El futuro de Taiwan está en China y las esperanzas de China están en Taiwan, dijo el vicepresidente de la Federación por la Democracia en China, Wuer Kai-shi.
El joven de 23 años es uno de los dirigentes del movimiento por la democracia que irrumpió en la Plaza Tienanmen en 1989. Viajó a Taiwan a mediados de septiembre para participar en un seminario titulado "Todos los aspectos del Movimiento Democrático en China", bajo el patrocinio de la Sociedad China de Política, de la Universidad Normal de Taiwan.
Wuer señaló que la unificación de ambos lados del Estrecho de Taiwan debería realizarse bajo la fórmula de una federación. Sin embargo, aclaró, la premisa para la unificación de China es la democratización del área continental.
Añadió que la unificación china será beneficiosa para todo el pueblo chino: el que reside en Taiwan y el que habita en el continente. Al mismo tiempo, rechazó con firmeza el separatismo, diciendo que aquellos que apoyan la independencia de Taiwan probablemente causarán daños a los 20 millones de habitantes de la isla.
Explicó que el principio de la Federación es reconocer la soberanía del Gobierno en Taipei como legítimo en el área de Taiwan. No reconoce el dominio totalitario del régimen comunista en China continental.
Además, declaró que la unificación sólo podrá alcanzarse cuando el régimen comunista se haya terminado en China. Hasta entonces, ambos lados del Estrecho pueden trabajar en la redacción de un borrador sobre la futura unificación. No obstante, reiteró su opinión de que el sisterpa federativo puede ser el mejor para el futuro de China.