Nueve aliados diplomáticos de la República de China han propuesto conjuntamente una moción instando a la Organización de las Naciones Unidas a que considere su representación en el organismo mundial, anunció el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Según el Ministerio, los nueve países presentaron la moción en una carta dirigida al secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, el 14 de los corrientes.
La moción pidió a la Asamblea General de las Naciones Unidas (UNGA, siglas en inglés) que examine una vez más la Resolución No. 2758 aprobada en 1971, la cual obligó a la República de China a abandonar su escaño en las Naciones Unidas para que fuese ocupado por China continental.
También pidió a la Secretaría de las Naciones Unidas que incluya la moción en la agenda de la sesión plenaria de 1997 de la UNGA, la cual se inaugurará en septiembre, dijo el Ministerio.
Un memorándum explicatorio que detalla por qué ellos han presentado la moción fue adjuntado a ésta.
El documento dijo que la Resolución No. 2758, que privó al pueblo de la República de China del derecho de participar en las actividades dentro del sistema de la ONU, aparentemente violó el espíritu de la Declaración Mundial sobre los Derechos Humanos.
Señaló que la República de China tiene una población de 21,5 millones, mayor que la de dos terceras partes de los estados miembros de las Naciones Unidas. Con un producto nacional bruto de 260 mil millones de dólares estadounidenses, la República de China es ahora la vigésima economía más grande del mundo y la décima cuarta potencia comercial.
La República de China satisface todos los requisitos para ser miembro de la ONU, pero ha sido excluida del sistema de dicho organismo durante más de 25 años. "Las Naciones Unidas no deberían continuar pasando por alto esta situación sumamente excepcional", dijo el memorándum.
Añadió que la República de China ocupa un sitio estratégico. Su estabilidad y prosperidad son críticas para la paz y seguridad en la región de Asia y del Pacífico.
"Pedimos a la Asamblea General que vuelva a examinar lo inadecuado de la Resolución No. 2758 y que la anule con el fin de devolver a los 21,5 millones de personas en la República de China el derecho legítimo a participar en actividades dentro del sistema de la ONU", indicó el memorándum.
Los nueve signatarios fueron Burkina Faso, Nicaragua, Gambia, Granada, el Commonwealth de Dominica, Guinea Bissau, Senegal, las Islas Salomón y Suazilandia.
Este ha sido el quinto año consecutivo en que los aliados de la República de China han pedido a las Naciones Unidas que considere la iniciativa de ingreso de Taipei.
El ministro de Relaciones Exteriores, John H. Chang, dijo durante una conferencia de prensa que la República de China no intenta retar el actual escaño ocupado por China comunista en la ONU ni crear una separación permanente de China.
"Deseamos que los chinos comunistas abandonen sus medidas coercitivas contra nosotros", dijo. Añadió que la campaña de la República de China para ingresar a la ONU es parte de sus esfuerzos para alcanzar la unificación final de China.
Chang afirmó que la participación paralela de los dos lados del Estrecho de Taiwan en las Naciones Unidas contribuirá a forjar la confianza mutua y a crear un ambiente favorable para la unificación nacional.