En su mensaje de Año Nuevo, el presidente Ma Ying-jeou resaltó sus deseos de que la República de China pueda beneficiarse más con la reciente apertura y expansión de los enlaces marítimos, aéreos y postales entre Taiwan y China continental, a la vez que fortalezca su presencia económica mundial, y defienda su soberanía y dignidad nacional.
Aparte de enfocar en la situación económica y financiera del país, Ma también hizo hincapié en aspectos que causan preocupación en el pueblo, tales como el problema del desempleo. Al respecto, el Mandatario instó a los patronos y dueños de empresa que se abstengan de despedir a sus empleados en un momento de recesión económica global. En vez, los empresarios deben trabajar conjuntamente con sus empleados para salir de las actuales dificultades económicas.
Ma prometió que el Gobierno hará todo lo posible para proteger los intereses de la clase trabajadora y continuará promoviendo diversos programas de generación de empleo para enfrentar el problema.
En su discurso de 20 minutos, pronunciado en el Salón de Actos de la Presidencia en la mañana del 1º del presente mes, Ma se refirió también a las relaciones a través del Estrecho de Taiwan, la reestructuración del Gobierno, la reforma del servicio civil y la protección del medio ambiente.
Refiriéndose a la situación económica, Ma garantizó al público que la actual Administración continuará implementado los 12 proyectos de desarrollo i-Taiwan, conjuntamente con otros paquetes de estímulo económico para reconfigurar la competitividad de la República de China y crear nuevos valores económicos esenciales en Taiwan.
En su primer discurso oficial como presidente, Ma Ying-jeou señaló que durante el año pasado el desarrollo de Taiwan atravesó por varios momentos de vital importancia, incluyendo la transferencia del poder entre partidos políticos, la revisión del Comité de Supervisión Financiera, el reacercamiento entre los dos lados del Estrecho y el agravamiento de la crisis financiera mundial.
"Frente a la presente recesión económica mundial, debemos convertir la presión externa en una fuerza motriz para las reformas internas, transformando la estructura económica de Taiwan, reforzando sus sistemas políticos y elevando el nivel de vida de nuestro país para que nuestros ciudadanos puedan gozar de una calidad de vida más alta", dijo Ma en su mensaje de Año Nuevo.
Con el fin de elevar la competitividad de Taiwan en la comunidad internacional, el Gobierno procurará alcanzar tres metas económicas: transformar a Taiwan en un centro global de innovación, convertir a la isla en un centro de comercio en la región de Asia y el Pacífico, y desarrollar a Taiwan como sede de operaciones para las empresas taiwanesas, señaló el Presidente. Para alcanzar tales propósitos, es menester preparar mejor los recursos humanos, realizar una reforma educativa, así como procurar un mayor desarrollo tecnológico y cultural.
Si bien Ma reconoció que la apertura de los tres enlaces antes mencionados podría generar nuevos desafíos a través del Estrecho, también podría generar nuevas oportunidades.
En momentos cuando las relaciones a través del Estrecho se expanden y profundizan, Ma también instó por la continuación de los esfuerzos para defender la soberanía de la República de China y la dignidad de Taiwan; a la vez que se orientan simultáneamente las relaciones a través del Estrecho por la dirección positiva de su realidad democrática y cultural.
En su mensaje, el Mandatario también prometió lanzar una reforma del sistema del servicio civil durante el recién iniciado año, con miras a mejorar los servicios públicos, realzar la eficiencia gubernamental y nutrir una nueva cultura civil que resalte la neutralidad administrativa y mantenga la interferencia partidaria fuera de sus operaciones. A la vez, instó a todos los funcionarios públicos a colocarse en la posición de los ciudadanos comunes al momento de redactar las políticas o implementar las medidas.
Tomando en cuenta que el desarrollo económico del país no puede depender únicamente del comercio y las inversiones a través del Estrecho, Ma reveló que su Administración introducirá varias medidas para impulsar la demanda interna, en un esfuerzo por revitalizar la economía y reforzar la estructura económica de Taiwan.
El tradicional despliegue de fuegos artificiales del Taipei 101 puso el toque peculiar de las celebraciones del Año Nuevo en la ciudad de Taipei. (Fotos de CNA)
El Presidente aseguró a la nación de que contando con una sólida estructura económica, Taiwan triunfará sobre los malos tiempos. Al respecto, Ma indicó que la República de China posee amplias reservas en divisas extranjeras, baja tasa de deuda y riesgos empresariales, empresas altamente flexibles y bancos con baja proporción de cuentas morosas; factores que permitirán que Taiwan resista las presiones y los riesgos externos mejor que muchos otros países asiáticos.
Comentando sobre el mensaje de Año Nuevo pronunciado por el presidente Ma Ying-jeou, Lin Tzu-chia, experto en Economía de la Universidad Nacional Chengchi, dijo que a corto plazo, el Gobierno deberá acelerar los pasos para tratar de atraer a las empresas nacionales que operan en el extranjero a retornar a Taiwan y establecer sus centros de operaciones comerciales en la isla.
Lin sugirió que el Gobierno convierta varias áreas en Taiwan en "zonas especiales de negocios", en donde se ofrezcan incentivos tributarios y de adquisición de terrenos para atraer a los inversionistas taiwaneses que se encuentran en el exterior a retornar a Taiwan para hacer inversiones, como lo lograron los parques científico-industriales del país en el pasado.
Taiwan mantiene su ventaja geográfica y económica para convertirse en una isla de libre comercio y un centro de operaciones en la región de Asia y del Pacífico a largo plazo, dijo Lin.
A pesar del impacto de la recesión económica mundial, la población de Taiwan en general participó plenamente en la víspera del Año Nuevo en diversas actividades para despedir el año viejo. Las principales ciudades de la isla organizaron festejos al aire libre para realizar la tradicional cuenta regresiva de fin de año.
Convertido en una tradición hace algunos años, la cuenta regresiva y el espectacular derroche de fuegos artificiales en el Taipei 101, uno de los edificios más altos del mundo, atrajo a decenas de miles de espectadores que se reunieron en los alrededores de la imponente estructura con muchas horas de anticipación.
El espectáculo de este año en el Taipei 101 fue desafiado por un despliegue de fuegos artificiales de similar magnitud en la gran tienda por departamentos Core Pacific City. Gran parte del público tuvo que dividir su atención entre las dos enormes fuentes luminarias que alumbraron momentáneamente el cielo nocturno de la ciudad de Taipei, augurando bienestar para el pueblo y prosperidad para la nación.