El presidente Ma Ying-jeou condenó el 13 de octubre a los fabricantes de alimentos involucrados en recientes escándalos de seguridad alimentaria y pidió al pueblo aunar esfuerzos con el Gobierno para boicotear a dichas empresas.
El Mandatario, quien presidió una reunión de alto nivel acerca de los recientes escándalos de seguridad alimentaria, aseveró que el Gobierno dejará ver su voluntad y determinación al pueblo.
“Vamos a deshacernos de aquellas empresas que violen la seguridad alimentaria a fin de permitir que la vida del pueblo vuelva a la normalidad”, declaró Ma.
“No vamos a cesar hasta que los eliminemos de la industria alimentaria”, prometió el Mandatario.
Funcionarios del Buró de Seguridad Nacional y de agencias del orden público también participaron en la reunión del 13 de octubre, y ayudarán de forma conjunta recopilando información y pistas para ayudar a localizar a los infractores de las normas de seguridad alimentaria.
La conferencia fue convocada por el presidente Ma tras el inicio de una campaña nacional para boicotear los productos de la empresa Ting Hsin International Group, después de revelarse que una de sus filiales mezcló aceite destinado a la fabricación de alimentos para animales en su aceite de cocina supuestamente hecho a base de manteca de cerdo.
En el transcurso de la reunión, el presidente Ma propuso que el equipo a cargo de salvaguardar la seguridad alimentaria, y que labora subordinado al Yuan Ejecutivo, debe ampliarse a una oficina de seguridad alimentaria, semejante al actual sistema de prevención de desastres naturales y operaciones de rescate.
En una noticia relacionada, se estima que la serie de escándalos relacionados con el aceite comestible que implican a Ting Hsin International Group han causado, desde octubre del año pasado, pérdidas a la economía calculadas en más de 230 millones de dólares estadounidenses, declararon funcionarios de la Dirección General de Presupuesto, Contabilidad y Estadísticas el 13 de octubre.