Mientras que el estudiante de postgrado Chen Chih-wei, de 25 años de edad, se sienta en la sala de espera de un centro hospitalario de belleza, él explica algunas razones por las que la apariencia es importante. “Nosotros, los hombres somos animales visuales. Cuando buscamos una chica para salir, por supuesto que preferimos las bonitas”, dice honestamente. “Creo que la gente con buena apariencia tiene más oportunidades en muchos aspectos de la vida”.
De hecho, parece que es una creencia común que la gente atractiva lleve la delantera en muchos aspectos —relaciones personales, en el trabajo, y quizás sobre todo, en la confianza que tienen en sí mismo. “Si tiene dinero para gastar, y la operación es segura, ¿por qué no hacer los arreglos?” dice Chen.
Con los altos niveles de gastos por parte de los consumidores en Taiwan, más y más taiwaneses están haciendo eso —buscando maneras de mejorar su apariencia mediante la cirugía cosmética y otros tratamientos de belleza. Todo tipo de gente acude a recibir tratamientos, incluyendo el mismo Chen. El y su madre decidieron quitarse las pecas y los lunares a través de un tratamiento con láser. “Deseo hacerme un rejuvenecimiento facial en algunos años cuando se deteriore la condición de mi piel”, agrega su madre.
Para satisfacer la creciente demanda de remedios para la belleza y antienvejecimiento para los hombres, los suministradores de servicios de belleza están apareciendo rápidamente. Sólo a lo largo de la Calle Chung-hsiao Este, en el adyacente sector comercial de Hsinyi, operan alrededor de 40 centros de belleza.
Por ejemplo, Clínica Primavera, utiliza instalaciones modernas importadas de Japón en su clínica de 9.000 pies cuadrados, que incluye una sala que elimina polvo y electricidad estática. La clínica se esmera en tener un ambiente que brinda tranquilidad a los clientes nerviosos. Cuenta con camas para descansar y otras instalaciones para refrescarse y maquillarse después de los tratamientos.
Según Wang Kuan-chung, superintendente de Clínica Primavera, el servicio más popular es el llamado “cosmetología de la hora del almuerzo”, que ofrece un tratamiento de corto tiempo y rápida recuperación que permite a los clientes volver a sus trabajos en la tarde. “La mayoría de nuestros clientes prefieren los tratamientos no invasivos, tales como las inyecciones de Botox o los peelings faciales y otros tratamientos para eliminar arrugas y darle al cutis una apariencia más fresca y saludable”, dice él.
En términos de clientela, Wang ha visto desde viejos hasta jóvenes. Una vez trató a una mujer de 102 años para quitarle las manchas del rostro. Por lo general, las mujeres, y las empleadas de oficina financieramente independientes en particular, representan la mayor parte de los clientes.
La gama de servicios ofrecida por la clínica refleja las preocupaciones de sus clientes. Combatir los estragos del tiempo con cuidados cosméticos y tratamientos antienvejecimiento es sólo una parte de la historia. La clínica también ayuda a sus clientes a mejorar la apariencia natural a través de los procedimientos quirúrgicos. Las fuentes de insatisfacción parecen ser principalmente la nariz y los ojos. Wang dice que los procedimientos relacionados con los párpados representan alrededor del 50 por ciento del negocio total, y la rinoplastia abarca aproximadamente el 20 por ciento.
La cirugía de los párpados agrega un pliegue al párpado, lo que da a los ojos mayor tamaño y un aspecto más occidental, y la rinoplastia busca frecuentemente lograr una nariz más alta. Estas tendencias son el resultado de la penetración de los estándares occidentales de la belleza. Aunque la apariencia occidental sigue siendo un factor en el concepto local de la belleza, una apariencia más “asiática” está volviéndose popular. “Hace una década, en vista de la profunda influencia de la occidentalización, mucha gente quería tener una nariz más prominente, párpados con doble pliegue y cejas más altas”, dice Wang. “Pero ahora la gente aprecia la belleza oriental, y desea que el resultado sea lo más natural posible”.
Nuevas fuentes de encanto están influenciando el concepto de belleza de la gente. Por ejemplo, la locura de las telenovelas, películas y estrellas de Corea, ha resultado en un aumento en reconstrucción facial que hace la cara más pequeña y más delgada, dando un parecido a la “apariencia coreana”.
A pesar de la mayor diversidad de modelos estéticos, una aspiración común que permanece igual con el paso del tiempo es mantenerse delgado. “La delgadez es belleza—eso es lo que aún piensa la mayoría de la gente”, dice Wang. “Se extiende a todo, desde el rostro, los brazos, la cintura hasta las pantorrillas”. Quizás la única parte donde el tamaño pequeño no es buena idea, sea el pecho, y los procedimientos para aumentar los senos alcanzan actualmente alrededor de 5.000 al año en Taiwan.
