«En esta era de la información y la globalización, es cada vez más importante que la gente comprenda mejor a los otros pueblos y países del mundo, y una de las mejores formas de aprender sobre los demás es a través de los medios de comunicación. Sin embargo, aquellos que quieren conocer mejor a la República de China se encuentran con un reto único en este sentido. Pekín ejerce una presión constante para menoscabar nuestra presencia internacional a pesar de aquello por lo que luchamos: libertad, democracia, derechos humanos y una vida mejor para todos; y a pesar de lo que hemos conseguido en estos campos».
Con estas palabras señalaba Chien-jen Chen, director general de la Oficina de Información del Gobierno (GIO, siglas en inglés), la importancia de los Premios de Comunicación Internacional. Los premios fueron instituidos hace diez años con el fin de reconocer y honrar a figuras sobresalientes de los medios de comunicación que se hayan destacado por su contribución en la promoción de los intercambios comunicativos internacionales entre la República de China y otras naciones. La ceremonia de entrega de los premios se celebra tradicionalmente el 10 de octubre, el Día Nacional.
En la última ocasión, sin embargo, dos de los condecorados no pudieron asistir al evento. Con la premisa de que «nunca es demasiado tarde para ofrecer un homenaje», el pasado 26 de marzo se les hizo entrega de las medallas en el centro de prensa de la GIO. Ambos galardonados se han distinguido a lo largo de los años por su divulgación amplia y precisa de los temas que afectan a la República de China en el plano internacional.
El Diario Las Américas es el único periódico de ámbito panamericano editado en español en EE UU, estableciendo un puente de información entre cientos de miles de hispanos residentes en Norteamérica y las naciones de Centro y Sudamérica. Desde esa tribuna, su cofundador y director, Francisco Aguirre, ha defendido la causa de la República de China abogando por su plena participación en la comunidad internacional. Con el mismo fin, Aguirre ha hecho uso de sus múltiples contactos personales y oficiales en la promoción del entendimiento mutuo entre su país, Nicaragua, y la República de China, proporcionando además numerosas ocasiones en las que los representantes chinos pudieron entrar en contacto con sus homólogos de otros países en condiciones de igualdad y respeto.
Aguirre inició su discurso de aceptación recalcando la representatividad de la República de China en el mundo democrático por fundamentarse en la plena libertad personal, política y económica de sus ciudadanos. En sus palabras, también hizo mención al modelo de desarrollo económico de la isla: «Es el resultado de una política continuada de liberalización y expansión internacional de sus actividades comerciales que hacen de Taiwan un auténtico centro de la región Asia-Pacífico, un milagro económico obtenido a pesar del hecho de que organizaciones internacionales como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional persisten en ignorar su robustez».
Francisco Aguirre recibe el Premio de Comunicación Internacional de manos del director general de la GIO, Chien-jen Chen.
Más adelante se congratuló de las sólidas relaciones diplomáticas que la República de China mantiene con su país, Nicaragua, y con muchos otros del continente americano, basadas en un profundo sentimiento de solidaridad y apoyo mutuo, y exhortó a las autoridades a reforzar estos lazos a través del fomento de los vínculos comerciales.
El segundo galardonado, Patrick B. McGuigan, jefe de editorial de The Daily Oklahoman y con una extensa carrera periodística en prensa, radio y televisión, es un conocido adalid de la libertad de expresión y la libertad de prensa. Como tal, ha escrito numerosos editoriales y artículos dedicados a desarrollar un mayor y mejor entendimiento de los problemas a los que se enfrenta la República de China y no ha escatimado esfuerzos al divulgar los logros de ésta en su apertura económica y democrática. Es de resaltar el apoyo expresado en sus artículos sobre la visita del presidente Lee Teng-hui a EE UU, el lanzamiento de misiles a aguas taiwanesas por parte de los comunistas chinos y las primeras elecciones presidenciales directas de la isla.
En su discurso, McGuigan alabó la labor política del presidente Lee y su papel en la unificación de todos los chinos, especialmente los de Taiwan. Y añadió: «Animo al pueblo de esta república a extender el respeto por las libertades humanas individuales junto con la responsabilidad social. Los que algunos en otras tierras llaman ‘valores asiáticos’ deben verse desde la perspectiva superior de los valores humanos. La retórica nunca debe enmascarar a ninguna forma de tiranía».