Taiwan Today

Miles de policías armados usaron la fuerza para sofocar una demostración de 1000 campesinos que protestaron contra la decisión de la autoridad local de soltar en sus campos el agua altamente contaminada de un embalse cerca de Pekín, informó un funcionario. Más de 2000 policías armados arrastraron a un grupo estimado de mil campesinos del depósito de Niukouyu en el distrito de Fengshan, a unas 50 millas (80 kilómetros) al Suroeste de la capital, e hirieron a varias docenas de ellos. Li Chi-yuan, vocero de la municipalidad de la ciudad de Pekín, confirmó el incidente pero negó versiones de que tres campesinos fueron muertos. "Funcionarios locales me han asegurado que ninguno murió," apuntó pero se negó a explicar porqué la protesta no fue publicada en la prensa "oficial" . Los campesinos de la aldea de Kuche, que tiene 4000 habitantes y está situada cerca de la base de la represa de Niulkouyu, iniciaron la protesta para impedir el desagüe de los efluentes contaminados de una fábrica petroquímica cercana a sus campos. La policía armada puso un cordón alrededor del embalse el pasado 21 dejunio para vigilar la apertura de las esclusas al día siguiente temprano, dijo un funcionario de Fenshan que senegó a ser identificado, y agregó: "la policía trató primero de persuadir a los campesinos a marcharse y después, cuando el intento fracasó, trabajó de a pares para arrastrar a los manifestantes, hiriendo a varias docenas de ellos. Más de 100 manifestantes fueron detenidos,pero fueron liberados pocas horas después." Agregd que las autoridades ordenaron abrir las esclusas recién después que el agua llegó al nivel de peligro y aparecieron filtraciones en el terraplén. El agua del depósito subió rápidamente desde el pasado 3 de marzo cuando los campesinos empezaron una vigilancia de 24 horas en la represa para impedir que los trabajadores de la fábrica ran el agua contaminada. Bajo un acuerdo firmado entre la municipalidad local y Yenshan Petrochemical Company, luego del incidente, ésta ha sido intimada a gastar US$ 43 millones a fin de tomar medidas efectivas contra la contaminación, en los próximos tres años. El funcionario afumó que dicha fábrica ha soltado sus aguas servidas al depósito por más de dos décadas, pero los campesinos locales descubrieron la contaminación hace pocos años cuando empezaron a sufrir problemas respiratorios y notaron que el agua tenía un olor extraño.