En la imagen, se observa la grulla siberiana (Grus leucogeranus Pallas,1773) que fue avistada por primera vez en Jinshan el 13 de diciembre de 2014, tras extraviarse en su ruta migratoria. El ave permaneció en Taiwan durante 513 días, atrayendo la atención del público y los observadores de aves; e incluso, contó con un cuidador especial contratado por el Gobierno de la Ciudad de Taipei. Según la Fundación para el Desarrollo de la Ingeniería Ecológica de Taiwan, la grulla podría estar finalmente en camino a casa, tras haberse encontrado el 4 de mayo con tres cigüeñas blancas (Ciconia ciconia Linnaeus, 1758), en su refugio en Jinshan, Nuevo Taipei. La apodada “pequeña grulla blanca de Jinshan” partió ese mismo día en un vuelo con las otras tres aves en dirección a Yeliu, en la costa noreste de Taiwan, y no ha regresado. Se cree que si aprovecha los vientos sureños podría regresar a su hogar junto con las tres cigüeñas en un largo vuelo de 9.600 kilómetros. El 99 por ciento de las grullas siberianas pasan el invierno en la reserva de la parte norteña del Lago Poyang, en la provincia de Jiangxi en China continental. (Foto cortesía de Tibusungu Chen, vía CNA)