Taiwan Today

Por:Miguel Moreno Góngora Por las calles de Taipei merodea una bestia veloz, escurridiza, domesticada pero con ciertos especímenes aún salvajes, que no muerde pero aterroriza, y no importa si es día o de noche, si llueve o un tifón azota la ciudad, siempre se la verá u oirá. Los chinos la llaman "motou che". En español "motocicleta". Cualquier visitante de Taipei encontrará un fenómeno único: miles de motocicletas que circulan por cualquier lugar, a cualquier hora, transportando las cosas más inverosímiles: plantas, tanques de gas, flores, frutas, libros, hielo, cajas y hasta familias enteras. Cuando uno está en su auto, atrapado en un congestionamiento y es sobrepasadolor veloces peatones e indómitas manadas de motocicletas que zigzaguean entre los "petrificados" automóviles, no importa si maneja un Mercedes Benz o un Ferrari, es seguro que muchas veces sentirá envidia y deseará estar montado sobre una de esas bestias. Ellas, por lo general, sólo obedecen a su amo, ya que maniobrar en un tráfico diez veces más denso que el de la ciudad de Los Angeles implica un alto grado de destreza, digno de un domador de circo. Como promedio, cada familia tiene al menos una motocicleta y su número sobrepasa los 8 millones en toda la isla y, con incrementos del 12 por ciento en las ventas anuales, es preocupante su proliferación ya que su atractivo precio, fácil estacionamiento, maniobrabilidad, mantenimiento sencillo y bajo costo operativo las hacen no un artículo de lujo sino un conveniente instrumento de trabajo, y a veces una necesidad. Para conducirlas sólo se necesita la licencia emitida por el Departamento de Tránsito-claro está, luego de haber aprobado los exámenes correspondientes aunque las menores de 50cc de cilindrada son consideradas "inofensivas" y no se requiere licencia alguna. Las legislación nacional prohibe cilindradas mayores de 15Occ, por lo que la industria nacional y la japonesa han creado híbridos de excelentes rasgos asiáticos como la Yamaha, Honda, Suzuki o el robusto cruce ítalo-chino Vespa, y los cién por ciento taiwaneses Sanyang y Tailung. Para proteger su supervivencia toda importación es prohibida pero es posible encontrar monstruos de más de 400cc "destrozando" las avenidas. Usualmente importadas en piezas separadas y luego rearmadas, es seguro que no hubieran soportado la cuarentena aduanera. El gobierno ha fomentado la producción de motocicletas como método alterno de transporte mediante incentivos a las industrias, construyendo subterráneos, estacionamientos, calles y hasta vagones de tren sólo para ellas, dejando un solo lugar claramente prohíbido: la autopista nacional. Esa política ha hecho que la mayoría de los usuarios del sistema de autobuses sean mujeres. Jóvenes, viejos, mujeres embarazadas, secretarias, gerentes, ricos y pobres en fin, es casi improbable que en el Taiwan contemporáneo alguien no haya montado alguna vez en su vida en una motocicleta, ya que hasta los pllfapléjicos tienen modelos especiales de cuatro ruedas. Se las ve fuera de restaurantes, discotecas, tiendas, hoteles, oficinas, y hasta de la Presidencia, soportando las inclemencias del tiempo; a veces resplandecientes, otras veces en estado deplorable, pero siempre a la espera de su dueño y su carga, que de seguro ella misma se sorprende de poder acarrear. Existen locales de venta de motocicletas alrededor de toda la isla, abiertos desde el amanecer hasta casi la medianoche, capaces no sólo de vender sino de "extirpar" a la máquina cualquier "malestar". No importan el modelo, la edad ni la condición fisica , esos "cirujanos del destornillador" dan nuevos ánimos y vida a cualquier "moto", en un santiamén. Los precios varían desde NT$ 3,000 por una que ha pasado por innúmerables manos pero capaz de llevar a uno al lugar deseado, hasta las más caras y de mejores marcas con precios de hasta NT$ 60,000. Hay cuatro diferentes clases: el tipo "scooter" , el todoterreno, el de carreras y el tradicional. Puede decirse que la mujer china prefiere el "scooter" por ser automático, más liviano, de femeninos colores y por su protección delantera que la defiende de los charcos del agua, al igual Que le permite usar minifaldas. En cuanto a los hombres, no existe preferencia alguna ya Que a todas se le pueden acoplar despositivos para carga. Desde el año pasado han aparecido nuevos modelos, sumamente atractivos y modernos, tanto para el hombre como la mujer, que presentan gran cantidad de dispositivos adicionales como maleteras, espaldares, parrillas, luces retráctiles, y colores desde el turquesa, el rosa y el verde, hasta el negro. Los dos más impresionantes modelos son la Sanyang 125cc que presenta un diseño aerodinámico de vanguardia y el "scooter" Sanyang 125cc DX que tiene luces retráctiles, respaldo, maleteras, es automática y se asemeja a una nave espacial. Ambas motocicletas tienen un precio por encima de los NT$ 50,000. El año pasado hubo un furor en la juventud que provocó una ola de carreras nocturnas por las amplias avenidas de Taipei que atrajo a miles de espectadores, y se dice que los nuevos modelos de carrera como la Sanyang 125cc y la Honda "Ataque" 135cc alcanzaban los 140 Kms/hora. Taiwan es una isla de hermosas montañas, que dispone de una red de carreteras que permiten al viajero llegar al más recondito lugar, y tener la oportunidad de disfrutar de las bellezas naturales en una forma económica y libre hará de su relación con este útil vehículo algo muy especial. Por lo general se las verá algo desdeñadas, pero su aporte al desarrollo del país, el ahorro de tiempo a la hora de conducir en tránsito pesado y demás ventajas, las hacen merecedoras de que algun día se les reconozcan. Se aduce que son peligrosas, pero muchas muertes por accidentes de motocicletas pudieran evitarse de existir legislación que obligara a usar casco ya que el tráfico fluye a un ritmo bastante moderado, y en ciertos sectores caminar es más rápido que ir en automóvil. El Gobierno Municipal de Taipei inició el 9 de septiembre una campaña de ordenamiento del tránsito que cuenta con la ayuda de policías en auto, la motorizada (que posee nuevas BMW 65Occ) y más de 400 voluntarios, todos dispuestos a arreglar lo que muchos no llaman un problema sino "la enfermedad de Taipei". La campaña cuenta con el apoyo evidente del público Que espera se logre domesticar a ciertas "bestias" salvajes, que corren por los carriles rápidos, van de contramano, estacionan en las aceras y hasta son guiadas por "daltónicos" que no distinguen los colores de los semáforos. Veinte años atrás, por las calles de Taipei merodeaban miles de bicicletas, no muchas motocicletas y escasos carros, además de que nadie pensaba que la República de China en Taiwan se convertiría en uno de los países más ricos del mundo, Hoy, más de 8 millones de motos, casi 2 millones de autos y el plan gubernamental de elevar el ingreso "per cápita" a más de US$ 16,000 anuales para el año 2.000, pueden causarle a las autoridades un gran trauma por el solo hecho de pensar si a todos los motociclistas se les ocurre cambiar y comprar un auto, porque entonces sí, el tráfico no se congestionaría ¡sino que se congelaría! La tecnología y sus avances tales como el metro, autos, autobuses, etc. se han convertido en los mayores "depredadores" de las motocicletas, pero es improblable que los chinos las descarten en un futuro cercano, porque mientras exista congestionamiento ellas siempre estarán listas para llevarlos a tiempo a su destino, cabalgando impertérritos por las "praderas de asfalto", sin que nada ni nadie los detenga ... excepto la policía.