01/05/2024

Taiwan Today

Noticias de Taiwán

Como ve un corresponsal a China Comunista: "¿Por qué no podemos ser como Taiwan?" - Por Julia Sun Su-ming

16/07/1982
Dos corresponsales extranjeros -Fax Butterfield del New York Times y Richard Berstein de Time- han publicado este año dos libros sobre China Continental: "China: Vivir en el mar amargo (China: Alive in the Bitter sea) y "Desde el centro de la tierra (From the center of the earth), respectivamente.

Ambos han tratado de presentar lo que ellos consideran un cuadro objetivo de los comunistas chinos de hoy. Estos libros son honestos, sus autores hablan con toda la franqueza de sus descubrimientos, lo cual no pudieron hacer mientras se encontraban en el Continente, ya que la honestidad total les llevaría seguramente a la expulsión. Ellos revelan claramente lo que han hecho los comunistas al pueblo chino del Continente y descubren que el comunismo ha sido un fracaso completo y que el pueblo está desilusionado con este sistema y quiere salir del país. El pueblo quiere otro estilo de vida, uno que sea más justo y, sobre todo, uno que tenga más éxito.

Estas informaciones son valiosas, aunque no dicen nada nuevo. Los periódicos, las revistas y los libros de muchas partes han venido diciendo al mundo la triste historia del Continente por más de tres décadas.

Los norteamericanos y otros extranjeros se inclinan a ignorar lo que hemos informado o lo consideran como pura propaganda. Ahora ellos tienen la oportunidad de escuchar a Butterfield y a Berstein contándoles las mismas cosas y posiblemente les presten más atención. Si así lo hacen, tendrán más cautela sobre su creciente relación con los comunistas chinos, quienes no representan ni a China ni a su pueblo.

Vamos a analizar primero el libro de Butterfield. Esta obra es extensamente anecdótica. Cuando el Sr. Butterfield habla del pueblo, se refiere principalmente a quienes viven en las ciudades. No se entera muy bien de lo que relamente ocurre en los pueblos pequeños y no pretende mostrar que lo sabe.

El es joven y como muchos de sus compañeros periodistas, posee poco conocimiento de lo que era China antes de 1949. Por consiguiente, acepta la ficción ampliamente difundida por los comunistas sobre la China antes de 1949. La idea consiste en que los Nacionalistas eran corrompidos, el pueblo tenía hambre y los comunistas lo liberaron. Curiosamente, sin embargo, se pregunta: "Si eso es verdad, ¿Por qué los Nacionalistas lo han hecho tan bien en Taiwan después de la caída del Continente en manos de los comunistas?" Desgraciadamente, no se esfuerza realmente por lograr la respuesta.

Del libro de Butterfield sobre China, los lectores ordinarios de Occidente van a tener la impresión de que el Continente es un lugar terrible,. Por ejemplo:
-La revolución cultural fue horrorosa. ¿ Cómo pudieron los chinos hacer esto a los chinos aún en nombre del comunismo?
-Las relaciones personales y el soborno son los únicos métodos para conseguir cualquier cosa o tenerla hecha en el Continente.
-El dominio comunista sobre el pueblo es demasiado fuerte para deshacerlo, tanto como resultado de los controles como por el miedo del pueblo a otro levantamiento político.
-La burocracia es pesada y ineficiente. El derroche del material y de recursos humanos lleva el atraso del Continente.
-La fe en el comunismo chino ha sido destrozada.

No obstante, Butterfield escribe: "Lo que más molesta a mis amigos chinos es (a pesar de la alta densidad de población que Butterfield no menciona) el modelo de Taiwan." Taiwan sigue prosperando. Si no es un modelo de libertad y democracia, "ha celebrado calurosamente las elecciones locales y sus ciudadanos son libres para viajar al exterior como turistas o como estudiantes." Y algo importante: Los mismos comunistas han conocido la importancia de los Tres Principios del pueblo. Aún más: "Lo que los jóvenes como yo quieren saber es ¿por qué la China Continental no puede actuar tan bien como Taiwan?" le pregunta un amigo a Butterfield.

El periodista-escritor no habla mucho sobre las relaciones entre los Estados Unidos y la China Roja. Su libro trata del pueblo y de los comunistas chinos, no es un estudio de las relaciones internacionales.

Pero este libro debe servir como una advertencia a los dirigentes norteamericanos y de otras partes del mundo libre para evitar cualquier relación intratable con un régimen que es inestable, poco seguro y tan evidentemente aborrecido por su propio pueblo.

Popular

Más reciente