Taiwan Today

El gobierno de la República de China ha insistido en fomentar el crecimiento de la democracia constitucional en el país para poder en un futuro garantizarle a sus habitantes, la libertad y el bienestar, señaló recientemente el Yuan Ejecutivo. El bastión de la libertad en el área de Taiwan se encuentra enfrentando constantes amenazas por parte de los comunistas chinos, por lo que el gobierno de la República de China ha concentrado sus esfuerzos por mantener y preservar la democracia con el objeto de salvaguardar la seguridad nacional, agregó. Esta política por parte de nuestro Gobierno ha logrado hacer posibles grandes realizaciones y logrado una diferencia positiva en la vida de todos los habitantes que se encuentran bajo dicho gobierno, prosiguió. Bajo el espíritu de la democracia constitucional y el gobierno de la ley, señaló, todas las personas son respetadas y están completamente protegidas por parte de la ley. Por el contrario, son castigadas de acuerdo con la ley, en caso de cometer infracciones a las mismas. Desde que el gobierno de la República de China se trasladó hacia Taiwan en 1949, bajo la dirección del ex-presidente Chiang Kai-shek, ha ido reforzando gradualmente el gobierno constitucional por medio de elecciones para gobiernos locales celebradas bajo programas de auto-gobierno. Durante los últimos 35 años, el Gobierno ha promulgado y puesto en vigor reglamentos para llevar a feliz término el sistema de autogobierno en la provincia de Taiwan, así como la elección de jefes de gobierno locales. En 1980 la promulgación de los reglamentos de elección de líderes de gobierno locales, así como su nombramiento durante el período de la rebelión comunista ha hecho avanzar a la nación en forma más amplia en su ruta democrática. Las elecciones han sido: cinco para miembros parlamentarios suplentes para el gobierno central, varias para el gobierno provincial de Taiwan, gobiernos de las ciudades de Kaohsiung y Taipei, así como de otras ciudades y municipios, además de las efectuadas para la elección de alcaldes, magistrados y gobernadores. El éxito alcanzado en estas elecciones ha probado la determinación por parte del Gobierno por perseguir los más altos intereses en beneficio del pueblo, para que pueda así considerársele una real y verdadera democracia.