Desde la adopción de la Constitución, el 25 de diciembre de 1947, la República de China se ha convertido en una sólida democracia y en una afluente sociedad y ha desarrollado una poderosa economía.
Con la República de China y China continental trabajando bajo dos sistemas políticos y económicos diferentes, las extraordinarias realizaciones de la República de China en Taiwan, bastión del resurgimiento nacional, presentan un marcado contraste con el atraso de China continental, probando así la superioridad de los Tres Principios del Pueblo sobre el comunismo.
El bien conocido "milagro económico" se ha transformado en un modelo a seguir para numerosos países en vías de desarrollo, en sus esfuerzos para promover su desarrollo económico e Incluso los comunistas chinos han intentado también "aprender del éxito económico de Taiwan".
No obstante la enorme valorización del NT$ (Nuevo dólar de Taiwan) contra el US$ ocurrida en el transcurso del presente año, se tenía previsto un crecimiento económico del 11%, en tanto que el producto nacional bruto llegaría a alcanzar US$97.200 millones, con lo cual la nación ascendería dos posiciones: del vigesimotercer al vigesimoprimer lugar mundial, de acuerdo con la Dirección General de Presupuestos, Estadísticas y Contabilidad.
Hoy en día, los habitantes de la República de China, con un ingreso per cápita aproximadamente 15 veces mayor que el de los habitantes del Continente, disfrutan de niveles de vida más altos que sus compatriotas en China continental.
Con el acelerado crecimiento económico en la última década, el producto nacional bruto per cápita de la República de China, ha aumentado anualmente de US$3.751 en 1986, a US$5.000 para finales del presente año.
Decimosexto país comercial en el mundo
La República de China es el decimosexto país comercial más grande del mundo y el undécimo más grande en exportaciones. El año pasado, la nación disfrutó un superávit comercial de US$16.000 millones, con US$40.000 millones en exportaciones y US$24.000 millones en importaciones, habiéndose previsto que su comercio exterior de este año, alcanzaría US$89.000 millones y su superávit aumentaría hasta alcanzar la cifra récord de US$20.000 millones.
La fructífera puesta en práctica de la reforma agraria, iniciada en 1949, incrementó la producción agrícola de la República de China en Taiwan, convirtiéndola además en modelo para los países del sudeste de Asia, que han tratado de emular sus políticas de reforma agraria.
Los sectores comercial e industrial han disfrutado también de grandes negocios, robusteciendo las exportaciones industriales, hasta llegar a ocupar el año pasado, el 94% del total de exportaciones de la nación.
Los habitantes locales han saboreado los frutos del crecimiento económico a través de una equitativa distribución de la riqueza, después de la implantación del Principio del Sustento del Pueblo. Como resultado, ha ido reduciéndose cada vez más la brecha entre el 20% de personas con ingresos anuales más altos y más bajos, hasta llegar a ser de sólo 4.4 veces, siendo una de las más pequeñas del mundo.
Durante la última década, la prosperidad económica ha ayudado a mantener una baja tasa de desempleo en el país, habiendo sido este año de sólo el 1 ,96%.
Asimismo, en el transcurso de las últimas décadas, la educación en la República de China ha cultivado un talento humano sobresaliente en los diferentes campos, contribuyendo así en gran forma al desarrollo nacional.
Educación y bienestar social
Desde que en 1968, el gobierno extendió el sistema de educación obligatoria de seis a nueve años, el porcentaje de analfabetismo de la nación ha descendido al 8%. La asistencia a las escuelas de niños en edad escolar llega casi al 100%, en tanto que más del 80% de los graduados de educación secundaria asisten a universidades y demás instituciones educativas de nivel superior.
Para reforzar los servicios de bienestar social, el gobierno ha implantado programas de seguros para empleados públicos, militares y sus respectivas esposas, así como para trabajadores y finalmente será expandido a todos los ciudadanos. Como resultado, el porcentaje de personas aseguradas, ha aumentado al 32,6%, cubriendo con sus beneficios al 65% de la población.
Las expectativas de vida han aumentado también, como resultado de los esfuerzos gubernamentales por mejorar los servicios médicos, aumentando de 52,9 y 56,3 años en 1950, a 70,82 y 75,81 años en 1985, para hombres y mujeres, respectivamente.
En cuanto a la democratización, en 1950 Taiwan empezó a poner en práctica el sistema de "auto-gobierno". Los miembros de la asamblea provincial, de municipios, consejos de ciudades y poblados y magistrados, así como alcaldes de ciudades y jefes de aldeas, son electos directamente por los ciudadanos. Por otra parte, en la última década se han celebrado varias veces elecciones parlamentarias para miembros suplentes. El promedio del 70% de votantes en las mismas, indica que los habitantes están bastante interesados en los asuntos públicos y demuestran profundo interés por las actividades políticas.
En marcado contraste con el desarrollo de China continental, el sistema económico adoptado por el régimen comunista a partir de 1949, ha fracasado totalmente. De acuerdo con el informe para 1985 del Banco Mundial, debido a su bajo ingreso per cápita de U$310, China continental fue clasificada en el octogesimonoveno lugar entre todos los países del mundo. Esta cifra es apenas el 10% del ingreso per cápita de la República de China para el mismo año.
Colocándose dentro de los 10 principales poderes económicos
En su informe anual, Euromoney, importante publicación económica europea mensual, predijo en su encuesta para este año. que durante el periodo 1987-89, la República de China alcanzará la segunda tasa de mayor crecimiento económico del mundo, antecedida solamente por Corea del Sur, no obstante que la situación económica mundial continuará empeorando.
Dicha publicación informó también que tres de los cualro "pequeños dragones" de Asia recientemente industrializados: Corea del Sur, la República de China y Hong Kong, avanzarán a las primeras tres posiciones de los 10 principales poderes económicos mundiales, mientras que Alemania Occidental, el Japón y los Estados Unidos, han descendido de posiciones.
Al desempeñar una responsabilidad cada vez mayor como líder del comercio mundial, la República de China ha acelerado su ritmo hacia el comercio y la liberalización económica, además de adoptar numerosas reformas políticas, marcando en esta forma un hito en la democracia constitucional de la nación.