El espectáculo anual de fuegos artificiales en el edificio Taipei 101, uno de los edificios más altos del mundo, atrajo a más de un millón de espectadores que se aglomeraron en diversos puntos alrededor del rascacielos para festejar la llegada del 2015. Con 218 segundos de duración, la muestra consistió de unos 23 mil cohetes y petardos a lo largo de la estructura del edificio, que detonaron en cuatro etapas; a saber: primavera, verano, otoño e invierno, a una altura de 600 metros. Dichos artificios pirotécnicos, hechos en España, fueron de la más alta calidad y produjeron menor densidad de humo. La fascinante gama de efectos y luces se vio complementada con el uso de láser para producir mensajes en chino e inglés que leían “Ama a Taiwan” y “Feliz Año Nuevo”, así como un fondo musical de estilos oriental y occidental, y la participación de artistas aborígenes que realizaron la narración. El evento, patrocinado por la Fundación iSee Taiwan con sede en Taipei, subrayó el espíritu emprendedor del pueblo de Taiwan. (Foto cortesía del Taipei 101)