La República de China quedó en tercer lugar dentro de los países de Asia y el Pacífico en un índice de integración de salud mental regional recientemente publicado por la Unidad de Inteligencia de The Economist. Taiwan obtuvo tan elevada posición por la implementación de sus políticas de salud y prestar servicios destinados a asistir a la exitosa integración de los pacientes en la sociedad.
La calificación general del país fue de 80,1; quedando detrás de Nueva Zelanda, con 94,7; y Australia, con 92,2; pero por delante de Singapur, con 76,4; Corea del Sur, con 75,9; y Japón, con 67,4.
El doctor Chang Shu-sen, profesor asistente del Colegio de Salud Pública de la Universidad Nacional de Taiwan, con sede en Taipei, señaló que: “la trasición democrática de Taiwan hace 30 años ha producido amplios impactos indirectos en el mejoramiento de la atención comunitaria y ha reforzado la preocupación sobre los derechos humanos, incluyendo los de aquellas personas con enfermedades mentales”.
El informe fue presentado el 10 de octubre, para coincidir con el Día Mundial de la Salud Mental, y en la edición inaugural del índice se comparan los niveles de esfuerzos en 15 países sobre una base de 18 indicadores, agrupados en las categorías de acceso al tratamiento, medio ambiente, gestión y oportunidad. Se emplea una metodología similar a la usada por la Unidad de Inteligencia de The Economist para su informe sobre Europa de 2014.
Según el índice, Taiwan sobresalió en cuatro categorías: tercero en medio ambiente; tercero, junto con Japón, en oportunidades; cuarto en gestión; y quinto en acceso al tratamiento. Un aspecto considerado digno de resaltar fue la prevención de suicidios, donde se logró una baja significativa en la tasa de los mismos desde la introducción del programa del Seguro Nacional de Salud en 1995.
El Seguro Nacional de Salud es un sistema de salud pública de clase mundial, ampliamente reconocido como uno de los más impresionantes logros del sector público en la República de China.
Otra iniciativa de salud pública que se espera mejore el bienestar de la población es el Plan de Atención a Largo Plazo 2.0, con el fin de aumentar el acceso y la calidad de los cuidados de salud para los ancianos y minusválidos en el país.