Taiwan Today

En éxito alcanzado en las elecciones del Yuan Legislativo a finales del año pasado, ha sido considerado como una victoria para la democracia en la República de China, preparando el terreno para la realización completa del sistema democrático en nuestro país. Pero lo más importante es que se ha probado que la democracia se acomoda a las necesidades del pueblo chino, quien, al igual que todos los pueblos del mundo, anhelan la libertad individual, la igualdad de oportunidades y el bienestar social que ofrece la democracia. En China, la práctica de la democracia ha tenido relativamente una corta historia. Fue el Dr. Sun Yat-sen quien primero afirmó que la democracia debería implantarse en China, instituyendo así el Principio de la Democracia como uno de los Tres Principios del Pueblo. Con esta meta en mente, pudo guiar a los revolucionarios para derrotar a la dinastía Ching. En los primeros años de la República de China, existieron numerosos obstáculos para la implantación de la democracia en el país. Las continuas luchas entre los contendientes señores de la guerra, dentro de otras cosas, ocasionaron tal cáos en el país, que las condiciones que podrían conducir hacia el desarrollo de la democracia eran bastante inciertas. En las siguientes décadas, la situación no fue muy diferente debido a la invasión japonesa en China y a la destrucción y los cambios provocados por la misma. A partir de 1949, se habían formado dos sociedades a ambos lados del Estrecho de Taiwan. En el Continente, la implantación del comunismo ha hecho imposible que allí se practique la libertad. En Taiwan, la democracia ha ido creciendo cada vez más: las elecciones locales y para el gobierno central se han realizado en forma regular, en reñidas competencias dentro de los candidatos; la prensa y el pueblo han tenido la suficiente libertad para criticar al gobierno y cada vez más y más personas se encuentran disfrutando de servicios médicos gratuitos y de otros beneficios derivados del bienestar social. El pueblo en el Continente permanece pobre y desprovisto de libertad personal, no existiendo libertad de prensa. Aquellos que critican al gobierno son reducidos a prisión o enviados a las regiones fronterizas para hacer trabajos forzados. Mientras que Pekín afirma que el pueblo bajo su gobieno recibe servicios médicos gratuitos, el nivel de la medicina en el Continente es tan bajo que los habitantes cuando están enfermos, difícilmente pueden lograr obtener el tratamiento médico necesario. Los niveles de vida del pueblo en Taiwan son por lo menos, seis veces mayores que los del pueblo en el Continente. La brecha actual tiende a ampliarse cada vez más. Estas diferencias existentes a ambos lados del Estrecho son debidas principalmente a la presencia y a la ausencia de la democracia, respectivamente. A la democracia le toma mucho tiempo crecer y madurar. El gobierno democrático en la República de China podrá no ser considerado como un modelo, pero el gobierno ha prometido mantenerse en la ruta de la completa democracia, a pesar de las difíciles pruebas que en la actualidad se encuentra enfrentando nuestra nación. Esto es digno de elogio. La práctica de la democracia es una garantía para el éxito de nuestro país en cuanto a la reunificación de China. Tanto el gobierno como el pueblo de la República de China debe realizar los máximos esfuerzos para acelerar el proceso democrático con el objeto de darle ímpetu al movimiento en pro de la democracia en el Continente, emprendido por los campeones de la libertad.