Max Liu, un artista de múltiples talentos que hizo grandes contribuciones a la preservación y promoción de las artes y culturas primitivas, falleció el 13 de los corrientes en Taiwan.
Liu nació el 13 de julio de 1912 en Kwangtung, China continental. Viajó a temprana edad a Japón, donde vivió varios años y aprendió el japonés e inglés. Era ingeniero de profesión y comenzó a explorar seriamente con el pincel y la pintura cuando ya era una persona de mediana edad.
Siendo un personaje solitario en los círculos artísticos de Taiwan, Liu se describió a sí como el autorretrato de "un hombre que ha pasado toda una vida en diferentes ocupaciones: siendo artillero para ganarse la vida, payaso para entretener a las personas, y maestro para traer la verdad al arte".
Durante los años de la Guerra de Vietnam, Liu trabajó en Indochina, aprovechando su estadía allí para explorar las ruinas y reliquias de las antiguas civilizaciones de esos países, que se convirtieron en una característica importante de muchas de sus creaciones artísticas.
A la edad de 73 años, Max Liu realizó su primer safari en Africa. En un continente donde el hambre y las enfermedades son escenas muy comunes, Liu realizó algunas de sus mejores obras, donde refleja la compasión y la voluntad inexorable del mundo natural.
En los últimos años, Liu donó muchas de sus obras maestras a los museos en Taiwan. El veterano artista fue muy aclamado y reconocido en competencias y exhibiciones artísticas internacionales.
La presidenta del Consejo para los Asuntos Culturales, Tchen Yu-chiou, manifestó que Taiwan está de luto con la muerte de Max Liu y Chen Ting-shih, dos líderes que promovieron el progreso de las Bellas Artes en la isla.
Tres días después de la muerte de Max Liu, Chen Ting-shih, pintor vanguardista de 90 años de edad, fallecía en un hospital en el centro de Taiwan. Chen fue aclamado por los críticos del arte en los países occidentales como un pintor cuyas "obras son un ejemplo de la tendencia abstracta de la síntesis de Oriente y Occidente". A pesar de ser un maestro en pintura y caligrafía chinas, Chen nunca dudó en tratar de integrar nuevos estilos y materiales a sus obras. Junto con varios artistas de Taiwan, creó el Grupo Quinta Luna a fines de los años cincuenta. El grupo defendía la asimilación de los avances modernos de Occidente al momento de reexaminar las tradiciones estéticas de China.