Taiwan Today

No hay nada comparable en el mundo al ritmo de samba. y no hay nada comparable en el fútbol a Edson Arantes Do Nascimento, Pelé, La Perla Negra, el Rey, o como quieran llamarlo. Cuando se escucha la samba -con sus campanillas africanas, maraqueros y tamborileros- queda uno como hipnotizado. Cuando Pelé va tras la bola que rebota en la grama y se aproxima al arco, los estadios enteros se visten de fiesta y el público se prepara para observar todo un espectáculo. Y Pelé, la superestrella del fútbol, el fenómeno del balompié, el mejor jugador de todos los tiempos, el hombre de los mil goles, la "propiedad" más costosa del Brasil, vino a la República de China la semana anterior. Regresó después de tres años. Observó varias practicas de algunos equipos locales, como Los Camellos Voladores y el Chungto, dio diversas instrucciones, aconsejó, firmó autógrafos por montones, posó para los fotógrafos, se entrevistó con funcionarios gubernamentales, estrechó miles de manos y sonrió ... pero no dio ninguna demostración de su magnífico estilo. Eso, claro, desanimó a sus admiradores. Pero, aparte de eso, hay que decir que a este hombre, a veces misterioso -pero siempre optimista y satisfecho de sí mismo-, le gusta soñar despierto. Me lo confesó. Dijo, por ejemplo, que a menudo evoca escenas de cuando jugaba descalzo en las playas de Brasil, o que rememora algunas de los mejores momentos de su asombrosa carrera que le encantaría repetir. Y mientras habla, Pelé da una nota española a sus respuestas: "Bello país este, además de buena gente y excelente comida -do mar-" La verdad que raras veces lo ví tan desinhibido. En la reunión, "privada para que sea mejor y no nos molesten", agarró inclusive una guitarra y comenzó a cantar con su voz "meoi malandra", algo de bossa-nova: "Chove, chuva, chove sem parar!" De pronto, sin preguntárselo siquiera, continuando en español y en portugués, soltó algo directo: "Ahora no estoy soñando. ¿Sabe de uma coisa? He visto jugar a los equipos de Taiwan. No lo hacen mal. Seguro que en poco tiempo pueden llegar muy lejos, hacer más..." Palabras del Rey. Y,como si fuera cuestión de telepatía, para que no quedara duda, remató: "E palavra de rei não volta atrás". O.G.