Los dirigentes y las organizaciones cívicas de la República de China declararon al unísono sus preocupaciones por los desastres causados por un fuerte terremoto que azotó la provincia de Sichuan, en el sudoeste de China continental.
El presidente Chen Shui-bian instó el día 13 de los corrientes a las organizaciones locales a ofrecer asistencia en las labores de rescate y reconstrucción en la provincia de Sichuan. El Mandatario impartió instrucciones al Yuan Ejecutivo para que integre todos los recursos de los sectores público y privado en Taiwan para canalizarlos hacia el socorro humanitario a China continental.
Haciendo hincapié en que Taiwan recibió considerable ayuda de la comunidad internacional cuando un terremoto de magnitud de 7,3 grados cobró más de 2.400 vidas en Taiwan en 1999, Chen dijo que la República de China está ahora dispuesta a unirse a los esfuerzos mundiales para ayudar a China continental.
Posteriormente, el primer ministro Chang Chun-hsiung señaló que Taiwan ofrecerá toda la asistencia necesaria a las operaciones de ayuda, incluyendo el envío de equipos de rescate. "Extiendo mi profunda condolencia y preocupación por el pueblo chino en representación del Gobierno (en Taiwan)", dijo Chang.
El Primer Ministro manifestó que el Gobierno también está preocupado por las condiciones en que han quedado los comerciantes, estudiantes y turistas taiwaneses que se encuentran en esta zona de China continental, instando a las autoridades locales a ayudar a proteger a los ciudadanos taiwaneses y a ofrecerles toda la asistencia necesaria. Alrededor de unos tres mil turistas taiwaneses se encontraban en la provincia de Sichuan cuando ocurrió el sismo.
Mientras tanto, el alcalde del distrito de Nantou, en el centro de Taiwan, instó en ese mismo día al público en general a ayudar a las víctimas del devastador terremoto. El alcalde Lee Chao-ching recordó que su distrito fue el epicentro de un terremoto que azotó Taiwan el 21 de septiembre de 1999, y manifestó que siente un enorme pesar por las víctimas de esta vez en Sichuan.
Hablando acerca de su propia experiencia, Lee dijo que en la etapa inicial de los esfuerzos de socorro, las víctimas necesitan urgentemente alimentos, agua limpia y tiendas de campaña, expresando el deseo de que tales materiales puedan ser recolectados pronto en Taiwan para ser enviados a China continental.
De su parte, el presidente electo, Ma Ying-jeou, donó 6.536 dólares estadounidenses a la Cruz Roja taiwanesa para ser destinados a los esfuerzos de socorro en Sichuan.
"Ayudaremos en los esfuerzos de rehabilitación post-desastre para impulsar la buena voluntad y confianza mutua", señaló Ma refiriéndose a su preocupación por las víctimas del terremoto.
Mientras tanto, la Sociedad de la Cruz Roja de la República de China y otras organizaciones cívicas han terminado de hacer los preparativos para brindar su asistencia a las áreas azotadas por el terremoto.
La vocera de la Cruz Roja, Lin Hsin-fen, reveló que la organización hizo una donación inicial de 300 mil dólares estadounidenses y se encuentra actualmente en plena campaña de recolección de fondos y bienes de socorro.
La portavoz de la Sociedad Budista Montaña Ling Jiou, Wu Wen-li, señaló que se ha creado una cuenta especial para recibir las donaciones destinadas a auxiliar a los damnificados en China continental.
La mayor aerolínea de Taiwan, China Airlines, ha prometido transportar gratuitamente todos los materiales de socorro que sean destinados a las zonas de desastre en la provincia de Sichuan.
La Fundación para los Intercambios a través del Estrecho de Taiwan (SEF, siglas en inglés) ha enviado un mensaje a su homólogo de China continental, la Asociación para las Relaciones a través del Estrecho de Taiwan (ARATS, siglas en inglés), solicitando su coordinación y el consentimiento de las autoridades chino-continentales para el envío de personal de búsqueda y rescate a las áreas afectadas.
Un seísmo con magnitud de 7,9 grados en la escala Ritcher sacudió a la provincia de Sichuan a las 2:28 p.m. del día 12 de mayo, dejando un saldo superior a los treinta mil muertos hasta el cierre de la presente edición. El terremoto, cuyo epicentro estuvo cerca del pueblo de Wenchuan, en una región con muchas áreas densamente pobladas próximas a Chengdu, capital provincial. El movimiento telúrico fue tan fuerte que también se sintió en Tailandia, Vietnam, Hong Kong y Taiwan.