Taiwan Today

En la ciudad de Asunción, Paraguay, el General Wang Sheng, presentó una copia de las cartas credenciales que lo acreditan como embajador en dicho país tanto al ministro de Relaciones Exteriores, Dr. Carlos Saldívar, como al Presidente de dicha nación latinoamericana, General Alfredo Stroessner, en ceremonia realizada en días pasados. En dicha oportunidad, el ministro Saldívar conversó con el General Wang acerca de las impresiones que obtuvo en nuestro país durante la visita que realizó en 1976 cuando fue presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, diciendo que había quedado profundamente impresionado del alto grado de desarrollo alcanzado por la República de China. El General Wang, por su parte, expresó su admiración por la política del gobierno paraguayo, firme e incondicional en contra del comunismo, tanto del gobierno como del pueblo. Gracias a la actitud firme e inteligente de su gobernante, el gobierno paraguayo habrá de jugar un papel importante en la historia de la lucha anticomunista; añadió que para él, constituía un enorme placer y un gran honor ocupar el cargo de embajador de nuestro país ante dicha nación y espera aprender mucho del General Stroessner a quien considera un gran hombre de Estado. Enfatizó también la cordialidad que priva en las relaciones de ambos países, los cuales tienen ún ideal común de libertad, democracia y justicia social, además de mantener una firma política en contra del comunismo, lo cual ha permitido a las dos naciones disfrutar de estabilidad política y prosperidad económica. Elogió finalmente a Paraguay, expresando que su política anticomunista es lo que ha llegado a colocarlo como uno de los países más importantes no sólo en el continente americano, sino también en el mundo entero. Antes de su partida hacia dicho país sudamericano, el General Wang Sheng fue despedido con un almuerzo en su honor, ofrecido por el Encargado de Negocios del Paraguay en la República de China, Dr. Aníbal Raúl Casal, al cual asistieron el ministro de Defensa, Soong Chang-chih y otros altos funcionarios, en compañía de sus respectivas esposas.