Cuando el famoso psicólogo norteamericano B. F. Skinner, escribió este aforismo en 1964, nunca se imaginó la glosa que el futuro le añadiría. Hoy día, más y más gente regresa a las aulas después que los últimos vestigios de su educación formal han desaparecido de su mente. Es probable que su memoria sea menos retentiva, su audición menos aguda y su mente un poco más lenta que la última vez que estuvieron detrás de un pupitre escolar; sin embargo, llevan consigo a la escuela una extensa gama de experiencias humanas y prácticas, que enriquecen el campo de la educación para adultos en Taiwan.
El Gobierno de la República de China quiere hacer del aprendizaje una experiencia de toda la vida para los residentes de la isla. ¿Cuáles son sus planes?, ¿hasta dónde se ha llegado? y, ¿qué piensa el público, ya sean estudiantes o empleadores, sobre todo esto?