El grupo en mención, participó por espacio de cuatro semanas en varias actividades tales como estudio y discusión de las tradiciones, política, historia, economía y lenguaje chinos, realizando -para finalizar el seminario- un viaje de una semana alrededor de toda la isla de Taiwan.
Con objeto de recoger sus impresiones tanto acerca del seminario como de nuestro país, China Libre Magazine se entrevistó con cuatro de los participantes latinoamericanos -destacados profesionales de sus respectivos países-: Silvia Tejeda de Jiménez y Silvia Herrera Meléndez de Guatemala, licenciadas en Letras y Psicología, respectivamente; Susana Aizaga H., ingeniero en petróleo, del Ecuador y Eloy Alfaro, abogado, de Costa Rica.
Luego de preguntarles acerca de las motivaciones que cada uno de ellos tuvo para realizar este viaje así como para participar en dicho seminario, nos respondieron -entre otras cosas- que estaban interesados en conocer las características de este país así como también para ponerse en contacto, desde el punto de vista antropológico, con un pueblo de una cultura aparentemente diferente a la de ellos, -los habitantes del continente asiático-.
"Siempre nos ha interesado la cultura oriental," manifestaron; "particularmente la cultura china, sobre todo, en lo que respecta al pensamiento de Confucio. La persona que visita la República de China por primera vez, creyendo equivocadamente venir a encontrarse con 'ranchos de bambú' como los de las antiguas pinturas chinas, con 'pagodas' o con carruajes jalados por personas como los que se solían usar antes en China, indudablemente pensarán que viajaron desde lugares quizás remotos para venir a ver lo mismo que en otros países'. Sin embargo, después de conocer mejor el país, se da uno cuenta, entre otras cosas, que el aspecto material de la República de China es el de una ciudad con características extraordinariamente modernistas y que la juventud china tiene una conciencia de patria profundamente arraigada, pero con una dualidad: conservar lo tradicional a la par de lo moderno -lo cual no resulta fácil-. Realmente, preservar la tradición a la par del desarrollo moderno de una ciudad es difícil, puesto que al desarrollarse un país, paulatinamente va occidentalizándose, perdiendo poco a poco, su tradicional fisonomía típicamente oriental."
Al preguntarles con respecto a la lección aprendida en el seminario, nos expresaron que les habla interesado enormemente la forma en que tratamos de hacer comprender a los extranjeros por qué Taiwan es la República de China, argumentando para ello motivos y aspectos que, además de ser muy humanos, son también importantes, porque dan a entender lo que otros países podrían lograr y alcanzar con el ejemplo de "los hombres de soya" como son los chinos, con su espíritu de piedra eterno e invencible -una piedra que no sabemos si es preciosa, pero sí que está hecha de un material que no admite marcas- con un temple y un espíritu indoblegable y trabajador que indudablemente puede servir de ejemplo digno de imitación para otros pueblos, cuyos "hombres de maíz" muchas veces quizás más fuertes en cuerpo, lo son menos en cuanto a fortaleza interior y sobre todo, en cuanto a afán y ambición de superación, que es lo que caracteriza siempre al pueblo chino y es lo que ha hecho merecer a la República de China el título de "la primera República de Asia."
La clausura del seminario -organizado por El Centro Internacional de Actividades Juveniles- estuvo presidida por el doctor Ou-yang Hsun, presidente de la Universidad Nacional de Cheng-chi y por el doctor Chen-chew Pan, director general de los Cuerpos Juveniles de China.
Se inició con la entrega de los diplomas a todos los participantes y se premió a los que participaron en los diferentes concursos organizados por los Cuerpos Juveniles de China, sobre trote y poesía en mandarín. Posteriormente, la Licenciada Silvia de Jiménez -quien participó en su calidad de catedrática de Literatura Española de la Universidad Francisco Marroquín de la República de Guatemala y quien fue designada por parte de sus compañeros de seminario para pronunciar el discurso de despedida y agradecimiento dijo entre otras cosas:
"Muchas gracias a cada uno de los participantes por la demostración de su afecto y amistad; muchas gracias al grupo de secretarios de los Cuerpos Juveniles de China, quienes en todo momento se preocuparon por nosotros y trataron de hacernos sentir como en nuestro hogar durante el tiempo que pasamos en la República de China.
"Hemos vivido en su país y con ustedes solamente unas pocas semanas, tiempo que sin embargo, ha sido suficiente para poder comprender la dualidad que alienta el espíritu de su gente; su permanente y devota adhesión a su milenaria tradición y el reto que enfrentan de poder realizarse como un país desarrollado en los campos de la industria, agricultura y principalmente en su organización social y económica.
"Nos hemos dado cuenta de su esfuerzo por dar a conocer al mundo y especialmente a los países en vías de desarrollo que, cuando a un pueblo lo une la voluntad, el trabajo responsable y contínuo así como la unidad en el patriotismo, una nación puede crecer y desarrollarse rápidamente.
"Hoy, la fraternidad nos ha llamado a estar juntos y nuestra generación ha abierto el camino para que las futuras puedan, a través de la amistad y el respeto mutuos, encontrar un mejor entendimiento del mundo. Las puertas están abiertas y nos corresponde a nosotros la responsabilidad de mantenerlas siempre así.
"Nos llevamos impreso en nuestros corazones el recuerdo de vuestra amable y por demás proverbial hospitalidad y en nuestras mentes un mejor, más completo y positivo conocimiento de este esforzado y gran pueblo."
N. de R.: Nuestros agradecimientos a la Lic. Silvia de Jiménez por su valiosa colaboración con respecto a la clausura