El 27 de enero, el Centro de Operaciones del Gobierno Central para Epidemias (CECC, siglas en inglés) informó que la política gubernamental lanzada en enero que requiere que los pasajeros procedentes de China se sometan a una prueba rápida de COVID-19 por saliva cuando lleguen a Taiwan se extenderá hasta el 6 de febrero.
Dicha política, que originalmente estaba planificada para realizarse del 1 al 31 de enero, se aplica a todos los viajeros que lleguen en vuelos directos de China a Taiwan, así como a quienes transiten desde las islas aledañas de Kinmen y Matsu.
Asimismo, los pasajeros que salgan de China y entren en Taiwan a través de Hong Kong y Macao deben presentar hasta el 6 de febrero un informe que confirme una prueba de reacción en cadena de la polimerasa (PCR, siglas en inglés) con resultado negativo en las 48 horas previas al embarque de su vuelo en el lugar de salida, o una prueba rápida de antígenos negativa en las 24 horas previas al embarque de su vuelo en el lugar de salida.
El CECC hizo hincapié en que, si bien la tasa positiva de las pruebas de PCR por el método de saliva en los pasajeros entrantes se redujo del 25 al 2 o 4 por ciento, es probable que el flujo masivo de personas durante las vacaciones del Año Nuevo lunar aumente el riesgo de una mayor propagación del virus, agregó el CECC, por lo que todavía considera necesario realizar estas pruebas a fin de monitorear el desarrollo de la epidemia.
La política de pruebas del CECC se dirige principalmente a los ciudadanos taiwaneses que regresan y a los chinos que viajan a Taiwan por negocios, estudios o para visitar a sus familias, ya que los turistas chinos aún tienen prohibido ingresar a la nación.
El CECC exhortó a los pasajeros entrantes a cooperar con las normas actuales de detección y prevención antiepidémicas, haciendo uso de los reactivos de detección rápida que se entregan gratuitamente en los aeropuertos y observando su estado de salud durante el período de siete días de automonitoreo.
Todos los pasajeros entrantes deben seguir el protocolo de cuarentena observando un período de autocontrol de salud de siete días, durante el cual deben haberse realizado una prueba rápida con resultados negativos dentro de las 48 horas antes de salir de su residencia, indicó el CECC.
Aquellos que den positivo deben someterse a un período de aislamiento de cinco días, seguido de un período de automonitoreo de siete días o hasta que den negativo, remarcó el CECC.