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Emoción popular por reunión familiar de osos panda

26/08/2013
La osa panda Yuan Yuan abraza cariñosamente a su cría,Yuanzai, en su recinto en el Zoológico de Taipei. (Foto de CNA)

Desde su nacimiento el 6 de julio pasado, la osezna Yuanzai ha estado bajo la permanente atención de los encargados del Zoológico de Taipei. Tras de haber estado en un cuarto de lactancia desde su nacimiento, Yuanzai fue reunida con su madre, la osa panda Yuan Yuan.

Al principio, a Yuan Yuan se le vió algo nerviosa al tratar de calmar a su bebé que se encontraba algo agitada, pero las dos osas panda finalmente se calmaron y parecieron estar cómodas con la compañía mutua, tras haber descubierto la mejor posición para abrazarse.

Sin embargo, después de los esfuerzos para adaptarse mutuamente, Yuan Yuan y Yuanzai se sumieron en un apacible sueño tras la emoción de su reunión de cinco horas de duración.

Yuanzai es el resultado de los esfuerzos en la inseminación artificial por cerca de cuatro años entre el padre, Tuan Tuan: y la madre, Yuan Yuan, dos osos panda regalados por China continental a Taiwan en 2008 como un gesto de buena voluntad por el mejoramiento de los lazos entre los dos lados del Estrecho de Taiwan. Los caracteres chinos “Tuan Tuan” y “Yuan Yuan” significan “reunión familiar”.

El experto en osos pandas de China continental, Dong Li, manifestó que la parte más gratificante del cuidado para Yuanzai fue ver la interacción entre madre e hija tras varias semanas de separación.

Dong y otro experto en osos panda chino-continental, Wei Ming, llegaron a Taiwan el mes pasado para ayudar en el parto y atender a la cría de la osa panda. Este esfuerzo requirió una vigilancia durante las veinticuatro horas del día. Al efecto, Wei durmió todas las noches en el cuarto de lactancia desde que nació Yuanzai.

A pesar de haber cuidado a unos cien cachorros de oso panda, fue una labor ardua para Wei, ya que Yuanzai sufrió una cortada en su muslo cuando su madre la trató de levantar con su boca apenas nació Yuanzai.

A un mes y medio de haber nacido, Yuanzai pesa ahora más de dos kilogramos, comparado con los apenas 183,4 gramos que pesaba al momento de nacer. “Me siento muy profundamente conmovido”, dijo Dong acerca de los primeros intentos de los encargados del zoológico de reunir a madre e hija.

El nacimiento de la osezna se ha convertido en algo sensacional en Taiwan, y los encargados del Zoológico prepararon un corto filme para mostrar la primera vez en que Yuanzai se reunió con su madre.

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