Un estudio acerca de la paloma pasajera o paloma migratoria (Ectopistes migratorius [Linnaeus, 1766]) realizado por investigadores de Estados Unidos y la República de China se ha convertido en una de las diez mejores historias de 2014, seleccionadas por la Academia Nacional de Ciencias, con sede en Washington D.C., Estados Unidos.
El artículo “Fluctuaciones drásticas de población explican la rápida extinción de la paloma pasajera”, fue publicado en la edición del 22 de julio del año pasado de la revista Proceedings of the National Academy of Sciences. El mismo recibió una amplia cobertura por los medios de comunicación, incluyendo “Ciclos de auge y caída condenaron a la paloma pasajera” en la revista Nature.
Dirigido por Hung Chih-ming, asociado de postgrado de la Universidad Nacional Normal de Taiwan (NTNU, siglas en inglés); el grupo que escribió el artículo consiste de seis otros académicos de la Academia Sínica; la NTNU; el Museo Nacional de Ciencias Naturales; la Universidad Nacional Chung Hsing; y la Universidad de Minnesota.
Según el estudio, el número de palomas pasajeras en Norteamérica se redujo de un estimado de 3 a 5 mil millones de aves a inicios del siglo XIX a cero en 1914; lo cual contrasta con la noción convencional de que una enorme población constituye un amortiguador contra la extinción. Si bien se acusa a la explotación por el ser humano, el papel de la dinámica de población natural en la desaparición de dicha ave no ha sido muy explorado.
Usando el modelaje de nicho ecológico, así como muestras de ADN extraídas de ejemplares disecados en el Museo Bell de Historia Natural en Minneapolis, el estudio sugiere que la especie no fue siempre superabundante, pero tuvo dramáticas fluctuaciones de su población. Además, las condiciones ecológicas posiblemente también tuvieron que ver con la rápida desaparición del ave.
Citando un estudio realizado por Global Amphibian Assessment, Huang Wen-san, investigador del Museo Nacional de Ciencias Naturales y miembro del grupo, señala que alrededor de 120 especies de animales han desaparecido desde 1980, con un tercio de las especies sobrevivientes enfrentando serias amenazas como resultado de la destrucción de su hábitat.
Según Huang, la tragedia de la paloma pasajera sirve como una advertencia para los seres humanos. “Si seguimos dañando el medio ambiente, estamos destinados a la extinción”.