Belleza a bajo precio
El creciente profesionalismo de los centros de cirugía cosmética de Taiwan, combinado con las ventajas relativas del precio, podrían ser una receta para una industria próspera. En promedio, la cirugía cosmética en Taiwan es alrededor de 20 por ciento más barata que en Corea del Sur, y entre 60 y 70 por ciento más barata que en Japón y Estados Unidos.
Chen Tien-mu, secretario general de la Sociedad de Cirugía Plástica Estética de Taiwan (TSAPS, siglas en inglés), indica que la cirugía de los párpados, por ejemplo, cuesta alrededor de NT$20.000 (US$600) en Taiwan, en comparación con entre US$1.500 y $2.000 en Estados Unidos. “Además de los precios más bajos, las técnicas quirúrgicas de Taiwan son competitivas con aquellas de Corea del Sur, Estados Unidos y Europa”, dice. “Asimismo, la densidad de hospitales y clínicas en Taiwan ofrece mayor acceso y conveniencia”.
Chen cree que la cirugía cosmética está cobrando auge. Durante la primera época, los clientes se limitaban a los artistas y mujeres de la vida nocturna, pero hoy día, la cirugía plástica es popular entre gente de diferentes grupos de edad y profesiones. El dice que la práctica es tan común ahora que mucha gente se siente menos inhibida que antes. “En el pasado, la gente que se sometía a cirugía plástica se escondía por un tiempo y no se lo contaba a nadie. Pero ahora muchos de ellos son muy abiertos respecto al tema”, dice. “La gente ha comenzado a pensar en la cirugía plástica como una forma de mejorarse a sí mismo, en vez de un acto de vanidad”.
Los avances en los procedimientos quirúrgicos también han contribuido a que la cirugía plástica sea menos intimidante. Chen cree que la endoscopia —las operaciones que utilizan solamente un instrumento diminuto para penetrar el cuerpo— está destinada a jugar un papel cada vez más importante en el futuro cercano. “La mayoría de los pacientes aún temen someterse a una operación y sus riesgos relacionados”, dice. “La cirugía endoscópica involucra solamente una invasión mínima en el cuerpo y por lo tanto, la recuperación es rápida”.
Debido a las ganancias potenciales de la cirugía plástica, aquellos centros más anticuados de destrezas quirúrgicas, hospitales, han tratado de no quedarse atrás y comenzaron a ofrecer tratamientos cosméticos.
Casi todos los hospitales y centros médicos principales en Taiwan poseen ahora departamentos dedicados a estas cirugías cosméticas, y muchos doctores jóvenes están escogiendo el campo como una carrera respetable en medicina, y una buena manera de hacerse famoso como médico. Los doctores residentes que tienen seis años de experiencia de trabajo pueden someterse a los exámenes y el proceso de obtener licencia para convertirse en cirujano plástico.
En 1994, Chen y otros médicos fundaron TSAPS, una organización profesional que espera aumentar la calidad de la cirugía plástica en Taiwan, establecer estándares profesionales y compartir información. Después de tres años de experiencia de trabajo, los doctores con licencia para practicar cirugía plástica pueden presentar sus credenciales en la sociedad y solicitar ser miembro. Hasta la fecha, el grupo ha aceptado 164 miembros y celebra seminarios regularmente para tratar los asuntos pertinentes a la belleza. “En general, tengo mucha confianza en el progreso técnico de los cirujanos cosméticos de Taiwan”, dice Chen. “Ellos deben ser considerados una fuente de orgullo para el país”.
Renovación de los hospitales
Para los hospitales, el salto de la cirugía reconstructiva a la cosmética no es muy largo. Realizar cirugía reconstructiva para las víctimas de accidente y corregir fisuras de paladar han sido desde hace mucho tiempo algo rutinario en los hospitales. Las organizaciones como la Fundación Craniofacial Noordhoff, llamada así en honor de Samuel Noordhoff, un antiguo residente de Taiwan y pionero de la cirugía de labio leporino y fisuras de paladar, ha ofrecido fondos para cirugía reconstructiva desde su fundación en 1990. El Hospital Conmemorativo Chang Gung, que trabaja conjuntamente con la Fundación Noordhoff, está ahora clasificado como uno de los mejores centros de entrenamiento médico del mundo en cirugía plástica. Ya en 1985, había establecido un centro de belleza estética.
“Con nuestra sólida base en cirugía plástica, somos capaces de hacer un buen trabajo en cirugía cosmética”, dice Chang Cheng-jen, jefe de división de Cirugía Plástica General en Chang Gung. “Desde hace alrededor de 20 años, ya hemos sentido la demanda, y establecimos el primer centro de láser en la isla”.
