Un popular sitio de culto en Taipei, el Templo Hsin Tien (Xing Tian), anunció el 24 de agosto que a partir del día 26 del mismo mes se quitarán el gran incensario o pebetero y las mesas de ofrendas del recinto, con el fin de ahorrar recursos y ayudar a proteger el medio ambiente.
La decisión va acorde con los rápidos cambios en el medio ambiente y el cada vez más serio problema del calentamiento global; tendencias que según los administradores del templo, nos recuerdan de la necesidad de hacer mejor uso de los recursos, y tratar a todos los seres con benevolencia y compasión.
En vez de ofrecer dulces, frutas y flores, y encender incienso, el templo sugiere que los creyentes muestren sus respetos hacia las deidades sencillamente juntando las manos con un golpe seco y rezando sinceramente.
Al hacer fila para el ritual de shou-ching (shoujing, un tipo de exorcismo), se aconseja a los fieles que no hablen, coman o usen teléfonos celulares, sino que recen de forma devota.
El Templo Hsing Tien, conocido localmente también como Entzukung (Enzugong), promueve el bienestar público mediante obras de caridad, a la vez que procura iluminar el corazón de las personas, mejorar la espiritualidad y crear una sociedad armoniosa.
Para alcanzar esas metas, el templo se esfuerza por promover el concepto de la fe verdadera; instar a la introspección y el respeto hacia las deidades; y ayudar a los creyentes a alcanzar la iluminación.
El Templo también ofrece servicios religiosos tales como rituales de exorcismo, sesiones de oraciones por la paz y explicaciones de los resultados de las adivinaciones.