La República de China ha logrado una participación pragmática en la recién concluida conferencia climática de las Naciones Unidas, llevando a cabo diálogos con más de 35 países sobre los asuntos relacionados con el clima global, aun cuando no es miembro de las Naciones Unidas, reveló un funcionario de la Administración para la Protección del Medio Ambiente (EPA, siglas en inglés).
Los intercambios con otros países durante la 22ª Reunión de las Partes (COP 22, siglas en inglés) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático en Marrakech, Marruecos, ha sido sin inconvenientes y libres de la intervención de Pekín, manifestó Chien Huei-chen, directora ejecutiva de la Oficina para la Gestión de la Reducción de Gases con Efecto Invernadero de la EPA.
Chien señaló que 12 de los aliados diplomáticos de la República de China también hablaron a favor del país durante la Conferencia, en la que Taiwan participó en muchas actividades paralelas a la misma.
“Participamos en el evento a través de un “enfoque técnico”, afirmó Chien, agregando que los resultados fueron más fructíferos de lo esperado.
En cuanto a los diálogos con 35 países, los mismos generaron medidas concretas y sostenibles, agregó Chien.
Entre éstas, se encuentra un mecanismo para calcular conjuntamente las emisiones de dióxido de carbono, que puede ser verificado por terceras partes, según Chien.
Además, la empresa estatal Taiwan Power Co., la refinería CPC Corp., y la Corporación China del Acero, pudieron participar en más actividades durante esta conferencia que en años anteriores, lo que Chien considera que podría mejorar la capacidad de adaptación de las mismas al cambio climático.