En su edición del 30 de junio, el periódico dijo: "La venta de armas a la República de China está apoyada por la mayoría de norteamericanos como una medida necesaria para la estabilidad y seguridad del Lejano Oriente.
"Los norteamericanos saben que China Libre es un verdadero amigo que coopera con los Estados Unidos para promover la paz y la seguridad mundial.
"De otro lado, ¿cuántos norteamericanos fueron asesinados directa o indirectamente por los comunistas chinos durante las guerras de Vietnam y Corea?
"Los Estados Unidos no deberían vender armamentos que pueden ser usados para asesinar nortamericanos. La ayuda dada a la Unión Soviética durante la Segunda Guerra Mundial puede ser recordada en esta conexión".
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■ El mismo diario sostuvo en otro editorial que la práctica de los Tres Principios del Pueblo es el único camino para modernizar el Continente chino.
Sobre el particular indicó: "Como lo ha dicho el Presidente Chiang Ching-kuo, la meta final tanto de China comunista como de la Rusia Soviética es sepultar al mundo libre y remodelarlo sobre las bases del Marxismo-Leninismo. De este modo los comunistas chinos pueden estar esperando retornar al viejo camino ruso al final.
"Los intereses fundamentales y a largo plazo de los comunistas chinos y rusos son idénticos. La nostilidad entre los dos no puede considerarse como fundamental e incambiable. China Roja depende de la ayuda occidental para llevar adelante las llamadas "cuatro modernizaciones" y aumentar su fortaleza económica y militar, pero carece del poder suficiente para enfrentar a Rusia. Sin embargo, la ayuda occidental podría hacer lo suficientemente fuerte a China Roja para dominar a sus vecinos".