Taiwan Today

Las declaraciones del secretario general de la SEF, Cheyne Chiu, respecto a la necesidad de un reajuste en la política de los "Tres Noes", han levantado polémica en Taiwan. Diversas voces se han alzado para apoyar o rebatir la propuesta de modificar los principios que por más de una década han regido la relación entre la República de China y el régimen comunista chino. Los "Tres Noes" (ni contactos, ni compromisos, ni negociaciones) fueron implementados por el ex presidente Chiang Ching-kuo en 1978, en respuesta a la demanda de Pekín de realizar "Tres Intercambios", es decir, iniciar vínculos directos de transporte, correo y comercio. En esos años, las autoridades comunistas chinas hicieron distintas ofertas para "atraer" a Taipei e iniciar negociaciones sobre la reunificación nacional. Sin embargo, tales propuestas venían acompañadas de condiciones ina­ceptables para el Gobierno, por lo que fueron rechazadas. Ese patrón de conducta ha seguido repitiéndose, debido a que Pekín insiste en darle carácter local al Gobierno en Taipei, se resiste a abandonar la amenaza de usar la fuerza contra Taiwan y sigue poniendo obstáculos a la partici­pación de la República de China en el terreno internacional. Pero las autoridades nacionales, atentas a los cambios en el mundo y las necesidades de la población, no se han quedado atrás. Uno de los pasos más importantes ha sido el levantamiento de la prohibición de viajar a China continental, lo cual ha derivado en un creciente intercambio entre ambos lados del Estrecho. Las visitas a familiares han estimulado el turismo, el interés cultural y, por supuesto, los negocios. Así surgió la necesidad de conversar sobre los proble­mas que acarrean los intercambios civiles. Taipei dio el primer paso con la creación de la intermediaria SEF, gesto que fue respondido por Pekín con el estableci­miento de la ARATS. Delegados de ambos organismos se han reunido para tratar temas como el contrabando, los crímenes que involucran a residentes de ambas partes y la inmigración ilegal de continentales a Taiwan. Las autoridades comunistas chinas, no obstante han intentado en cada ocasión poner temas políticos sobre la mesa, se han encontrado con una respuesta clara por parte de los representantes de Taipei: para hablar sobre tales asuntos, Pekín primero debe reconocer al Gobierno de la República de China como una entidad política de igual nivel. Empapado de pragmatismo, Chiu ha propuesto ahora que el Gobierno revise el principio de "no contactos" y permita que altos funcionarios se entrevisten con autori­dades comunistas chinas. A su juicio, los "Tres Noes" ya cumplieron su misión histórica y es momento de avanzar. Sin embargo, el Gobierno prefiere no adelantar etapas, ya que la política hacia el continente señala explícita­mente que, antes de darse la partida a los contactos oficiales, Pekín debe mostrar respeto hacia Taipei. En las conversaciones entre los jefes de la SEF y la ARATS, que tendrán lugar en Singapur a mediados de abril, se tratarán temas específicos de certificación de documentos y correspondencia indirecta extraviada. Pero también se hablará sobre el establecimiento de un canal de comunicación entre ambas partes, para darle expedición a los vínculos. Es de esta forma, con calma y prudencia, como mejor puede Taiwan negociar con China continental.