psicológos clínicos, trabajadores sociales psiquiátricos y tera­pistas recreativos. Parte de la proporción de los casos con síntomas físicos inicial­mente buscará la atención de los doc­tores en medicina general. Si no ocurre una mejora satisfactoria, entonces es ne­cesario una referencia psiquiátrica.

Hay aproximadamente 56.000 esqui­zofrénicos y pacientes afligidos por manía depresiva en Taiwan, de los cuales 9.937 están internados en hospi­tales psiquiátricos. Los pa­cientes con estas dos enfermedades re­quieren extensivos cuidados de parte de la familia y de la sociedad en general dado a la naturaleza crónica y el pronós­tico reservado de ambas enfermedades. Existe una aguda escasez de camas psi­quiátricas para tales pacientes, como ob­viamente lo demuestran las largas listas de espera de los pacientes que tienen que internarse en el cuidado intensivo de los centros de tratamiento activos.

A la vez, hay una falta de instala­ciones de rehabilitación sistemáticas en la comunidad. Todos los casos crónicos se estancan en las camas psiquiátricas y no hay salidas disponibles en la comuni­dad. Esta situación continúa escalando los costos médicos para estos casos. Además, aparte de no poder sobrellevar el estigma social impuesto, las familias de los pacientes no pueden costear los gastos médicos. Como consecuencia, una significativa proporción de estos caso son enviados a establecimientos de carácter religioso para alojamiento a largo plazo, como la Casa de Lung­ fa-tang (龍發堂), los cuales desafortuna­damente rechazan la atención médica necesaria.

Es urgente el establecimiento de un sistema de control efectivo para la eva­luación de los casos psiquiátricos en las salas psiquiátricas crónicas y la reclasifi­cación de estos casos basándose en sus estatus psicopatológicos. A la vez, se deben establecer instalaciones de rehabi­litación de la comunidad, tales como los internados, los centros de atenciones diurnas y nocturnas, albergues y semina­rios de trabajo, y los servicios de asisten­cia para las familias. El bienestar social también tiene que recibir la atención del Gobierno y el público debe tener mayores conocimientos acerca de la salud psiquiátrica.

Las bases teóricas contemporáneas de la psiquiatría en Taiwan básicamente siguen un sistema teórico teísta que enfa­tiza el concepto de la integridad biológica y psicosocial del individuo. Los factores psicopatológicos considerados incluyen genética, la naturaleza de la enfermedad, daño cerebral, biología del cerebro, estrés psicológico crónico y agudo, rasgos de la personalidad, patología de la familia, así como factores sociales y cul­turales. Este método teórico causa que la psiquiatría en Taiwan sea una disciplina médica que integra tecnología y humanismo.

Las investigaciones psiquiátricas han sido extremadamente activas y son carac­terizadas por ser distintivamente chinas y a la vez tener el honor de lograr un nivel internacional de excelencia. En las décadas de los 40 y 50, los estudios epi­demiológicos psiquiátricos en Taiwan se dieron a conocer alrededor del mundo, y la información sobre estos estudios ha sido citada con frecuencia en la literatura actual. En las últimas décadas, las inves­tigaciones psiquiátricas incluyen estudios descriptivos de las enfermedades psiquiá­tricas, estudios epidemiológico sobre la incidencia de enfermedades, y sus fac­tores de riesgo. También ha habido nu­merosos estudios en los aspectos tecnico­científicos de la ciencia médica psiquiátrica. Las investigaciones sobre las téc­nicas psicoterapeúticas adecuadas para individuos, familias y la psicoterapia en grupos también han sido bastante prolíficas y productivas.

Basándose en el marco teórico y en la extensiva información científica de pri­mera clase, los servicios clínicos para los pacientes psiquiátricos en Taiwan han adoptado un método que incorpora las disciplinas especiales de los psiquíatras, psicólogos clínicos, trabajadores sociales psiquiátricos, y terapistas psiquiátricos profesionales, con el psiquíatra siendo el líder del grupo. La estrategia terapeútica es formulada por el psiquíatra, y los inte­grantes del grupo de terapia trabajan en sus áreas de especialización según se in­dique en el carácter psicopatológico del paciente.

Todas las modalidades del trata­miento, tales como los varios tipos de psicoterapias y tratamientos somáticos, son considerados en la elección de la forma más efectiva de tratamiento para mejorar la condición psicopatológica del paciente. Las técnicas terapeúticas utili­zadas en el tratamiento somático in­cluyen drogas psicotrópicas y terapia con­vulsiva eléctrica según las instrucciones médicas indicadas para la fase de la enfer­medad psicopatológica presente.

Además de los servicios de salud mental en establecimientos puramente psiquiátricos, los pacientes con otros tipos de aflicciones también reciben tales servicios en los hospitales generales a través del servicio de enlace para las con­sultas psiquiátricas.

Un sistema administrativo adecuado es esencial para asegurar un buen servi­cio psiquiátrico. En la actualidad, las leyes concernientes a la salud mental están siendo revisadas por el Yuan Legis­lativo. Se espera que estas leyes claves entren en vigor en un futuro próximo. La República de China en Taiwan es una de las pocas naciones en la década de los noventa que no posee una ley de salud mental para el establecimiento de un sis­tema administrativo que atienda a los en­fermos mentales.

Se espera que la ley de salud mental de la Rep. de China ponga énfasis en los métodos preventivos, aparte de suminis­trar una adecuada cantidad de servicios e instalaciones psiquiátricas de calidad. El borrador de la ley pone especial atención a los derechos del paciente, incluyendo procedimientos detallados para el internamiento de los pacientes con enferme­dades mentales severas. Un departa­mento especial responsable de los servi­cios psiquiátricos, así como un comité consultor especial para la salud mental constituyen un requisito en cada nivel de la administración de sanidad. El borrador de la ley consta de otro puntos impor­tantes para el establecimiento de una red administrativa y operacional para la salud mental.

El avance hacia buenos servicios psi­quiátricos también ha sido fomentado por la Asociación China para la Salud Mental y la Sociedad Psiquiátrica de la Rep. de China (Taiwan). Ambas organi­zaciones han estado activas en la propa­gación de los conceptos de la salud mental y estilos de vida sanos entre el público. La Sociedad Psiquiátrica ha fo­mentado altos estándares de servicios psiquiátricos y entrenamiento para los es­pecialistas en todas las ramas de la psiquiatría. Pero el suministro de personal psiquiátrico aún es bastante escaso en comparación con la cantidad requerida para satisfacer las necesidades del pú­blico. Todos los profesionales relacio­nados con el sistema educativo y en la administración de salud deben de traba­jar conjuntamente para resolver este pro­blema, y el éxito de sus esfuerzos será considerablemente apoyado por la veni­dera ley concerniente a la salud mental.
Hai-Gwo Hwu, M.D. (胡海國) es superin­tendente del Hospital Mental Provincial de Taoyuan y actualmente trabaja como profe­sor asociado en el Departamento de Psi­quiatría de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Taiwan.

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