03/05/2024

Taiwan Today

Noticias de Taiwán

Ahora más que nunca, Taiwan debe estar en la OMS

06/01/2000

Cuando un terremoto con 7,3 grados de magnitud sacudió la parte central de Taiwan el 21 de septiembre de 1999, el mundo entero reconoció inmediatamente que era necesario un esfuerzo concertado y rápido para salvar vidas y limitar los daños colaterales. La comunidad internacional respondió pronto con su generoso apoyo y asistencia experta para localizar a los sobrevivientes. En este sentido, el Gobierno y pueblo de la República de China están sumamente agradecidos. La llegada de especialistas en rescate de todo el mundo fue un poderoso recordatorio del impulso humano básico de unirse frente a la adversidad.

Existen lecciones importantes que debemos aprender de esta experiencia. Las diferencias de rutina palidecen en significado en tales tiempos. Durante los momentos más críticos de la respuesta ante un desastre, resulta claro que todos compartimos las mismas preocupaciones.

De hecho, ese es el mismo espíritu que está presente en las actividades cotidianas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cuya misión es garantizar el bienestar físico del ser humano en el mundo mediante la coordinación de los recursos médicos. Por esta razón, ella trabaja diariamente para salvar vidas y limitar los daños causados por epidemias, ante la ausencia de acontecimientos que llaman la atención tales como terremotos, huracanes o erupciones volcánicas.

Este fue el mismo espíritu que mostraron los especialistas internacionales en búsqueda y rescate que trabajaron a la par del personal de emergencia de Taiwan –compartir desinteresadamente los recursos y las experiencias para beneficio de todos.

La asistencia y experiencia de la OMS será muy bien recibida en Taiwan en el período subsiguiente al seísmo. Mi país ha completado la primera fase de las tareas de reconstrucción, pero el próximo paso involucra proporcionar vivienda para las víctimas y continuar los esfuerzos para contener la amenaza a la salud que ha acarreado el sismo y sus repercusiones. La mayor amenaza para el bienestar de los sobrevivientes ahora ya no son los edificios con estructuras inseguras, sino la trastornada infraestructura de salud pública que surge inevitablemente como resultado de un desastre de tal escala.

Una gran cantidad de ganado pereció en los derrumbes. Los sobrevivientes que esperan la terminación de las viviendas temporales están especialmente vulnerables a los males causados por estar a la interperie, a condiciones de apiñamiento y a las aguas contaminadas. Todo ésto amenaza la salud pública en el área de desastre, en el resto del país e incluso, más allá.

Bajo tales circunstancias, cualquier país recurriría a la OMS para consultar y coordinar con expertos. Pero, cuando se trata de Taiwan, la OMS tiene que valerse de canales privados y no oficiales para ofrecer ayuda. La República de China fue excluida de esta organización en 1972, y la Organización de las Naciones Unidas se encuentra bajo presiones de Pekín para mantener dicha situación, a pesar de los cambios ocurridos desde entonces en el mundo.

Afortunadamente, la OMS pudo usar canales indirectos en esta ocasión para evaluar la magnitud del problema y ofrecer su ayuda. Por ejemplo, donó 50 mil dólares estadounidenses a la Cruz Roja para ser utilizados en la tarea de asistencia. El Gobierno y pueblo de la República de China aprecian de sobremanera este gesto de preocupación.

También afortunadamente, el resultado de la evaluación de la OMS fue que los recursos médicos y de socorro en desastres de Taiwan son adecuados para enfrentarse al reto causado por el terremoto. Sin embargo, la importante misión a largo plazo de la OMS sigue comprometida por la exclusión de Taiwan. La participación directa y sin obstáculos en los foros y programas de cooperación internacional en materia de salud es crítica, debido al mayor potencial, hoy día, de la diseminación fronteriza de varias enfermedades infecciosas dados los crecientes contactos comerciales y turísticos.

Al no ser miembro de la OMS, la República de China no tiene acceso a información con respecto a los reglamentos mundiales sobre las pruebas de laboratorio de los bioproductos. Tampoco puede participar en el desarrollo de los estándares para bioproductos. Y sus bioproductos no son reconocidos por otros países. Esta es una forma particularmente desafortunada de iniciar el siglo XXI, cuando esta tecnología tendrá un papel tan importante que desempeñar durante las próximas décadas.

El masivo terremoto de Taiwan demostró dramáticamente cuán fuertes son nuestros lazos con los otros países en la comunidad internacional y cuán insignificantes se tornan los asuntos políticos en tales momentos. Si bien no existen formas de recobrar las vidas perdidas o de restaurar la belleza de las áreas más afectadas, sí es posible sacar algún provecho de la adversidad. Taiwan ha presentado una solicitud para tener la posición de observador en la OMS, una organización humanitaria donde las preocupaciones médicas y de salud pública a nivel global deben tener prioridad sobre los asuntos políticos ordinarios.

No hay un momento más apropiado que ahora para eliminar las barreras artificiales que están obstaculizando la coordinación de los recursos globales de la OMS para garantizar la seguridad de las personas de todos los países. La exclusión de Taiwan en la OMS no sólo compromete los intereses de salud pública de los 22 millones de habitantes en Taiwan, sino que también representa una pérdida para el mundo entero.

Las exigencias del desastre han demostrado que sus prioridades no políticas van acordes al corazón humano. Escuchemos nuestros corazones. Existe un papel para Taiwan en la OMS que hará del mundo un lugar más sano y seguro.

Popular

Más reciente