Las celebraciones del Día Nacional del Doble Diez contaron con la presencia de decenas de miles de personas que comenzaron a llenar los alrededores de la Zona Especial de Poai, desde las ocho de la mañana. Un número récord de compatriotas chino-taiwaneses de ultramar retornaron a Taiwan para participar en las festividades patrias.
Las actividades se iniciaron con el ingreso de la Banda Militar Conjunta de la República de China y la Guardia de Honor de las Fuerzas Armadas. Tras rendir su tributo a la tarima de honor, la formación castrense fue acompañada por la entrada de las bandas de marcha y escoltas estudiantiles del Primer Colegio de Señoritas de Taipei y el Colegio de Señoritas Jingmei. Las actuaciones preliminares culminaron con un número ejecutado por niños del Jardín de Infantes WeKIDS.
Antes de iniciarse el desfile cívico-militar, el presidente Ma Ying-jeou, y la primera dama, Chow Mei-ching; recibieron en el Salón de Actos del Palacio Presidencial a unos 500 dignatarios extranjeros que presentaron sus saludos al Mandatario, así como sus felicitaciones a la República de China en ocasión de celebrar su Centenario.
El público pudo ver por primera vez un vehículo aéreo no tripulado para apoyo táctico a las operaciones de las FF.AA.
El protocolo formal de las celebraciones del Día Nacional se inició inmediatamente con la entonación de las gloriosas notas del Himno Nacional de la República de China, que fue dirigida por Chen Shu-chu, una vendedora de verduras del sudoriental distrito de Taitung, que ha sido reconocida por sus actividades filantrópicas. Chen contó con el acompañamiento de un coro también proveniente de ese distrito, integrado por aborígenes, ciudadanos de las etnias hoklo, hakka y de otras provincias de China continental, simbolizando la integración étnica en Taiwan.
Al terminar de cantar el Himno Nacional, todos los presentes presentaron un saludo de tres reverencias ante la bandera y la foto del Dr. Sun Yat-sen, fundador de la República de China.
Seguidamente, el presidente Ma Ying-jeou pronunció el discurso del Día Nacional, titulado Un siglo de lucha, una Taiwan democrática; donde destacó que la “República de China ha estado floreciendo en Taiwan hace más de 60 años, irradiando su vitalidad a todos los rincones del mundo, y continuará haciendo lo mismo en el futuro”.
El Mandatario también instó a China continental a avanzar con valentía hacia el establecimiento de una nación democrática, libre y con una distribución equitativa de la riqueza, siguiendo el ideal del Dr. Sun Yat-sen, fundador de la República de China.
En su mensaje a la nación, el presidente Ma mencionó a varios ciudadanos que han contribuido en forma notable a la nación, incluyendo al lanzador de las Ligas Mayores de Beísbol en Estados Unidos, Wang Chien-ming; la mundialmente famosa golfista Yani Tseng, el Dr. Lien Jih-ching, que ha ayudado a erradicar la malaria en muchos países africanos, así como el director de cine Wei Te-sheng, que ha producido varios éxitos de taquilla.
La danza del dragón es un número que no puede faltar en todas las festividades importantes en Taiwan.
En la tarima de honor se encontraban la Primera Dama, así como el vicepresidente Vincent C. Siew; el primer ministro Wu Den-yih; el presidente del Yuan Legislativo, Wang Jin-pyng; el presidente del Partido Pueblo Primero, James C. Soong, y muchas otras personalidades políticas del país.
Unas 50 delegaciones extranjeras, con unos 1.500 integrantes, arribaron a Taiwan para participar en las celebraciones del Centenario de la República de China. Entre los participantes destacaron los jefes de Estado de Burkina Faso, Guatemala, Nauru y Palau, así altas autoridades provenientes de otros países del mundo.
Entre los invitados distinguidos procedentes de los países latinoamericanos se encontraban el presidente Alvaro Colom Caballeros, de Guatemala; los vicepresidentes Luis Federico Franco Gómez, del Paraguay, y Rafael Francisco Alburquerque de Castro, de la República Dominicana; la designada presidencial de Honduras, María Antonieta Guillén de Bográn; el presidente de la Asamblea Legislativa de El Salvador, Othon Sigfrido Reyes Morales; y el ex-vicepresidente de Ecuador, Blasco Peñaherrera Padilla.
También estuvieron presentes los presidentes Blaise Compaoré, de Burkina Faso; Marcus Stephen, de Nauru; y Johnson Toribiong, de Palau; así como el ex-primer ministro de Japón, Taro Aso; el ex-secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld; y el ex-presidente de Lituania, Valdas Adamkus, entre otras personalidades.
La parte estelar de las celebraciones del Día Nacional fue el desfile militar, que incluyó el vuelo en formación de un total de 71 aeronaves de diferentes tipos, que pasaron frente a la tarima de honor. Entre los aviones que volaron se encontraban cazas F-16, IDF y Mirage 2000-5, que fueron precedidos por un escuadrón mixto de helicópteros.
La demostración aérea culminó con el paso de una formación de siete AT-3 del Grupo de Acrobacia Aérea Tigres del Trueno, que sobrevoló frente al Palacio Presidencial echando columnas de humo de color azul, blanco y rojo.
Los “gigantes y cabezones” dieron el toque foklórico a las actividades cívicas en honor al Centenario de la República de China.
Simultáneamente con el paso de la escuadrilla de los Tigres del Trueno, comenzó el desfile en tierra, con el paso de una escuadra motorizada de la Policía Militar, con motocicletas pesadas que se desplazaban lentamente en perfecta formación.