Además, los hospitales tienen más ventajas que las clínicas. Los numerosos equipos médicos pueden atender pacientes, y los hospitales pueden darse el lujo de adquirir equipos costosos que están fuera de las posibilidades de las clínicas privadas pequeñas. “Debido a los obstáculos financieros, la mayoría de los practicantes que tienen sus propias clínicas no pueden costear la compra de equipo caro. A veces, sólo pueden comprar un solo aparato que se usa para cubrir diversas necesidades”, dice. “Sus recursos humanos son también limitados, lo que dificulta el tratamiento de complicaciones”.
La amplitud de destrezas ofrecidas en un hospital y los recursos disponibles para los médicos, ayuda a los hospitales en la competencia por los clientes. Después de todo, dice Chang, como un centro médico, su hospital no puede realizar anuncios publicitarios para promover los servicios de belleza, ni puede adoptar una estrategia flexible de precios en medio de la intensa competencia del mercado.
A pesar de estas limitaciones, Chang Gung está prosperando. En enero, el hospital sumó a sus centros de cirugía estética en la ciudad y el distrito de Taipei, un tercer centro, el Centro Médico de Cosmetología Vascular. El nuevo sitio ofrece cirugía plástica, dermatología, cuidado de la piel y tratamientos de medicina china tradicional. El centro colabora también con las universidades cercanas en la investigación biotecnológica en la búsqueda de aplicaciones para la cirugía cosmética y otros tratamientos de belleza.
El nuevo centro ocupa más de 18.000 pies cuadrados y cuenta con equipo médico moderno, así como áreas de spa, alojamiento y gimnasio. Chang cree que la ubicación del centro le agrega un rasgo idílico que lo diferencia de sus rivales en el centro de la ciudad. El dice que es privado y ofrece hermosas vistas.
El éxito de los servicios de cirugía plástica de Chang Gung y la creciente demanda por tratamientos de belleza están incentivando a otros hospitales a seguir la misma dirección. Por ejemplo, el Hospital Adventista de Taiwan inauguró el pasado septiembre su Centro de Belleza Restauradora. “El centro de belleza es actualmente la unidad más importante en nuestro hospital”, dice Liu Ming-wei, jefe de cirugía plástica en el Hospital Adventista, “no sólo porque el mercado está creciendo, sino porque también necesitamos un negocio modelo que nos permita mantener nuestras otras operaciones”.
Según Liu, los pagos flotantes del Programa Nacional de Seguro de Salud (NHIP, siglas en inglés) han colocado presión financiera adicional en muchos centros médicos en Taiwan. Para compensar, los hospitales han estado desarrollando servicios que requieren de pago directo por los pacientes para tratamientos generalmente no esenciales como los de cirugía cosmética. “Por una parte, queremos servir a los clientes que nos piden cosmetología”, dice. “Y por otra, queremos utilizar los ingresos que se generan por este servicio para servir a nuestros pacientes en NHIP”.
Un viaje y un retoque
Liu cree que Taiwan tiene una buena oportunidad de generar mayores ingresos para los hospitales si atrae a los clientes extranjeros. “En comparación con los países vecinos como Japón y Corea del Sur, nuestra cirugía cosmética es bastante competitiva, tanto en términos de costo como en técnicas”, dice.
Chen Tien-mu, del TSAPS, piensa que las prácticas médicas taiwanesas tienen una base natural de clientes en China, donde la cirugía cosmética y los tratamientos de belleza están en gran demanda, pero las técnicas no siempre son buenas. Una vez que los lazos de transporte directo se establezcan y más ciudadanos chinos puedan viajar aquí, la industria de la belleza de Taiwan recibirá un gran impulso, dice.
Chang Cheng-jen indica que el nuevo Centro Médico de Cosmetología Vascular de Chang Gung se encuentra a sólo 40 minutos del Aeropuerto Internacional Chiang Kai-shek en Taoyuan, convirtiéndolo en una parada conveniente para los clientes extranjeros. La Clínica Primavera ya ha comenzado a mezclar su negocio de la belleza con la recreación, al trabajar en equipo con su afiliada Resort Ciudad Primavera, un popular hotel que ofrece aguas termales.
Con la cooperación de la agencia de viajes International Holiway, con sede en Hong Kong, la Clínica Primavera y Resort Ciudad Primavera han introducido paquetes diferentes de tres días y dos noches, que incluyen inyecciones de Botox y Perlane, alojamiento, baños de aguas termales y transporte. Los paquetes turísticos cuestan entre NT$21.999 (US$657) y $45.399 ($1.355) por persona. La agencia de viaje estima que este año, el paquete traerá por lo menos 1.000 visitantes de Hong Kong y Macau.
Pronto, los turistas en búsqueda de belleza podrán encontrar la satisfacción que han hallado gente como Lin Pei-chen, de treinta y ocho años de edad, quien retocó su confianza con una cirugía cosmética de párpados. “Me acababa de divorciar, y decidí quererme más a mí misma y hacer lo que me gusta”, dice ella. “Simplemente quería cambiarme un poquito y comenzar una nueva vida”.