El presidente Chen Shui-bian hizo un llamado a la unidad nacional, así como a que Taiwan sea incluido en un sistema de seguridad internacional. En su discurso en la ceremonia oficial que se llevó a cabo el 10 de los corrientes en la Plaza frente al Palacio Presidencial para conmemorar el 95º Aniversario de Fundación de la República de China, Chen señaló que "todos podemos tener puntos de vista opuestos pero no debemos destruir la unidad nacional".
Las celebraciones del Día Nacional, conocido también como Día Nacional del Doble Diez, de este año fueron alteradas en parte por una manifestación popular en los alrededores del sitio por decenas de miles de personas que exigían la dimisión de Chen por supuestas acusaciones de corrupción. La ceremonia oficial fue presidida por Wang Jin-pyng, presidente del Yuan Legislativo.
Momentos antes de la ceremonia, el Mandatario recibió las felicitaciones de los dignatarios extranjeros que asistieron a las celebraciones del Día Nacional del Doble Diez.
Entre los dignatarios extranjeros que llegaron a Taiwan para participar en las festividades, se encontraban los presidentes de Honduras, José Manuel Zelaya Rosales; y de Santo Tomé y Príncipe, Fradique Bandeira Melo de Menezes; así como el gobernador general de Belice, Colville N. Young.
En el Salón de Actos de la Presidencia, el presidente Chen, junto con la primera dama, Wu Shu-jen; y la vicepresidenta Lu Hsiu-lien, recibieron a más de 200 invitados de honor a las diez de la mañana.
Durante el acto, Chen expresó su sincero agradecimiento a los invitados de honor por su presencia en Taiwan para asistir a las celebraciones del Día Nacional. También estuvieron en Taiwan para la ocasión festiva el vicepresidente de Nicaragua, José Alfredo Gómez Urcuyo; el presidente del Parlamento de Malawi, Louis Chimango; y el presidente del Senado de Swazilandia, Gelane T. Zwane.
De igual forma acudieron a presentar su saludo al Mandatario los miembros del Cuerpo Diplomático y jefes de las representaciones extranjeras acreditadas en Taipei, encabezados por el embajador de Burkina Faso, Jacques Sawadogo, decano del Cuerpo Diplomático. Los diplomáticos extendieron las felicitaciones a la nación en su día en representación de sus respectivos gobiernos.
Al terminar el acto protocolario, Chen se apersonó a la tarima de honor frente a la multitud congregada para presentar su discurso del Día Nacional, donde renovó su compromiso de salvaguardar el sistema constitucional y mantener la estabilidad nacional. "Es mi deber ineludible y también la demanda del pueblo", indicó el Presidente al referirse a dicho compromiso.
Frente a la manifestación iniciada por la oposición exigiendo su dimisión, Chen acusó a la misma de ser el más reciente episodio de una "viciosa rivalidad" entre los partidos políticos en el país.
El Mandatario señaló que durante toda su carrera política, ha luchado firmemente en contra de la corrupción. "Cuando fui alcalde de Taipei, nunca mostré debilidad ante la corrupción, sino que traté tales casos en forma estricta y rápida. Tras ser presidente, he persistido en mi determinación. Cualquiera que viole la ley, indistintamente de su posición social o su relación conmigo, será sujeto a la aplicación más estricta de la sanción legal de la nación. Todos los ciudadanos son iguales ante la ley, y el Presidente y los miembros de la familia del Presidente no son una excepción", dijo Chen en su intervención.
Afirmando que la corrupción es un asunto que debe ser tratado por la Justicia, Chen dijo que el sistema judicial hace hincapié en las evidencias y el proceso adecuado. "Tengo certeza de que la vasta mayoría del pueblo, si bien demanda que se combata la corrupción, no aprueba los juicios por la opinión pública basados en los reportajes de tabloides. Quienes guardan grandes expectativas en los esfuerzos anti-corrupción deben colocar su confianza en el sistema judicial, confiar en el sistema judicial y apoyar el sistema judicial, permitiendo que tenga el espacio para realizar independientemente las investigaciones y juicios", agregó.
Chen también instó a la comunidad internacional a revisar seriamente todos los defectos y puntos débiles del actual mecanismo de seguridad colectiva del Este Asiático, aseverando que Taiwan debería ser incluido en dicho mecanismo.
En su discurso, el presidente Chen condenó enérgicamente a Corea del Norte por una prueba nuclear subterránea que se realizó un día antes, describiéndola como una grave amenaza a la paz y a la estabilidad del Este Asiático. "Tal prueba constituye un acto malicioso que va en contra de los esfuerzos desplegados por la comunidad internacional para prevenir la proliferación de las armas de destrucción masiva. Esta es la segunda vez que Pyongyang ha amenazado la paz y la estabilidad de la región este año por medio de una demostración de su poderío militar, después de sus pruebas del lanzamiento de misiles en el Mar de Japón en julio pasado", manifestó Chen. "A pesar de que el mecanismo diplomático de los Seis Países, conformado por Corea del Sur, Corea del Norte, Estados Unidos, Japón, China y Rusia, ha buscado negociar una solución a las tensiones en la Península de Corea, el progreso ha sido limitado debido al fuerte boicoteo por parte de Pyongyang", recalcó el Presidente.
Instando a la comunidad internacional a poner mayor atención a la seguridad del Estrecho de Taiwan, el Mandatario pidió que Taiwan sea admitido en el sistema de seguridad colectiva regional con el fin de asegurar la estabilidad y la paz de toda la región de Asia y del Pacífico. "Como miembro de la comunidad democrática global, Taiwan está dispuesto a colaborar estrechamente con la comunidad internacional en la salvaguardia de la paz mundial", concluyó diciendo Chen.
Con respecto a las relaciones a través del Estrecho de Taiwan, el presidente Chen Shui-bian señaló que no podría darse un importante avance en tales relaciones mientras China continental siga bajo el régimen totalitario de un solo partido.
"No importa cuán vívidas sean las relaciones económicas y comerciales, y los movimientos entre las personas de los dos lados del Estrecho de Taiwan; mientras China continental siga gobernada por la dictadura de un partido, nunca se podrán eliminar los obstáculos y las barreras entre los dos lados; y será extremadamente difícil alcanzar un avance significativo en la naturaleza básica de las relaciones a través del Estrecho", aseveró el Mandatario.
Chen terminó su intervención en medio de la aclamación de los presentes, quienes repitieron su llamado para que Taiwan se levante y siga adelante.