30/04/2024

Taiwan Today

Taiwán Hoy

Recursos limitados, costos crecientes

01/07/1990
Después de que Taiwan fue retor­nada al Gobierno de la República de China al finalizar la Segunda Guerra Mundial, el Gobierno estableció varios tipos de escuelas para entrenar personal médico, incluyendo escuelas e institutos de entrenamiento médico. Al final de los años 40 y principios de los 50, sólo habían dos escuelas públicas de medi­cina, el Colegio de Medicina de la Defensa Nacional y la Facultad de Medicina establecida en la Universidad Nacional de Taiwan. Pero varias escuelas privadas de medicina también fueron establecidas durante este período, incluyendo el Colegio Médico de Taipei, el Colegio Médico de Kaohsiung, el Colegio Médico de Chungshan y el Colegio Médico de China. Dado a las limitadas instalaciones educativas públicas, la mayor parte del personal médico era en­trenado en las escuelas de medicina privadas. Los departamentos de sanidad lo­cales y el Hospital Provincial de Taiwan también jugaron un papel esencial en la administración de atención médica. Debido a que durante aquel tiempo las enfermedades contagiosas eran comunes, hasta 1970 el Gobierno enfocó la mayor parte de su atención al control de dichas enfermedades. De 1970 a 1985 el Gobierno empezó a prestar más atención a la brecha entre las ciudades y las áreas rurales con res­pecto a los recursos médicos disponibles. En sus numerosos viajes a las áreas ru­rales, el fallecido Presidente Chiang Ching-kuo, quien entonces era primer ministro, se enteraba con frecuencia de que los departamentos de sanidad locales no poseían doctores internos. Con el fin de encontrar una solución rápida a este problema, el Gobierno aumentó su parti­cipación en el entrenamiento de personal médico. A pesar del incremento en los re­cursos médicos humanos, aún existía una escasez de doctores en las áreas rurales. Los primeros blancos de ataque de los críticos fueron los departamentos de sanidad locales. Debido a que la jurisdic­ción de estos centros había sido trasladada a los gobiernos de los poblados; ambos, la posición y la remuneración de los empleados del departamento de sani­dad eran bajos, y pocos médicos estaban dispuestos a trabajar bajo estas condi­ciones. Como resultado, casi una cuarta parte de todos los departamentos de sani­dad no ten’ian doctores internos. Después de consultar con el Gobierno Provincial de Taiwan, las autori­dades del Departamento de Sanidad in­tentaron aliviar esta situación asignando cierto número de doctores del ejército a los departamentos de sanidad locales. De 1972 a 1976, un total de 3.095 doc­tores militares jubilados recibieron licen­cias médicas después de aprobar exá­menes especiales. Aunque este programa ayudó a alivar la escasez de médicos en las áreas rurales, inmediatamente surgie­ron críticas sobre el descenso en la cali­dad de las atenciones médicas. A la vez, el Hospital Provincial de Taiwan estaba siendo criticado por el deterioro de sus edificios e instalaciones. Subsecuentemente, el Gobierno fundó el Colegio Médico Yang-ming para entrenar doctores en un programa de siete años bajo el erario público y, a partir de 1982, empezó a aceptar estu­diantes graduados de bachillerato. (Ac­tualmente, 200 estudiantes de medicina financiados públicamente se gradúan anualmente, y de los 18.000 doctores de Taiwan, casi 1.000 recibieron becas mé­dicas del Gobierno). También fueron es­tablecidos otros programas para mejorar la situación de la sanidad. A partir de 1978, un plan de cuatro años fue puesto en marcha para reforzar las atenciones médicas y la sanidad en las áreas rurales. El contenido principal de este programa se centró en la construcción de hospitales y edificios del departamento de sanidad. Dado a que aún no existía suficiente personal médico para satisfacer la de­manda, el Gobierno inició en la década de los ochenta programas para establecer centros de práctica en grupos y para mejorar los servicios de los hospitales pro­vinciales y municipales. Una caracterís­tica de ambos programas fue que el 80% de las ganancias podía ser utilizado para bonos destinados a los doctores y el per­sonal, lo que hacía más atractivo el tra­bajo en estas instituciones. Entre los sala­rios y los bonos, los doctores que trabaja­ban en los hospitales provinciales y municipales obtenían un salario anual de aproximadamente US$72.000. En la actualidad hay 103 centros de prácticas en grupo en Taiwan, y un hospital provincial o municipal en cada ciudad provincial. El Gobierno también empezó a construir o expandir grandes hospitales, incluyendo el Hospital de la Universidad Nacional de Taiwan, el Hospital General de Veteranos y el Hospital Municipal de Taipei. A la vez, los hospitales privados entraron en un período de rápido creci­miento en dos direcciones: los hospitales grandes tal como el Chang Gung y el Mackay se ampliaron aún más, y al otro lado de la balanza, se abrieron muchos hospitales más pequeños con menos de 50 camas cada uno. Antes de los nuevos esfuerzos del Gobierno durante el período de expan­sión en los años 70, los hospitales pri­vados eran los principales centros de atención médica en Taiwan. Para 1985, empezaron a surgir nuevos cambios en la actitud del Gobierno hacia las atenciones médicas, especialmente debido a que la expansión de los recursos médicos ya había alcanzado los objetivos y pers­pectivas para la década de 1985-1995 en términos de cantidad y distribución. Los planificadores gubernamentales empezaron a reconocer que existía un exceso de médicos en las áreas urbanas e inversiones