Un total de 168 vehículos terrestres pasaron frente a la tarima de honor en el Palacio Presidencial, presentando sus saludos al presidente Ma, comandante supremo de las Fuerzas Armadas. El desfile militar en honor al Centenario de la República de China resaltó de manera especial el papel de las Fuerzas Armadas en las operaciones de rescate y salvamento en casos de desastres naturales.
Aparte de la participación de una muestra de vehículos aéreos no tripulados; diversos tipos de misiles, incluyendo el Tien-kung 3, un misil anti-aéreo diseñado y hecho en Taiwan; equipos de lanzamiento del misil de capacidad avanzada Patriot-3; también participaron en la parada varios tipos de vehículos para situaciones de emergencia, incluyendo camiones para el tendido de puentes de emergencia, puestos móviles de comando y control, camiones para descontaminación y otros.
Unidades de hombres ranas de la Infantería de Marina, así como miembros de los destacamentos de Fuerzas Especiales del Ejército y la Policía Militar desfilaron frente al Palacio Presidencial montados en varios camiones.
Tras el paso del material rodante, una aeronave pasó por encima de la tarima de honor desde la cual saltaron un total de doce miembros de la Unidad de Entrenamiento de Paracaidistas del Centro de Entrenamiento de las Fuerzas Aerotransportadas del Ejército.
A pesar de las adversas condiciones del viento del momento, los paracaidistas saltaron desde una altura de cinco mil pies maniobrando sus vistosos paracaídas tricolores para caer en la plaza frente al Palacio Presidencial, ganándose nutridos aplausos de los presentes.
Estas hermosas señoritas reflejan la armonía étnica que existe ahora en Taiwan, donde toda la población ha sido participe de la prosperidad lograda en los últimos decenios.
La exitosa demostración de los paracaidistas constituyó parte de las celebraciones del Centenario del Doble Diez. Esta fue la primera vez en muchos años, ya que en ocasiones anteriores, el número fue suspendido a última hora debido a las pobres condiciones climatológicas del momento.
En su discurso, el presidente Ma señaló que el país ha mejorado la capacidad combativa de sus soldados, ha adquirido armamento avanzado en otros países y produce gran parte de sus propias armas. También prometió que el Gobierno seguirá reforzando las capacidades defensivas del país para salvaguardar la soberanía de la República de China y mantener la seguridad en el Estrecho de Taiwan.
A pesar de los gestos de reconciliación que ha mostrado Taiwan hacia China continental desde que Ma asumió el cargo hace más de tres años, Pekín ha continuado su masivo desarrollo militar, desestabilizando el equilibrio militar en el Estrecho de Taiwan.
Toda la población participó en las múltiples actividades que se realizaron a lo largo y ancho del territorio nacional para festejar el Centenario de la República de China. Grupos religiosos de varios templos del sur de Taiwan realizaron procesiones festivas en la ciudad de Taipei. Una imagen de Matsu, la Diosa del Mar y otra de Kuan Kung, Dios de la Guerra; fueron trasladadas en sendos palanquines desde los sureños distritos de Chiayi y Tainan, cargados por sus devotos.
Por otro lado, el Ministerio del Interior reveló que un total de 5.634 parejas optaron por casarse el día 10 de octubre, en ocasión del Día Nacional. Esta cifra representa más del doble de las parejas que se casaron en el Día del Doble Diez el año pasado.
En la tarde del Día Nacional, el Ministerio de Defensa Nacional realizó una impresionante demostración de técnicas de defensa personal en la plaza del Monumento Conmemorativo Chiang Kai-shek. El evento contó con la participación de decenas de miles de espectadores.
El cielo nocturno de Taiwan se vio iluminado por los despliegues de fuegos artificiales en las principales ciudades en el Día Nacional del Doble Diez. (Foto de CNA)
El mismo se inició con un colorido número de marchas y ejercicios de fusilería por parte de la Guardia de Honor de las Fuerzas Armadas. Seguidamente, diversas unidades de fuerzas especiales realizaron actuaciones de técnicas de combate cuerpo a cuerpo.
Las actividades festivas del Día Nacional del Doble Diez fueron cerradas con broche de oro mediante un espectacular despliegue de fuegos artificiales en el Parque Industrial Changpin, en Lukang, distrito de Changhua. A las siete en punto de la noche, se disparó el primer cartucho de 16 pulgadas que reventó en el aire con una bola luminosa de 600 metros de diámetro.
Más de 200 mil espectadores se congregaron en el área del distrito ubicado en la región central de Taiwan, exclamando con asombro y júbilo a medida que estallaban al frente de ellos fuegos de artificio en la forma del número 100, de flores y de rostros sonrientes.
En el espectáculo de gala que duró 40 minutos, un total de 40 mil rondas de fuegos artificiales fueron disparados al aire, iluminando el cielo nocturno de Changhua y llenando de regocijo a sus pobladores.
Un despliegue más reducido de fuegos artificiales también se llevó a cabo en la ciudad capital, Taipei; usándose unos 15 mil cartuchos pirotécnicos en un acto que duró 20 minutos. El evento nocturno, que se realizó en la zona de Tataocheng, estuvo acompañado por piezas musicales adaptadas de tradicional teatro de títeres, así como algunas canciones románticas en inglés.
Otros espectáculos de fuegos artificiales también se realizaron en las principales ciudades de Taiwan, marcando un gran final para todo un día festivo en ocasión del Centenario de la República de China.
Texto y fotos de Luis M. Chong L.