n grupo de rescate compuesto por 60 socorristas profesionales de la Administración Nacional de Bomberos y del Gobierno Municipal de Taipei partió hacia Irán el 27 del mes pasado para integrarse a las operaciones de búsqueda y rescate en la antiquísima ciudad de Bam.
El grupo tiene experiencias en este tipo de operaciones ya que participó en esfuerzos similares en áreas afectadas por terremotos en Indo-nesia y El Salvador. El equipo está bajo mando de Huang Po-tsun, funcionario superior de la Admi-nistración Nacional de Bomberos, subordinada al Ministerio del Interior.
El equipo de rescate lleva consigo tres perros rastreadores especializados en búsqueda de sobrevivientes, así como equipos para detectar señales de vida y para remover obstáculos.
Un violento terremoto sacudió el 26 de diciembre la ciudad de Bam, ubicada en el sudeste de Irán, dejando un saldo de más de 20 mil muertos y otros 10 mil heridos. Funcionarios iraníes han revelado que la cifra de fatalidades probablemente subirá a los 30 mil.
El día 28, un grupo religioso de Taiwan anunció la donación de cien mil dólares estadounidenses para ayudar a las víctimas de este terrible terremoto que sacudió a Irán y lanzó al mismo tiempo una campaña de donación para la misma causa.
El maestro de Zen, Sheng Yen, creador de la Fundación de Bienestar Social y Caridad de la Montaña del Tambor Dharma, dijo que su organización donará el dinero a una organización internacional de rescate a la mayor brevedad para agilizar la adquisición de diversos bienes materiales que necesitan urgentemente los numerosos damnificados del terrible sismo.
Sheng Yen también presidió una reunión de 2.500 fieles para rezar por las víctimas del desastre y urgió al público en general a participar en la campaña de recaudación de fondos.
A la vez, el Ministerio de Relaciones Exteriores anunció la donación de cien mil dólares como ayuda de emergencia para los damnificados del terremoto. Un vocero de la Cancillería manifestó que el Gobierno de la República de China ha expresado sus condolencias y dolor ante las víctimas del sismo.
Otras organizaciones de beneficencia en Taiwan, incluyendo la Sociedad de la Cruz Roja de la República de China, la Fundación de Caridad Budista Tzu Chi, y Visión Mundial Taiwan, tienen proyectado iniciar asimismo una serie de programas de ayuda humanitaria para los numerosos damnificados del movimiento sísmico en el país del Medio Oriente.
Los voluntarios de la Fundación Tzu Chi, que salieron separadamente de Taiwan, Jordania y Turquía, llegaron a Bam para distribuir la primera remesa de diversos materiales urgentemente necesitados, incluyendo mantas y agua potable, entre los numerosos damnificados del catastrófico desastre.
La temperatura en Bam durante el invierno, que llega a unos -6°C durante en las noches, ha obligado al mencionado grupo de voluntarios a llevar consigo tiendas de campaña y bolsas de dormir térmicas para poder combatir las malas condiciones del clima y permanecer en la zona afectada por el movimiento sísmico por un espacio de tiempo más largo.
El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Kamal Kharazi, se reunió el 30 del mes pasado con los miembros del equipo de rescate de Taiwan para expresar su gratitud por la asistencia en las labores de rescate después del devastador terremoto en Bam.
Kharazi llegó en helicóptero desde Teherán para visitar el campamento del equipo de rescate de Taiwan en Bam, ciudad ubicada a unos mil kilómetros al sudeste de la ciudad capital. El Canciller estrechó la mano a todos los miembros del equipo de Taiwan, instándoles a continuar con su labor.