excesivas en la construcción de grandes hospitales. En el pasado, los doctores con práctica local tenían los con­tratos más lucrativos y controlaban la mayor parte de los recursos médicos. Pero en las últimas décadas, ha habido un cambio de doctores en las áreas ur­banas y una tendencia hacia afiliaciones más estrechas con hospitales y centros médicos regionales. Por lo tanto, los hos­pitales más grandes han empezado a con­trolar el grueso de los recursos de sani­dad de Taiwan. El plan del Gobierno para ajustar la estructura de los recursos médicos empa­rejará el nivel de la calidad de las aten­ciones médicas de las área rurales con el existente en las urbanas. El objetivo es que los pacientes dependan en una red coordinada de recursos en el campo de las atenciones médicas. El sistema incluye el establecimiento de un sistema para la clasificación de los hospitales, un sistema de referencia médica, y una mejor administración en la renovación, expansión y cosntrucción de los hospi­tales. Por ejemplo, en el último caso, la construcción de hospitales con más de 100 camas ahora debe de tener la previa aprobación del Departamento de Sanidad. Ahora, Taiwan está entrando en un período de un limitado suministro de re­cursos para la atención médica dado a los crecientes costos médicos y las demandas de parte del personal médico por salarios más elevados. Los recursos financieros personales para cubrir los gastos médicos son limitados, haciendo que el proyec­tado programa nacional de seguro médico sea una prioridad en los años no­venta y después. El programa de seguro estará diseñado para fomentar, dentro de lo posible, el servicio a los pacientes a nivel local, disminuyendo así la presión sobre los principales centros médicos ex­cepto en casos de gravedad. Idealmente, después de que la red de atención médica sea adecuadamente estructurada, la gente ya no tendrá que hacer largas colas para recibir atención médica no urgente en los principales hos­pitales. Pero mientras esto ocurre, ambos, hospitales y clínicas locales ten­drán que ajustarse a sus funciones. Des­pués de que el programa nacional de seguro médico entre en vigor, los grandes hospitales ya no podrán obtener la mitad de sus ingresos a través de los pacientes no hospitalizados, como sucede ahora. Algunos hospitales tales con el Chang Gung y el Mackay, ya han pre­visto este nuevo problema y han empe­zado a cambiar la forma en que operan. Pero han encontrado dificultades en su intento para adaptarse. Por ejemplo, la estrategia inicial del Hospital Mackay era reducir los sueldos de los doctores y dis­minuir la gama de servicios para los pacientes no hospitalizados. Los doctores protestaron contra tal medida y ganaron, pero tal vez la victoria sólo será temporal dado a los próximos cambios en el sistema. El nuevo programa de seguro médico también requerirá algunos cam­bios de actitud entre el público en gene­ral porque el Gobierno adoptará una serie de restricciones sobre los pagos cubiertos por los seguros médicos. La gente que ahora está protegida bajo los programas de pólizas destinados a los funcionarios públicos y obreros reciben atenciones médicas sin costos adicio­nales, excepto por una insignificante cuota para registrarse. Las estadísticas muestran que las personas que poseen estas pólizas visitan clínicas para pa­cientes no internados con un 60% más de frecuencia y se internan en hospitales con un 30% más de frecuencia que las personas que no poseen tales seguros. Sin duda alguna, parte de esta diferencia surge porque las personas de ingresos más reducidos no buscan atenciones médicas innecesarias al menos que tengan asistencia financiera. No obstante, otros buscan atención que en realidad no nece­sitan, y el problema de desperdicio es evidentemente serio. Además, dos ter­ceras partes de los residentes de Taiwan no buscan atención médica en un hospi­tal en particular; les gusta "andar probando." Cuando el sistema nacional de seguro social entre en vigor, estas prác­ticas aparentemente serán reducidas. Si el programa nacional de seguro médico tiene éxito sin llevar al Gobierno a la quiebra, el desarrollo de los hospitales y clínicas estará estrechamente regulado, pero también será necesario controlar a los asegurados para poder prevenir el abuso del sistema. Después de que el programa nacional de seguro social sea lanzado en el área de Taiwan en 1995, los pagos médicos serán centralizados, y la sociedad pronto se dará cuenta de que los fondos disponibles para los cuidados médicos están estricta­mente limitados. Los hospitales tendrán que descubrir maneras para reducir los costos y aumentar la eficiencia al dispen­sar atenciones médicas. Deberán mejorar la administración y cultivar el conoci­miento acerca de los costos. Taiwan se enfrenta una situación di­ferente a aquella experimentada por las naciones desarrolladas en la ejecución de un programa nacional de seguro social: Estados Unidos y las naciones europeas tuvieron más tiempo para planificar y preparar. Algunos países europeos empe­zaron a ofrecer seguro social a nivel na­cional en las décadas de los 50 y 60. Los costos no empezaron a ascender estable­mente sino hasta fines de los años 70, y consecuentemente tuvieron dos décadas para hacer frente a los problemas rele­vantes al control de los costos. Sin em­bargo, Taiwan no disponde de este tiempo. Cuando los seguros médicos na­cionales entren en efecto, el Gobierno se verá obligado a luchar a la vez con el asunto de limitados recursos médicos. No se espera que la tarea sea fácil. □

Popular

Más reciente