El espectáculo artístico Encuentro con la Cultura China -presentado a finales del mes pasado por la Misión de buena voluntad compuesta por un grupo de jóvenes estudiantes universitarios de la República de China en el Teatro de Opera cel Centro Cultural de Guatemala- conquistó nutridos aplausos por parte del numeroso público que se dio cita en dicho auditorio.
Dicho espectáculo fue presentado por la señora esposa del vicepresidente guatemalteco, Sra. María Mercedes Blanco de Carpio, habiendo ofrecido también dicho grupo artístico una presentación especial dedicada a los estudiantes universitarios guatemaltecos.
Pepe Estrada, de EL GRAFICO, uno de los principales diarios de dicho país, comentó también en forma por demás elogiosa, dicho evento, considerándolo como un espectáculo completo, agregando que "integra música, danza, cantos, gimnasia y narración coreográfica. La sangre nueva de artistas chinos expresando sus tradiciones, integra técnicas contemporáneas. En la segunda parte del programa: Buenos días Taipei, las coreografías presentadas, combinan en su mayoría las técnicas del jazz clásico de Graham "en la danza, con el jazz sinfónico en la música.
"Una combinación muy particular que mezclada con lo tradicional chino referente a danza y música, producen una verdadera sintesis de lo que es hoy en día Taipei, capital provisional de la República de China. Los instrumentos tradicionales chinos se combinados con sintetizadores y efectos electrónicos.
"En el pasado tuvimos la oportunidad de apreciar el Ballet Acrobático de Taipei, un superespectáculo profesional que deslumbra por su calidad y en 1985 admiramos también la Compañía de Opera China de Taipei. Encuentro con la cultura china es un espectáculo distinto; posee la frescura de la juventud y tiene la inexperiencia del amateur."
En el mismo diario, Rita Porras escribió: "El Festival del Bote Dragón se hizo acreedor a arrolladores aplausos, a través de la presentación de las regatas y del desarrollo de la narrativa que logra un claro desenlace a través de la leyenda popular de Chu-Yuan, el poeta que se opone al soberano y que por fin se suicida arrojándose al río Milo.
"El bailarin que interpreta al personaje central, es extraordinario y expresa su búsqueda, angustia y muerte con mucha expresión y dominio. La riqueza de esta leyenda está presentada en una versión moderna, que merece un galardón a la dirección coreográfica. El Mes de los espíritus es menos artístico, porque carece del desenlace de la narrativa. Danza Aborígen y El Festival del Medio-Otoño o de la Luna, tienen temas menos impactantes y por lo tanto el movimiento no se concretiza mucho, pero sus coreografías sí sugieren en forma abstracta sus rituales y los rasgos que los caracterizan desde épocas primitivas. "