El presidente Ma Ying-jeou entregó la presea en Taipei al director ejecutivo de BPSOS, Nguyen Dinh Thang, junto con una donación de 100.000 dólares estadounidenses de la TFD entregada por el presidente del Yuan Legislativo, Wang Jin-pyng.
“Lo que la BPSOS ha hecho es admirable, ya que no sólo ayuda a rescatar a los refugiados de la tortura, sino que también les proporciona la ayuda humanitaria y de emergencia necesaria para que puedan recuperar sus vidas”, declaró el Mandatario.
Ma aprovechó la ocasión para señalar que en los últimos años Taiwan también ha avanzado en la lucha contra el tráfico de personas con el inicio de la Implementación del Proyecto de Prevención del Tráfico de Personas, y la aprobación de la Ley de Prevención del Tráfico Humano.
El presidente Ma también agregó que Taiwan publicará un informe nacional sobre derechos humanos en febrero del año próximo. En dicho informe, el Gobierno enumerará el progreso de Taiwan en la implementación de dos convenciones internacionales sobre derechos humanos; a saber, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos; y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales.
Por medio del informe, el mundo sabrá que “proteger los derechos humanos es una política fundamental del país, y que el Gobierno no escatima esfuerzos en ponerlos en práctica”, afirmó Ma. Tales esfuerzos han sido reconocidos por otros países, ya que por ejemplo Taiwan fue clasificada como país de Nivel 1 por dos años consecutivos en el Informe sobre Tráfico de Personas del Departamento de Estado de Estados Unidos, señaló Ma, añadiendo que Tailandia y Singapur también han enviado personal a la isla para aprender de la experiencia de Taiwan.
Asimismo, Wang elogió a la BPSOS por su dedicación a la protección de los derechos humanos, señalando que en los últimos años el grupo también hizo contribuciones significativas para ayudar a Taiwan combatir el tráfico humano.
En respuesta, Nguyen elogió a Taiwan por sus esfuerzos en la lucha contra el tráfico de personas, diciendo que nunca ha visto una nación que como la República de China luche con tanto ahínco contra el tráfico de personas.
Nguyen también declaró que cree que democracia y los derechos humanos están estrechamente relacionados entre sí, y que se necesita tanto una sociedad civil virtuosa y políticas adecuadas para eliminar la esclavitud moderna.